•Capitulo 5•

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Cloe

En este mismo instante, estoy corriendo por el aeropuerto, buscando como loca a Axel. Necesito hablar con él. Me di cuenta de estos sentimientos a través de todos estos días que me la pasé llorando como una tonta.

No puedo aguantarlo más, no puedo.

Ya lo ví y está en un asiento del aeropuerto escuchando música, con un semblante serio y triste. Rayos yo lo puse así, él no era así.

—¡Axel!—lo llamo.

—¿Cloe?—logro escuchar, el se levanta de su silla buscándome, me encuentra y yo me lanzo a sus brazos, dándole un abrazo con fuerza—¿Qué haces aquí?

—Vine a decirte algo muy importante.

—¿Importante? ¿De qué hablas?—me pregunta bastante confundido. Bueno ya es hora.

Como nunca antes, lo besé. ¡Carajo si! Lo besé, y se sintió increíble. Sus labios son suaves y dulces, como un malvavisco. Nos besamos lentamente pero a la vez con cariño. Me encantan sus labios. Son adictivos.

Nos separamos del beso y nos miramos—Se que te lastimé aquel día en el parque. Se lo mucho que te molestaste ese dia porque no correspondí tus sentimientos. Pero ahora veo que cometí un gran error al hacerlo porque no me había dado cuenta de lo que yo siento por ti.

—¿Y que sientes por mí?—me susurra con delicadeza.

—Y-yo...Y-yo...—trato de decir, pero demasiado difícil decirlo.

—¿Tú...?—se burla un poco de mi.

—Y-yo...T-te amo—creí que iba a recibir una expresión de sorpresa, pero lo que recibí fué una de alegría y emoción.

—Yo también Te amo Clo—le sonrío con emoción y lo abrazo con fuerza—Te amo, te amo, te amo mucho Cloe—repite una y otra vez mientras me da giros en el aire. Yo me río y luego me avergüenzo al escuchar aplausos al rededor de nosotros. No me acordaba de que estamos en el aeropuerto.

—Axel...No te vayas...por favor. Quédate conmigo—le ruego en susurros.

—Lo haré, si me das algo a cambio.

—Haré lo que sea.

—Quiero que me hagas cartas de amor y me des un beso cada día que nos veamos.

—¿Puede contar este día?.

—Claro—me sonríe.

—Hecho—agarro su bolso. Él busca sus maletas que estaba apunto de colocar en el equipaje para que fuera a la cabina del avión.

Un rato después...

—Creo que deberías decirles a tus padres que no te irás, que vendrás conmigo a ver una película y a quedarte también—le digo.

—Bien, deberíamos decirles que estamos juntos.

—¿Estamos juntos? O sea, de ¿novios?.

—Claro.

—Pero aún no me lo has pedido formalmente.

Cartas Secretas →Terminado←Donde viven las historias. Descúbrelo ahora