세 - Atragantamiento

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"Mañana volverá a estar nublado al igual que hoy. Hay un 80% de precipitaciones, no se olviden de llevar su paraguas" Eso dijo el señor del tiempo en las noticias mientras cenaba en el sofá con Jin.

—¡No te olvides del paraguas Hana! —Gritó mi hermano desde su cuarto.

—¡Lo puse en la mochila anoche, esta bien, me voy! —Contesté yo.

Como de costumbre salgo unos minutos antes que mi hermano hacia el instituto. De camino pasé por una tienda cercana y compré un pastelito. Esto era lo bueno de salir antes, podía comer pastelitos y mi hermano no me tendría que regañar por ello.

—¡Enana! —Llamó una voz que me sorprendió.

—¡Solo es un pastelito! ¡No es un crimen! —Exclamé.—Oh, eres tu Jimin-ssi.

—¿Quién mas pasaría por este camino para ganarse un trocito de pastel?

—Jeje.—Este empezó a caminar hacia mi sin quitar la mirada de mi preciado tesoro.—Espera, Jimin quieto. ¡Jimin, no robes!

Él llego a donde estaba, me agarró de la muñeca con suavidad y le dio un mordisco al pastel.

—¡Jimin! —Exclamé haciendo un puchero. Este se dedicó a pasar su lengua por los labios para terminar de saborear y sonreír de manera picara. He de decir que me mataba un poco cuando hacía ese gesto pero era algo propio de él, nos conocíamos desde hace unos cuantos años.

—¡Si seguimos así llegaremos tarde! —Me comí el ultimo bocado cuando este empezó a correr hacia el instituto aun con su mano en mi muñeca.

Cuando llegamos dejamos los zapatos en nuestras respectivas taquillas y nos pusimos los de interior. Típicas normas de Escuela.

Entramos al salón donde se encontraba Hyo y hablamos hasta que entró la insoportable profesora de Biología que no se callaba ni bajo el agua. Pasaron las clases hasta que llegó la hora del almuerzo.

—¡A comer, por fin! Un minuto mas y estaba por tirarme por la ventana.

—¡Hana! ¡Habérmelo dicho y nos tirábamos juntas! —Dijo con el ceño fruncido Hyo y reímos

—Ya, ya, luego me toca a mi llamar a la ambulancia.—Mencionó Jimin rodando los ojos.

—¡Anda! Si seguro que te nos unirías.

—No encuentro fallas en su lógica. 

—¡Ya vamos que nos quedamos sin comida! —Exclamó Hyo levantándose del sitio.

Fuimos a la cafetería, agarramos nuestros almuerzos y nos sentamos en la mesa de siempre, donde se podía ver la mesa de Jungkook, Jin, Taehyung y compañía.

—¡Que aproveche! —Empecé a zamparme la comida.

—¡Te vas a atragantar Hana! —Exclamaron Hyo y Jimin a la vez.

Narra Jungkook

—¿A quién tienes que enseñar? —Preguntó Hoseok.

—A una chica de cuarto. —Contesté mientras comía.

—Pff, que pereza me daría. —Dijo Yoongi.

—Una chica, eh. —Mencionó Namjoon.

—¿No será la que se esta atragantando a punto de morir?—Preguntó Taehyung.

Me giré y ahí la pude ver. Estaba roja como un tomate y su amiga dándole palmadas en la espalda mientras el otro chico le daba agua.

¡Me Gustas! // JjkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora