Capítulo 5
-¿Tienes novio?- Su pregunta aún seguía rondando en mi cabeza, no fui capaz de responderle ya que me fui directamente hacia el elevador, sin dejarle tiempo a Harry para reaccionar, era una cobarde al no poder enfrentar mi pasado.
Salí lo mas rápido posible de aquel edificio para así poder huir de aquel lugar, no quería saber nada mas de Harry por hoy, así que una vez que estuve en la vereda, tome el primer taxi que paso, luego le pagaría al chofer cuando llegara a casa, una vez que me monte arriba del coche pude sentir unos golpes en la ventana, era Harry el que me pedía que me bajara, pero hice caso omiso a sus palabras y le dije al conductor que condujera.
Una vez que lejos del edificio me sentí un poco más aliviada, lo único que quería era llegar a mi casa y acurrucarme en mi cama.
Unos 20 minutos pasaron hasta que llegamos a hasta mi departamento, le pague al taxista para luego entrar nuevamente hasta mi propiedad, cerré la puerta de mi departamento y rápidamente las lágrimas salieron había sido un día de mierda, porque no había otro palabra para describirlo, quería ver a Louis lo necesitaba, me encontraba tan sentimental en estos momentos, me acerque hasta mi cama para así ponerme mi pijama para poderme más cómoda, luego de quitarme mi uniforme y estar en mi Pijama de piolín, me fui hasta mi congelador para sacar mi helado de chocolate para casos de extrema tristeza, una vez que estaba preparada psicológicamente para ahogar mis penas, me acosté en mi cama y puse alguna película que estuvieran dando en el cable, la puse en una película que se llamaba no se aceptan devoluciones, al principio la encontré entretenida pero a medida que la película avanzaba mis ojos parecían las cataratas del Niágara la película era jodidamente triste.
De repente un ruido me hizo salir de mi trance, ¿Quién había entrado a mi departamento?, me levante lentamente de mi cama, para así evitar de hacer ruido, tome la cuchara de mi helado para usarla como arma, y camine hasta el living de mi departamento, pude ver a una persona sacando algunas cosas de una bolsa, cuando se giró y pude ver su rostro me lance a sus brazos de tal manera que quede igual que un koala aferrado a un árbol, y me puse a llorar en su hombro.
-Tranquila osita- me decía mientras me acariciaba mi espalda.
-F- fue horrible- le dije mientras mis palabras se ahogaban contra su hombro.
-Lo se cariño, por eso traje todo lo necesario para hacerte sentir bien.
-¿Lo hiciste?- le dije separando mi cara de su hombro haciendo un leve puchero, mientras mis manos estaban entrelazadas en su cuello- sí, cariño sé que te pones extremadamente sensible un día antes que llegue tu periodo amor, por eso vine a cuidar de ti- ¿ mi periodo?, claro mi periodo, ¿ mañana me llegaba?, por eso estaba tan sensible, ¿ cómo no lo pensé antes?
-¿Que aria si ti osito?- le dije depositando un pequeño beso en sus labios, Louis conocía cada cosa sobre mí, bueno menos sobre los nombres de mis ex novios, a Louis le gustaba tener todo organizado, hasta tenía su propio calendario personal con mis cosas importantes, raro o no a mi me gustaba, me hacía sentir bien que él se preocupara por mis cosas, algunas veces yo soy muy olvidadiza o demasiado desordenada, pero por algo dicen que los opuestos se atraen, yo creo que esa ley nosotros dos la llevamos al pie de la letra.
Luego de hacernos unos mimos y decirnos lo muchos que nos extrañamos, Louis empezó hacer la cena, hoy le tocaba ha el cocinar mientras que a mí me tocaba lavar la loza, pero como hoy es mi día especial Louis no me dejaba hacer nada y me atendía como una princesa, una vez que cenamos empezamos a conversar con Louis sobre su trabajo, Louis trabajaba en una aseguradora y también trabajaba en un programa de radio que lo transmitían los días Miércoles y jueves por la noche, Louis claramente disfrutaba de su trabajo al 100 % él amaba lo que hacía luego de hablar sobre su trabajo, hablamos del el mío y claramente omití sobre quien era mi compañero de trabajo... Luego de que Louis lavara la Loza, este me tomo en brazos y me cargo como un bebe hasta mi habitación ya eran las diez de la noche y yo estaba completamente exhausta haciendo que me quedara dormida entre sus brazos inmediatamente, a la mitad de la noche desperté con unos dolores insoportables, bueno ya sobran porque razón, trate de no despertar a Louis pero me fui imposible hacerlo, porque me encontraba enrollada entre sus brazos.
-¿osita que pasa?- me dijo un Louis somnoliento.
-Me duele, mi pancita- le respondí como una niña pequeña, Louis inmediatamente encendió la luz del velador para luego sacar unas pastillas de este y pasarme un vaso de agua.
-Siempre preparado...
-Siempre lo estoy cariño- me dijo depositando un beso en mi frente-Ahora ven- me dijo para posicionarme en su regazo mientras ponía una mano en mi vientre para luego dejar pequeñas caricias sobre este, Louis sabia como tranquilizar mis dolores menstruales- ¿Está pasando un poco el dolor?
-Si osito se está calmando- le dije refugiándome en su torso desnudo, este era el lugar donde mi ser y mi cuerpo querían estar, en los brazos de la persona que amo.
