(7) Dip

679 49 26
                                    

(Narración omnisciente)

Ahora un par de rubios junto a una chica de cabello marrón se encontraban en la estación de policía, alarmados, con lo ojos llorosos y jadeando por haber corrido desde el lago hasta la estación. En pocas palabras fueron corriendo a avisar a la policía sobre el secuestro de Tweek Tweak, ya que aunque en muchos casos la policía de South Park no es muy eficiente, en ese momento, lo primero que hicieron fue cerrar todas la vías que permitían salir o entrar a cualquier persona y se dio una alerta a todos lo habitantes de South Park sobre el secuestro del pequeño rubio.

En poco menos de dos horas todos en South Park buscaba a rubio.

Lo señores Tweak fueron corriendo a la estación, totalmente desesperados y llenando de preguntas a Pip, Butters y Rebecca, aunque a la última no sabían muy bien quien era.

— ¿¡Donde esta Tweek!? — Llegaron gritando causando que lo tres jóvenes dieran un pequeño salto del susto. No sabían cómo explicar las cosas sin ponerse a llorar en el proceso —¡Hablen! ¡¿Donde esta?! —

— N-No lo s-se-e — Respondió Pip en medio de sollozos, sus piernas no lo soportaron y callo al suelo donde se quedo llorando, ocultando su rostro entre las manos. Butters no logro decir ni una palabra, trataba de ayudar a que Pip se levantara, pero todo era inútil.

— S-Señores, solo sabemos que un hombre extraño se llevo a Tweek — Respondió Rebecca lo mas calmada que pudo y después de dar una gran bocanada de aire. — Se lo llevo cuando Tweek estaba en el lago.—

— ¡¡Oh Dios!! ¡No! — Grito la señora Tweak soltándose a llorar. Su esposo la ayudo a sentarse y en medio de un abrazo lloraron juntos durante horas. Su Tweek, su único hijo, pensaban que si el rubio ya era un manojo de nervios, ahora podría estar muriendo de un infarto al corazón, este evento no lo podría soportar.

— Bien....Debo irme, deje mi motocicleta en el estacionamiento — Dijo la chica mientras se acercaba a los dos rubios

— E-espe-espera, ¿Co-como cono-no-ces a-a Tweek? — Pregunto Butters

— Es verdad, te me haces familiar — Añadió Pip un poco mas calmado — ¿Te conocemos? —

— Si....Mi nombre es Rebecca Cotswolds, conocí a Tweek en una página de citas — Ella trato de sonreír, pero solo logro una sonrisa muy triste, no eran las mejores condiciones para presentarse a los amigos de Tweek.

— ....si, ya recuerdo tu foto en la página — Pip se levantó y se colocó frente a Rebecca — g-gra-gracias po-por preo-preocuparte por T-T-Tweek — Pip sin ningún tipo de inconveniente la abrazo, eran de la misma estatura así que escondió su cabeza en la larga cabellera de la chica y está aún con la sorpresa por el repentino abrazo, le correspondió y acarició levemente la espalda del rubio.

— Se que por el momento se ve imposible, pero estoy segura de que encontraremos a Tweek y le daremos su merecido al idiota que se lo llevó — el chico inglés la abrazo con más fuerza susurrando un leve "gracias" para luego alejarse de ella e ir con el pequeño Butters.

La chica se despidió del otro rubio y de los padres de Tweek e intercambio su número con Pip por si llegaba a saber algo de Tweek.

[=]

En otro lado algo alejado de encontraba un azabache desesperado y completamente furioso, por su mente solo pasaba el nombre de una persona y ese era "Lola". Estaba un 90 % seguro de que la chica en su búsqueda de venganza, había hecho todo este montaje de secuestrar a Tweek solo para presionarlo y que regresarán a esa relación tan aburrida y monótona que mantenían hace unos días. Craig en ese momento podía ser comparable a un toro, uno de esos que están siempre en las corridas, con los puños apretados, el seño fruncido y rojo de la ira. Se acercaba a paso firme a la casa de aquella chica, no le importaba el resultado, solo le importaba que dejara a Tweek en paz, aún si eso implicaba que regresarán pero eso poco le importaba, por el bien del rubio lo daría todo.

Siempre MentirososDonde viven las historias. Descúbrelo ahora