Mariposas en el cerebro (yaoi)

capítulo 6

Amaneció en la ciudad nevando. Al fin. Viernes. El primer viernes que saldría sin Sasha y Jack...

Me levanté con los ojos hinchados y rojos. Estaba sorprendentemente clamado y tranquilo. Bostecé dos veces ganandome lagrimitas. Me aseé y vestí lentamente.

Caminé hasta el instituto. No tenía ganas de nada, solo de él. Anduve el pequeño tramo hasta mi asiento tranquilamente.

-Hey Eren- Sasha se sentó en mi mesa sonriente

-¡O-oye! ¡vete a tu clase antes de que te pillen!

-Tranquilo, todavía no ha tocado. Además, quería confirmar una cosa...-dicho esto acercó su cara a la mía- ¿es verdad que irás a la fiesta de Petra?

-¡Ah! -desvié la mirada- si...bueno, no se...

-UUhh y yo que compré una peli para que tu, Jack y yo la veamos en mi casa...eres malo

-Bueno, ya sabes que no puedo, mirarla vosotros...¿cual es?

-Es la nueva película que se acaba de estrenar de Shingeki No Kyojin...

-¿¡QUE?! Oh, dios, eh esperado tanto para ver la mejor película del mundo y justamente ese día me invitan a una fiesta a MI.

-Bueno, si quieres puedo prestartela, pero como encuentre un solo rasguño estás muerto, ¿si?

-Me asustaría de tu comentario si fuese otra peli, muchisimas gracias Sas, eres la mejor

Me hubiera gustado mucho seguir hablando con ella pero tocó la campana del inicio de clases.

-¡Ah! se me olvidaba- dijo Sasha antes de irse- eres un chico con suerte, Reiner se sienta a tu lado.

-Es solo temporal, hasta que le lleguen los libros

-Aprovechalo mientras puedas- dicho ese incómodo e infantil comentario se fué riendo.

El resto de los cinco minutos me los pasé dibujando anime.

-Eren, me pongo a tu lado hoy también, ¿si?- dijo Reiner, me sobresalté, no había notado su presencia

Llevaba unos cascos blancos, de la marca Sonic RS. 

-¿Que escuchas? -le pregunté

-Adele, ¿quieres?- acercó su oído al mío mientras se sentaba a mi lado.

Someone Like You

-Me gusta muchisimo, Adele es buena.

-Asi que te gusta- me miró fijamente- no lo demuestras.

-¿P-perdon?

-Digo que no te he visto escuchar sus canciones- desvió la mirada.

-Ah, bueno, no puedo escuchar todas las canciones que me gustan a la vez- le sonreí avergonzado.

La profesora de matemáticas llegó. Que aburrimiento de hora, encima no tenía ganas de nada ahora.

Ya habían pasado las primeras 3 horas cuando sonó la campana para ir al recreo.

Dispuesto a irme a la biblioteca a leer alguna novela policíaca, me llevé la mochila. Pero una mano en mi hombre me detuvo.

-¿Quieres venirte con nosotros?- Reiner señaló a un grupo de nuestra clase.

-Pero iba a leer, lo siento- me aparté de él

-Vamos, no muerden- lució su mejor sonrisa con esos dientes tan blancos. 

Tu eres el problema.

Miré a los de atrás, estaban esperando a mi desición. No quería que esperaran mucho, y si decía que no a Reiner, seguro que seguiría insistiendo. Al final asentí resignado.