Chasing the Sun (Chanbaek)

Capítulo 14

La ardilla se sentía sumamente nerviosa invadiendo el territorio de la manada Choi mientras los lobos entrenaban... sin camisa. Sus mejillas tenían un dulce rubor que acompañaba a sus ojitos bajos que evitaban ver la desnudez de los hombres ahí presentes, mientras que estos lo escrutaban con la mirada y cuchicheaban entre si burlándose de la temerosa ardilla. ¿Acaso era tan raro que una ardilla camine entre lobos semidesnudos llevando un ramillete de bellotas en sus manos?

Siguió su camino buscando a JongDae hasta que se topó con un cuerpo frente a él, su aroma no lo reconocía lo que lo asustó aún más.

- ¿Buscas a alguien, ardillita?

Oh, ese sobre nombre sólo sonaba bien si JongDae se lo decía, una lástima que para darse cuenta que debían estar juntos se haya tardado tanto.

- Yo... s-si...

- ¿Y no preferirías quedarte conmigo?

No, definitivamente no quería. ¡JongDae! ¿Dónde estaba su JongDae cuando se necesitaba?

- Es-estoy buscando a Jong-Dae –tartamudeó nervioso.

El cuerpo en frente de él se tensó, y sus labios se torcieron en una mueca de disgusto. Era claro que el hombre frente a él y JongDae no simpatizaban ni un poco y su pregunta lo molestó.

- ¿Estás hambriento? –le preguntó con un deje de burla en su voz tomando entre sus manos el ramillete de bellotas-. Creo que no deberías comer más, ardilla, un poco más y podrías pasar por un pelota.

Minseok bajó su rostro y trató de controlar su respiración para no llorar frente al idiota que lastimó su muy sensible corazón. Tal vez tenía razón, y eso le hizo pensar en porqué le traería bellotas a un carnívoro. O su juicio estaba nublado por los nervios o bien por el hambre.

- ¿Y si mejor dejas de fastidiarlo y te largas a entrenar? –refunfuñó JongDae arrancándole el ramo de bellotas de las manos a su subordinado.

- La ardilla te trajo su almuerzo, si no te das prisa él se comerá todas las bellotas –se burló el otro recibiendo un golpe en la nariz por parte de JongDae.

- Si no te largas ahora pasaras lo que resta de tu vida haciendo de bolsa de boxeo.

Bajo la amenaza, el agresivo lobo se marchó gruñéndole a la pareja. JongDae, entonces, le tendió el ramillete a Minseok pero este denegó diciendo:

- Eran para ti.

- ¿Por qué?

- Yo... venía... quería...

- Tranquilo –trató de calmarlo acariciando su cabecita-. ¿Me dirás a qué viniste?

- Lo siento –casi susurró-. He sido muy tonto y yo..., tal vez ni siquiera te gustan las bellotas, debí traerte un ramillete de conejos o...

JongDae quiso reír por los balbuceos de su ardillita, se veía tan tierno y le pareció muy romántico el ramo de bellotas aunque ciertamente no las consumiese en gran cantidad.

- Pero tengo amigos conejos y no me gustaría que te los comieras ... debí ser yo en un ramo y tal vez...

- Minnie –lo cortó luciendo una sonrisa dulce en el rostro- ¿está todo bien?

- ... te amo, te amo mucho – le dijo ocultando su avergonzado rostro entre sus manos-, y no sabes cuánto lamento haberte tratado tan mal, yo estaba asustado y...

JongDae abrazó a Minseok y besó su frente para calmarlo. La ardilla se dejó abrazar y mimar, se sentía como una pequeña cría otra vez, tan temeroso pero tan ansioso por un par de caricias.