little do you know

KNOW

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El día del estreno había llegado y con ello la emoción de Donghae al estar reviviendo su relación, porque él ya sabía que se estaba muriendo aunque no lo quería creer. Sus ilusiones crecieron pues aunque solo había cruzado palabras pequeñas con Hyuk, él le había jurado que iba a ir.

A las 9 de la noche se metió a bañar, se puso el shampoo de manzanilla que le encantaba a su novio, se talló la piel con jabón de rosas y sus canticos de emoción se escuchaban. Se vistió con una camisa roja con azul marino y se puso unos pantalones de mezclilla ajustados, esos que tanto le gustaban a su novio. Peino su cabello por una hora para que cuando se recargara en el hombro de hyuk, este le acariciara un suave cabello sin nudos, se puso colonia y se encamino al cine.

Eran las 11 con 45 minutos y en la entrada del cine estaba Hae con su mochila en la cual llevaba gomitas, papas, sodas y muchos tipos de chucherías que había comprado con el dinero que se ganó haciendo la tarea de sus compañeros y aunque no había dormido en mucho tiempo, eso no quito lo feliz que se sintió cuando tuvo el dinero.

Miro por décima vez su reloj y con cada vista su corazón se estaba rompiendo. Coloco su celular en su oído y espero los tonos, la contestadora hablo. Su décimo cuarto mensaje dejo cuando el reloj marco las 12:45

-Hyukkie- rio tímidamente – ¿Vas a tardar en llegar? La película lleva media hora que empezó. No te debes de preocupar por las chuches, yo he comprado muchas y son tus favoritas. No tardes, te amo-

Al otro lado de la ciudad en un cuarto oscuro, se encontraban dos hombres y aunque el silencio debía reinar, lo que reinaba eran los gemidos de ambos mientras se besaban.

-Hyuk- fue uno de los dos nombres que se escuchó.

-Te amo minnie- fue lo que también se escuchó. Sí hyuk no hubiera puesto en silencio su celular, hubiera visto las 14 llamadas perdidas y la hora, porque había dicho que solo se quedaría un rato con sungmin pues después iría con Donghae, pero eso cambio cuando los besos se hicieron más desesperados.

-Yo también te amo monito-

-Joder- y se vino.

El castaño miraba las dos entradas de cine con lágrimas en los ojos y aventó la mochila sin importarle las chuches y lloro más porque mañana era el aniversario de ambos y habían planeado un gran desayuno.

La mañana del sábado llego y hyuk se removió sintiendo el cuerpo de alguien, sonrió y beso la cabeza y espalda ajena. Cuando abrió los ojos se desoriento un poco al encontrar una cabellera rubia y no castaña para cuando su cerebro conecto recordó y suspiro recordando con quien estaba.

Hace poco que había dejado de querer a Donghae, para ser exactos desde que sungmin apareció y es que le había parecido guapo pero con el tiempo se empezaron a llevar muy bien, tan bien que Hyukjae había dado el primer beso y después empezaron a salir después de la escuela y cuando una tormenta cayo y no había nadie en casa, la pasión dio paso a un revoltijo de cobijas.

-Sabes- su conejo llamo su atención –bueno... ¿tú me amas?-

-Claro- y aunque debió dudar no lo hizo.

-Entonces ¿por qué sigues con Donghae- le robo un beso –Me puse muy celoso el día que se te colgó en la espalda-

-Tranquilo amor, de hecho...- le cayó en cuenta el día –Mierda- se paró y se colocó los calzoncillos y demás –Me tengo que ir-

-Hyuk yo te amo- lo llamó –Así que si de verdad me amas, por favor no hagas más larga mi espera-

-No lo hare-

Mientras esperaba el camión se puso a escuchar los tantos buzones de voz que tenía

"Hola amor, faltan 15 minutos para que empiece"

"Monito hermoso te estoy esperando frente al cine"

"Cuando llegues nos vamos a reír mucho, hay mucha gente vestida de superhéroe"

Eran demasiados mensajes así que se saltó a los penúltimos

"¿estas otra vez comprando chuches? Trabaje toda esta semana para comprarlas yo, así que no te preocupes"
"Hyukkie, ¿Vas a tardar en llegar? La película lleva media hora que empezó. No te debes de preocupar por las chuches, yo he comprado muchas y son tus favoritas. No tardes, te amo"

Bajo y toco la puerta

-Hyukkie- se abrazó –Monito-

-Tenemos que hablar- su semblante frio desconcertó a Donghae.

Cuando el rubio entro pudo visualizar un jarrón con rosas marchitas, hace tanto que no le daba una a Hae que ya se le habían secado, la última que le dio fue cuando el pequeño le conto que lo habían golpeado. Se la regalo porque él había estado presente, bueno algo así, estaba besando a Sungmin detrás de la escuela cuando escucho que estaban golpeando a alguien pero no le tomo importancia pues no quería gastar el tiempo que tenía con el rubio.

-Deja voy por mi celular y nos vamos al centro comercial- ya que era su aniversario, ellos siempre iban a la máquina de fotos donde Hyukjae le había pedido ser su novio y le había prometido amor eterno, lo que no sabía era que hyukjae había follado en esa máquina con sungmin y que las fotos que se tomaban, hace mucho que se habían ido en el camión de la basura.

-No- lo detuvo –Necesito decirte algo-

-Lo que paso ayer no tiene importancia- le sonrió

-No es eso Hae- suspiro al ver que los ojos del castaño se querían cristalizar –Yo creo que debemos terminar, más bien quiero terminar-

-Es broma. ¿Es por que hoy no te hice panqueques de monito?-

-No, no es broma. Ya no te amo- sentencio –lo siento-

-Espera Hyukkie, quizás estas confundido, si debe ser eso. Pero si te quedas veras que todavía me amas-

-No-

-Por favor, Tú y yo nos amamos, lo he sentido cuando hacemos el amor, cuando salimos, cuando nos besamos...-

-Yo te deje de hacer el amor desde hace un buen tiempo, ayer le hice el amor a sungmin y se lo he estado haciendo desde hace un buen tiempo-

-¿por qué?- las lágrimas caían por sus ojos -¿qué pasa con las promesas?-

-Son efímeras-

-Prometiste que me ibas a amar para siempre-

-Fueron frases de coqueteo-

-entonces, ¿encontraste un oso panda unicornio?-

-¿EH?-

-Nada- suspiro intentando retener sus lagrimas mientras en su boca se acumulaba una gran cantidad de saliva que intentaba tragar, pero, el nudo retenía–El viaje-

-Ya no va a poder ser-

-Por favor, como despedida- le suplico y después de un rato su novio acepto, o mejor dicho ex novio.

Ese viaje lo habían planeado para estar juntos y mirar las estrellas, cuando aun estaban juntos.