Solamente tú

Capítulo 8

NINA'S POV

"Daniel me engañó" dijo de repente.

Lagrimas comenzaron a caer por su bello rostro y enseguida la ira empezó a hervir en mi, tanto que mis manos se convirtieron en puños para tratar de calmarme.

Aún así, guardé silencio al ver que seguía hablando a pesar de estaba llorando todavía.

"Lo encontré con...Ashley...ellos...ellos estaban..." Su llanto se volvió tan desgarrador que no la dejó continuar.

La envolví fuertemente entre mis brazos para intentar confortarla, mientras sus lágrimas empapaban mi playera.

"Shh, tranquila preciosa" dije, acariciando su cabello.

Maya estaba temblando como nunca antes. Yo sólo quería que ella supiera que podía desahogarse tanto como necesitara, no importaba que tan sensible y vulnerable se mostrara, siempre estaría ahí para mi Afrodita.

Luego de unos minutos logró calmarse lo suficiente para contarme todo lo que pasó.

Resulta que el idiota de Daniel había estado muy distante con ella debido a que había conseguido un "trabajo", y por eso había planeado visitarlo de sorpresa para que pasaran todo el día juntos -haciendo lo que sea que estuvieran acostumbrados a hacer-. Así que cuando llegó a su casa y no vio a nadie en el living, se dirigió a la habitación del idiota y fue ahí cuando lo encontró en la cama con la tipa que se hacía llamar su mejor amiga.

Hijo de puta.

Así que, en conclusión, teníamos a un estúpido infiel, una zorra ex-mejor amiga y una chica- de la cual estaba perdidamente enamorada- rota, sumida en el dolor que el engaño le causó.

Finalmente sus sollozos se fueron apagando hasta que volvió a quedarse dormida, yo por mi parte seguía abrazándola firmemente contra mi pecho para que supiera que nunca la dejaría sola.

Lamentablemente me di cuenta de que no podía estar tanto tiempo con ella como quisiera, ya que Emily seguía en la cocina y no había nadie más en casa, entonces me levanté con cuidado y me aseguré de que seguía durmiendo. Se le veía pacífica y relajada.

Dejé que mis ojos la observaran por unos minutos antes de volver a la cocina siendo bastante silenciosa.

Al bajar me encontré con que Emily ya había preparado pan tostado, huevos revueltos y un poco de fruta picada.

Ella estaba sentada en un taburete, ojeando una revista y comiendo distraídamente del tazón de fruta. Me senté frente a mi ex y tomé una tostada.

"¿Sólo vas a comer eso?" preguntó aún con la vista pegada en su lectura.

Hice una mueca.

"No tengo hambre"

"No te comprendo, ¿sabes?, cuando quieres puedes comerte hasta una vaca entera, sin embrago, a penas has probado la tostada."

Por más que supiera que sólo se trataba de una broma, no pude evitar echar un vistazo a la tostada a medio comer abandonada en mi plato y me di cuenta de que tenía razón. Pero tenía mis motivos. Ver a Maya tan devastada me había retorcido el estómago y mi apetito se había ido. No podía probar bocado aunque quisiera.

"De todas maneras" siguió mi ex "¿y Maya, no va a desayunar?"

"No lo sé" dije sinceramente "Se quedó dormida otra vez." Nos quedamos en silencio durante unos minutos, hasta que Em habló de nuevo.

"Entonces..."

"¿Qué?"

"¿Ya sabes qué le pasó"- peguntó cuidadosamente.

"Sí, bueno..." dije insegura de contarle lo que Maya me confesó "Yo...uh..."

"Hey, descuida" dijo pasando su mano sobre la barra de desayuno y tomando la mía "No tienes que decirme, sólo era curiosidad."

"Gracias" dije aliviada.

No mucho tiempo después, Maya se nos unió y disfrutamos todas juntas el festín que Emily preparó, mi apetito volviendo un poco cuando vi todo lo que comieron las otras dos.