El Pasado De Christa; Diabolik Lovers

Capitulo 19

Los sonidos de los tacones se escuchaba llamando la atención de Yui, Christa sonreía con la bandeja dejando en medio de ellas dos.

— Toma la taza que gustes, Yui.

Yui sonrió y tomó la taza frente de ella, el té olía bastante bien. Christa sonrió tomando la otra taza.

— Muchas gracias por el té. —dijo Yui con la taza sobre sus piernas.

— Gracias a ti, hace mucho tiempo que quería tomar el té contigo pero dada las circunstancias no podiamos hacerlo. —Tomó del te. —¿que piensas de él amor?

— El amor para mí es un sentimiento puro, dejando de lado el físico que tenga..entra dentro de como es que esa persona te hace sentir cuando están juntos, te hace sentir protegida y que sin importar cuantas personas hayan mejor que tu esa persona te prefiere solamente a ti. —tomó un poco de la taza de té ocasionando que comenzará a toser.

Christa tomo la última gota de su té y dejó la taza en la mesilla.

– ¡El amor es una tontería! ¡Hace a las perdonas lamentable, lo cual eso te hace lame table Cordelia!

Ante escuchar tal nombre Yui cubrió su boca tratando de evitar vomitar, ¿la había envenenado? ¿La quería matar? ¿Cordelia? Su corazón dio un enorme dolor ocasionando que lágrimas cayeran de sus ojos y observó como pudo a Christa tenía una sonrisa y suspiro yéndose de aquel lugar dejándola en el suelo.

— ¿Yui? ¡Qué te sucedió! –corrió Subaru a ella que poco a poco se nubkaba su vista. – ¡mierda!

Fue lo último que escucho.

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Como era costumbre Subaru se paseaba solo por los pasillos, se detuvo al ver que su madre salía al jardín con rapidez pasando aún lado de él.

—Madre.. —estiró su mano hacia ella pero lo ignoro.

Ella parecía asustada, parecía triste más de lo que acostumbraba. Observó atrás al escuchar ciertos murmullos cercas de la sala de estar, bajo las escaleras y el mayordomo y las sirvientas estaban cuchillando en círculo.

—Estoy harta de esa mujer, me tiene cansada —sirvienta número 1.

—Está completamente demente, no deja de gritar como cachorrito de la calle —río la sirviente número 2.

—A diferencia que ella trata de que "no la ensucien" como si en verdad fuera bella y delicada, ¿recuerdan como gritaba de terror cuando Subaru-sama estaba con Cordelia-sama? Esa mujer si que la envidiaba bastante —dijo disgustado el mayordomo.

—Deberíamos molestarla más, ahora que la jovencita que llegó con el señorito está más que insoportable, que niña tan más loca —hizo un mechón detrás de su oreja.

—¿No creen que las señoritas Cordelia y Beatrix son más bellas que esa mujer? Es decir, la señorita Christa no tiene nada de curvas y tiene una voz irritable es horrible, espero que su locura la mate de una vez —dijo el mayordomo. —Lo peor es que nosotros parecemos sus niñeros. —pasó su mano por su frente cansado.

Subaru presionó con fuerzas sus puños golpeando la pared pasándola del otro lado, las sirvientes y mayordomos lo observaron asustados. Este sacó su mano molesto y se dirigió a él mayordomo proporcionando un golpe en su rostro haciéndolo salir volando ocasionando una hemorragia. Las sirvientas intentaron calmarlo pero este simplemente las alejo con fuerza y se acercó a él mayordomo, no podía golpear a una mujer pero podía golpear a ese hombre, no permitirá que hablaran de esa manera de su madre, que se burlaran de ella sin saber nada de lo que ocasionó que ella fuera así, esos idiotas habían levantado más su furia, el amaba a su Madre incluso en esa condición.