He creído en lo imposible hasta que se destrozaron mis metas. He abrazado a la persona que pensé que nunca me haría daño y me he dado cuenta de que esa persona no se merecía ni el roce de mi piel. He cantado en la ducha hasta que mi garganta no podía más. Ha habido días que me sentía preciosa y otros que no quería ni mirarme al espejo... Y he aprendido poco a poco en que consiste la vida. El secreto de la vida está en no arrepentirse de nada y afrontar todo con una sonrisa.