¿Por qué simplemente no lo admites? Me amas - hablo ella desesperada
Por qué eres una sucia prostituta - gruño el tan brutalmente que la hizo dudar si en verdad ese hombre merecía tener su corazón. Pero desgraciadamente ya era demasiado tarde para...
Gracias Asdrúbal, nos vemos - dije apresurada antes de besar sonoramente su mejilla y sonrió
Cuidate, pasatela bien - dijo sonriente y le envié un beso a Haydee quien nos veía espectantes
Nos vemos Hayd, cuidense - dije sonriendo y me devolvió el beso
Cuidate - murmuró y tome la mano de Álvaro quién vino corriendo a mi para luego encaminarnos hacia la salida de la librería
Adiós - grito Álvaro mientras agitaba su manita y sonreí al ver a mi chico del otro lado de la acera
Hola mi amor - saludé besando sus labios una vez cerca y tomo mi cintura entre sus manos cariñosamente
¿Todo listo? - pregunto y asentí besando su mejilla - ¿Qué tal todo campeón? - pregunto mirando a Álvaro y este comenzó a contarle su día animadamente
¿Primer destino? - pregunto y lo mire obvia
Guardería Marcus, guardería - dije graciosa y después de guiñarme uno de sus hermosos ojos grises nos dirigimos a su auto. Se preguntarán ¿Qué diablos está pasando aqui? Bueno les cuento.
Días después de haberme enterado de que Asdrúbal perdería su casa, decidí viajar a California a cobrar mi herencia, sabía que ese dinero había sido todo mi trabajo en ese horrible lugar así que no tenía por qué sentirme mal al cobrarlo. Finalmente había pagado la hipoteca de su casa y había comprado una cadena de librerías que con un poco de regeneración tuvieron un gran éxito a los meses de su apertura en todo el país, realmente fue por Asdrúbal, siempre estaría eternamente agradecida con el por lo que el y yo ahora éramos socios.
Se preguntarán ¿Qué pasó con Asdrúbal y yo? Bueno después de un tiempo tratando de tener algo con el me di cuenta de que jamás podría llegar a amarlo como él lo requería así que puse las cartas sobre la mesa y después de hablarlo, lo acepto y como sabrán ahora está en una relación con Haydee Y yo bueno..... Ahora salía con Marcus, el era el médico del hospital en el que estuve internada cuando había atentado contra mi vida y el mismo era quien me había convencido de no abortar......
¿Nena? - una finca voz me saco de mis pensamientos y gire mi rostro mirando a Marcus - ¿Te parece salir a comer después de la librería? - pregunto y asentí feliz
Claro, me parece bien - dije y estiró su mano libre en señal de que la tomara a lo cual la tomé con entusiasmo y la lleve a mis labios para brindarle un par de besos
Anta ¿Mañana hay escuela? - pregunto Álvaro y me gire a mirarlo
No cariño, hoy es viernes - dije y grito feliz - esperen aquí, ya vengo - dije mirando a Marcus mientras abría la puerta del auto y después de cerrarla me dirigí hacia la guardería la cual se encontraba frente a mí
Antara ¿Tan pronto? - pregunto la encargada y asentí mientras sonreía, casi nunca dejaba a mi pequeña Asha en la guardería, sólo cuando tenía mucho trabajo, cómo hoy por ejemplo
Hola pequeña - murmure bajito cuando me entregaron su carrito y sonreí al verla dormir - gracias, nos vemos - me despedí una vez que la tuve en mis brazos y la cubrí bien antes de salir. Todos decían que era idéntica a mí, pero sus ojos...... Sus ojos siempre me lo recordaban a él, era como si a través de sus ojos tenía qué sentirme culpable y atormentada de recordarlo aun después de todo lo que me hizo, aún después de cómo me destruyó. Sus ojos me hacían recordarlo cada maldito segundo del dia.
¿Amor? Te llaman - la voz de Marcus me saco de mis pensamientos y fruncí el ceño confundida mientras entraba por completo al auto después de dejar a mi pequeña en su sillita para niños.
¿Quien? - pregunté y se encogió de hombros - ¿Hola? - conteste pegando el teléfono en la oreja y abrí los ojos sorprendida al escuchar su voz, esa voz
¿Antara? - murmuró con voz aterciopelada y trague grueso, las palabras se habían quedado atoradas en mi garganta de un momento a otro.....
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