Un día para las dos

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Jueves; partido de quidditch perdido. Gryffindor estuvo alineado y parsimonioso y de esa manera es como perdimos contra los Hufflepuff, logrando anotar los tejones un total de 190 puntos. Los Gryffindor estaban desganado ese día por tal paliza por parte de esa casa, aunque no tanto si hubieran perdido contra su enemigo por tiempos inmemoriales, si ese fuera el caso estarían días peleados las serpientes y leones. Como ese no fue el acontecimiento; estamos en paz con los Hufflepuff.

Ese día estaba relativamente tranquila y con ganas de estar pendiente sólo del partido sin obtener un resultado favorable claramente. 

No me di tanto dolor de pecho por eso, daba igual si perdía o ganaba lo que importaba era volar en la escoba. Era algo que le gustaba después de ser arrastrada al equipo, creería que iba a durar un mes o menos que eso, que se desvincularía del equipo al siguiente día pero eso no paso. Después de estar volando por unos minutos me di cuenta de lo grandioso y divertido que es estar allá arriba; «Sumamente entretenido y confortante.» 

Sólo que no hay momento para apreciar la belleza de la vista cuando una pelota asesina pasa a un lado de tu cabeza una y otra vez. Las probabilidades de que mueras practicando este deporte es alta, más para esas personas que sólo van para montarse en una escoba ''libremente'', supongo que ese caso particular soy yo y no me arrepiento de nada.

—No hay paz interna, no la hay...—Repetía una y otra vez en el campo con el cual apenas sobrevolaba el suelo mi escoba; mi mirada seguía en los chicos que jugaban con entusiasmo.

—¿Buscas tal cosa en este deporte?

—Dime...¿Por qué quisiste practicar hoy?

La chica al lado mio respiro hondo y me sonrió ampliamente.

—¿Por qué no?—Respondió montando su escoba.—Por lo menos está soleado, no te vas a congelar por mi culpa.—Añadió tomando vuelo hacia el grupo de chicos que practicaba unos cuantos metros arriba.

Me quede en mi sitio con una mirada perdida en la rubia que ahora se unía a los demás jugadores. Su cabello extrañamente lacio el día de hoy se encontraba sin escape por el gorro de lana que lleva; su ropa deportiva tan característica llevaba los colores de su casa, negro con verde. Su sonrisa mientras jugaba y como maniobraba con la escoba a la perfección era de admirarse; «Es increíble.» Ver a Alison no es perder para nada el tiempo es un deleite para los ojos de cualquiera y yo podría estar un buen tiempo mirándola sin hacer nada más; Si no fuera claro por una Quaffle que iba en dirección a ella en este momento:

Un reflejo de supervivencia tuve que elaborar para esquivar la muerte o una salida rápida al hospital con vendas en la cara. Apreté mi escoba con fuerza y gire a un lado fuera de su camino; la Quaffle se termino estrellando contra las gradas tras ella.

«Poco más y podre ver a los Thestrals»

—¡Oigan, me quieren matar!—Les grite tomando vuelo hacia el grupo, que ahora se carcajeaba entre ellos de lo que era un posible intento de asesinato.

—Pues es que desde que venimos al campo has estado allí abajo sin moverte.

—Con cara de memo.

Agregaron Caleb y Lucas que no paraban de reír; Toby sonreía tímidamente y a Alison se le notaba apenas una media sonrisa. Sus ojos que suele ser más expresivo que sus gestos se le notaba que se la estaba pasando bomba con la situación. Alison irguió su espalda, acomodo su gorro y guantes sólo par después guiñarme un ojo y salir volando hacia los extremos del campo. 

Perseguirla ahora era el juego que ella quería iniciar, remplazando así lo que viene siendo la practica de quidditch.

—¡Para jugar tiene que haber Quaffle Alison!—Le grito justo detrás de ella, tratando de no perder la cercanía. 

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⏰ Última actualización: Jul 22, 2019 ⏰

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El Verde Es Sólo Un Color  *(EMISON)*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora