No contact | ProduceX101

6. No seas un idiota.

—Deberías mandarle un mensaje —susurra para sí mismo.

Byungchan lleva un rato mirando el contacto de Jinhyuk. Tres días desde que lo tiene y aún no le ha dado uso. ¿No es ya el momento de que le hable? Sabe que sí, pero duda.

"¿Qué podría decirle? ¿Hola Jinhyuk? ¿Y si es mayor que yo? ¿Es un año mayor, verdad?" No sabe por dónde empezar. No sabe si debe usar honoríficos, no sabe qué podría decirle siquiera. ¿Tan difícil es?

—¡Seungwoo-hyung! —Grita a su compañero de piso. Pero él no contesta. Está hablando por teléfono con su padre, quien resulta que en la ciudad ha encontrado el amor y está pensando en casarse. Es inútil pedirle algo, está demasiado centrado en la llamada.

Sigue contemplando su móvil, cómo lo tiene agregado en contactos, el número... todo. Así permanece hasta que Seungwoo termina la llamada, ahí es cuando le pide que envíe por él un mensaje. Seungwoo tiene experiencia en casi todo, siempre sabe qué hacer y de qué manera, por ello es idóneo para todo lo que pueda necesitar —además de que, obviamente, es un amigo espectacular—.

—Hecho —cuando termina de escribir y enviar el mensaje, le da el móvil de vuelta. Ya no hay marcha atrás.

Lee el mensaje, palabra por palabra, analizándo todo lo escrito. "¡Hola, Jinhyuk-hyung! Veo que no me has llamado, ¿seguro que no necesitas nada? ¿Estás bien? Aún tengo que compensarte."

—Maldito Han Seungwoo —susurra Byungchan. Seungwoo llega a escucharlo y le golpea el brazo en el que no sostiene el móvil.

—He hecho lo que me has pedido, no te quejes. Además, conoces algo a Jinhyuk y tiene tu numero ya, no es tan mala idea decirle eso. Si te contesta que está aburrido, queda con él, no lo desaproveches —aconseja. —No seas un idiota, Byungchan.

No al momento sino quince minutos después, Jinhyuk contesta el mensaje. No necesita nada, dice estar a gusto, aunque Byungchan no sabe que no es del todo cierto. Se despreocupa y se anima a tratar de seguir la conversación, mas no es capaz de hacerlo como desearía.

Al cabo de un rato hay un avance en la conversación, sin embargo, acaba tomando un rumbo que Byungchan detesta. Jinhyuk dice conocerle de algo pero no recordar muy bien de qué; él lo sabe perfectamente y no se atreve a decírselo. Se quedan estancados en ese punto y ni uno ni otro sabe qué hacer.

Byungchan vuelve a recurrir a Seungwoo y él le da un consejo que se niega a seguir, no en esa situación: que sea sincero. No quiere serlo, no por el momento. Ocultar algo no cuenta como mentir, ¿verdad? Es una mentira a medias, de eso trata de autoconvencerse.

En el tiempo que el chico conversa con Jinhyuk, el mayor se va de la vivienda. De no ser porque lo ha gritado, ni se hubiese percatado, ya que está absorto en sus pensamientos.

Seungwoo va a la dirección que su padre le ha dado. Es la casa de su novia, una mujer a la que conoció en unas vacaciones y de la que acabo enamorándose. Tiene un hijo también, pero no se han visto nunca; no se ha dado la ocasión de que los cuatro coincidan.

Toca el timbre del portal y la voz de un chico, probablemente un niño, contesta. No sabe qué decirle para que pueda pasar, dice su nombre y menciona que su padre está ahí; el supuesto niño entiende de lo que habla y abre.

En cuanto entra en el piso, su padre grita desde el salón pidiéndole que vaya ahí. En cuanto entra lo ve a él con su pareja y, sentado al lado de su pareja, un chico que se le hace familiar pero no cae en quién es. Por lo que sabe, es el hijo de la mujer aquella.

—Seungwoo, ella es Jiyoon, mi pareja. Si no me equivoco, ya os conocéis, ¿verdad? —Seungwoo asiente y la saluda con una reverencia. Señalando al niño que está presente, continúa —: este es Dongpyo, el que será tu hermanastro a partir de ahora. Está terminando secundaria, no le quedan muchos años.