JIMIN:
Al entrar a la fiesta, inmediatamente me sentí incómodo, las personas me miraban extraño y de una manera tan intimidante que aquella confianza que había tomado hace unos segundos, se esfumó tan rápido como llegó
Podía identificar a uno que otro chico, ya que ellos en algún momento me habían jugado alguna broma o hasta golpearme, inmediatamente me tensé pero Jungkook quien en ningún momento dejó de sujetar mi mano, comenzó a acariciarla con ternura.
- Hay que divertirnos, Jiminnie- Depositó un beso en mi mejilla, las personas nos veían confundidas e incluso algunas con muecas de asco. Sin embargo no me importó y asentí apretando aún más su mano
- ¿Acaso aún no termina con su "misión"?- Comentó un chico mirando Ji-Eun
- Resulta que Jeon de repente decidió no hacerlo
- ¿Qué? Entonces... ¿No es actuado?- Comentó otra chica
- Desafortunadamente no, pero yo tengo un plan
Ahora Jimin y Jungkook se encontraban en la pista bailando y riendo juntos en su burbuja. No les importaba todas esas miradas y comentarios. Ellos eran felices juntos.
El chico de cabellos oscuros decidió ir a la cocina por un vaso con agua acompañado de Jungkook, fue divertido haber bailado con él, aunque también agotador.
- Vaya, jamás me había divertido tanto- Sonrió Jimin bebiendo de su agua
- Bailas muy bien, Jimin- Comentó el más alto sirviendo un poco de agua en un vaso para comenzar a beberla
- Yo sólo me dejé llevar por la música. No suelo ir a fiestas, ¿enserio es tan divertido?
- Bueno... Hay de fiestas a fiestas. Pero esta es en la que mejor he estado porque el simple hecho de que tengo a un hermoso acompañante
- Kookie- Un bonito color rojizo invadió las mejillas de Park
- Es la verdad, eres realmente hermoso, Jimin- Acarició su mejilla con ternura
- ¿T-te puedo hacer una pregunta?- Dijo jugando con sus dedos
- Claro- Respondió Jungkook mirando al de menor estatura curioso
- La primera vez que hablamos... Tú me dijiste que te gusto y mi pregunta es... ¿desde cuándo?
Y ahí fue cuando la realidad y sentimiento de culpa invadió a Jungkook nuevamente.
Su expresión se tensó y era muy notorio. ¿Cómo decirle al menor que al principio sólo le habló por un reto pero que ahora todas sus acciones no son actuación?, ¿Cómo decirle que ni siquiera él mismo sabe cuándo sus sentimientos cambiaron porque llegó a un punto en el que todas las cosas que hacía y decía las hacia sin siquiera pensarlo?... ¿Cómo decirle a ese chico que únicamente le habló para verlo sufrir?...
Jimin al no escuchar una respuesta de su parte, inmediatamente contestó.
- Jamás me llegué a imaginar de que le gusto a mi "amor platónico". Tú jamás me molestaste o me dijiste cosas hirientes, realmente estoy muy feliz por eso- Sonrió cálidamente mirando hacia abajo, sus ojos se veían un tanto cristalinos- Y sólo quería decirte "gracias" por no molestarme cuando era y sigue siendo "moda", por hablarme y estar conmigo aunque nos miren raro, por mostrar cariño hacía mí sin importar los comentarios. En verdad, lo agradezco mucho.
Finalmente Jimin alzó la mirada, una bella sonrisa adornaba su rostro con algunas lágrimas en sus mejillas.
Una puñalada más en el corazón de Jungkook. Hubiera preferido un millón de veces jamás haberle hablado a Jimin, simplemente mirar y no decir ni hacer nada que todo lo que hizo.
Sintió un delgado cuerpo abrazándolo y él inmediatamente correspondió con lágrimas en los ojos.
- Te quiero
No se merecía a Jimin, él es un bello ángel y él un horroroso monstruo que quiere protegerlo después de ilusionarlo con bonitas mentiras.
- Y-yo... También te quiero, Jimin
¿Y ahora qué podía hacer?
Era un cobarde por no enfrentar sus temores porque ahora su mayor temor era que Jimin descubriera la verdad porque eso lo lastimaría.
Ya no era agradable ver a Jimin triste ni mucho menos imaginarlo sufriendo aún más.
Maratón (2/4)
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Detrás de esa sonrisa [Kookmin]
FanfictionJeon Jungkook odiaba a Park Jimin, un chico de su grupo debido a que siempre sonreía y se veía tan feliz. "¿Acaso es lo único que sabe hacer?" pensaba Jungkook "Me gustaría borrar es estúpida sonrisa", le decía a sus amigos, hasta que a uno de ellos...