Quiero ser yo, quiero poder encontrarme, saber quien soy realmente. Quiero poder salir a la calle sin miedo y segura de mí misma, sin importarme lo que puedan pensar de mí, quitar todos los pensamientos malos de mi cabeza, quiero poder mirarme al espejo sin tener náuseas, quiero poder dejar de llorar cada vez que me veo reflejada, poder dejar de oír cuando me hacen sentir mal. Y muchas veces no son personas externas a ti las que te causan el dolor, son personas muy importantes, como amigos y familia, esas personas que pensabas que nunca te harían daño. Quiero dejas de escribir para personas que no se merecen ni respirar mi aire por tal daño que me hicieron, porque esto no lo van a leer y yo no tengo los cojones de decírselo. Quiero volver a creer en las personas como lo hacía antes, con ilusión y esperanza. Quiero sentirme querida de verdad, pero, si no me quiero ni yo misma, ¿quién va a quererme? ¿Quién va a querer a un saco de desastres como yo? Me siento un caos, quiero poder encajar en un sitio y poder sentirme agusto y bien conmigo misma sin pensar en los kilos que me sobran o me faltan, sin preocupaciones, sin miedo... Escribo por desahogo y al final acabo ahgándome más en mi propia mierda, será porque me guardo todo para mí y no me acostumbro a hablar sobre las cosas que me preocupan o me importan, porque me siento vulnerable, es como si te diera el arma perfecta para destruírme por completo, porque no quiero ser débil, quiero dejar de esconderme para llorar y quiero poder ser yo sin que me critiquen por ello, tan solo quiero ser yo.