¿Un Híbrido mejor que una Mujer? |KaiSoo, ChanBaek|

Cuarta vida gastada; Señora Kim.

Había pasado un mes, en donde los Híbridos se la vivían en sus habitaciones o de vagos en las calles, pues las novias de sus Amos, se había como mudado y para evitar que sus amos se enojaron con ellos, preferían salir a la calle o simplemente aguantar ese dolor en el pecho encerrado en sus habitaciones.

La señora Kim había salido de viaje para presentar su nueva colección de ropa para Híbridos, así que ella no podía ser su salvación, para no sentir aquello, era un dolor fuerte en el pecho, junto al temible pensamiento de soledad. Porque los Híbridos no querían sentir aquello, les aterraba y no querían volver con él, que a pesar de que lo querían mucho se quedarían solos, porque él estaba ya viejo y algo enfermo y no querían sentirse más solos, ellos querían vivir.

Pero sabían que tenían tres vidas más y tenían que aprovecharlas o de lo contrario se verían en la necesidad de alejarse de ellos, aunque eso les trajera un dolor más fuerte, aunque les doliera no volverlo a ver a ellos y a los padres de ambos chicos.

Ambos estaban sentados en la cama mirándose y jugando con sus colas, ChanYeol miraba a su amigo, y el otro de igual manera ambos estaban vestidos con ropa algo ligera, hacía mucho calor y se estaban asando, pero no podían salir porque lo que menos querían es que sus Amos se enojaron con ellos y los ignoraran más de lo que ya lo habían hecho durante el mes.

Después de un rato estaban tumbados en el piso, ambos, no podían con el calor. Un alboroto se oyó abajo, dudaron mucho en si debían echar un vistazo, si estaba bien todos haya abajo. Ambos Híbridos bajaron tan sigilosamente que nadie se dio cuenta de ellos.

Pudieron observar a la señora Kim frente a sus Amos.

"¿Bien y en donde están mis chicos?", preguntó con la mirada seria.

"Umh...no estamos seguros si ellos están aquí o salieron, suelen hacerlo" contestó con titubeos JongIn.

"¿cómo qué supones? ¿Y por qué dices que a veces salen? ¿No me digas que ellos dos solos?", pregunto ahora más molesta.

"es...uhm... ellas no querían verlos y... llegamos a un tipo acuerdo... donde ellos se quedarían en sus habitaciones en cerrado-" callo cuando escucho el chillido de su madre.

"Esto es el colmo de los colmos, yo les dije que los trataran bien y no como... como si fueran estorbos, me imagino que también les dijeron que podían salir, vaya me siento decepcionada de ambos... solo me llevaré a los chicos" dijo sin mirar a los dos chicos que ahora no quería llamarlos hijos.

Camino, pero los vio a ambos ahí escondidos, ella sonríe con ternura porque aquellos dos hermosos seres no se merecían nada de esto.

"Hola hermosos, ¿entonces que dicen se vienen conmigo?", pregunto mirando a ambos.

Ambos mitad gato asintieron, a la mejor alejándose de ellos sus pechos dejarían de doler tanto, ambos aceptaron.

"Bien Kai y Baek me los llevaré, aparte tengo que estar con ellos por lo de mi nueva colección" dijo una vez que estaban ya casia en la entrada de la puerta, "pueden pasar a verlos y espero piensen bien en lo que hicieron, ya no estoy para llamarles la atención, pero esta vez me gustaría que ustedes reflexionaran sobre esto"

Salió detrás de los chicos-gato, para luego subirse en su auto directo a intentar que los chicos-gato distrajeran su mente y corazón de aquellos dos chicos.

😸😸

Habían pasado exactamente tres semanas en las que Kai y Baek se dieron cuenta de sus actos con los chicos mitad gato, JongIn y BaekHyun se había dado cuenta de su grave error y su madre tenía razón, no tenían derecho al comportarse así con los otros dos chicos, que lo único que les habían causado había sido algunos momentos agradables.

Se sentían mal y también molestos por dejarse llevar por las palabras de sus novias, no tenían derecho, ya que no era su casa de ambas niñas malcriadas y se habían aparecido solo así, después de dejarlos solos y sin darles alguna señal de vida de que estaban vivas, a veces se ponen a dudar y se ponían a pensar que sus padres tuvieran razón.

Querían ignorar aquello, porque muy, muy en el fondo sabían que sus padres tenían razón y ellos solo querían ignorar aquello, porque se negaban a aceptar la verdad, porque bien sabían que ellas solo estaban interesadas en los apellidos, en todo lo que llevaba los apellidos, porque nunca habían oído tan siquiera ni susurro un Te quiero o un Te Amo.

Aunque aquellos dos chicos no les habían dicho algo así, había sido muy lindos y no solo por haberles dicho que habían estado ansiando aquella vez compartirles aquel postre. Porque a pesar de que solo habían podido convivir con ellos un solo día, los había puesto felices, se habían sentido bien.

Y estas tres semanas se habían sentido ahogados y mal por el par, no los habían visto y se habían sentido peor aquel día en donde la noche de cine había sido cancelada, lo peor de todo es que se habían encontrado Kai y Baek en la sala con la posible esperanza de encontrarlos ahí dormidos y con alguna película puesta. No habían encontrado nada más que una sala perfectamente acomodada y en la cocina igual.

Se les había encogido el corazón ambos al ver al par de chicos mitad gato acostado en su cama y abrazados, como si intentaran protegerse de algo o alguien.

"Sabes Baek, creo que es hora de volver con ellos" dijo JongIn una vez que habían corrido a sus novias.

Si las habían corrido, porque ya no las soportaban, ni siquiera habían disfrutado de sus noches, solo habían sido caricias vacías, palabras vacías, todo era vacío, porque habían dejado que los cegaran con falsas sonrisas y falsas palabras, todo era falso.

Porque BaekHyun las había escuchado un día de esos, donde se suponían que saldrían cenar, hablar de los estúpidos que eran ambos, por creer en todas sus falsas sonrisas y su interés en ambos.

"Si JongIn, es hora de ir por ellos" sonrió y estuvo de acuerdo.

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