Hoy empezaba el instituto, estaba emocionada pero nerviosa. No sabía como sería la gente o como sería el lugar.
Tras desayunar un par de tostadas con mantequilla y miel, subí a vestirme, no quería dar una mala impresión asi que me puse unos vaqueros y un jersey negro que me regalaron en en mi cumpleaños el cual me gusta mucho. Opté también por ponerme unas vans negras que me gustaban mucho también.
Llegamos pronto ya que antes de ir a trabajar mi madre nos dejó en coche, las clases empezaban a las 08:00 y mi hermano y yo estábamos en la puerta del instituto a las 07:50.
Aunque la mayoría de peronas ahí eran muy... ¿Como decirlo? "Australianas", con esto me refiero a que la mayoría eran rubios con piel blanca, en cambio nosotros teniamos un tomo de piel bronceado gracias al eterno sol de Madrid. Debido a los rasgos algo británicos de mi madre mi hermano y yo hemos heredado unos grandes ojos claros, un color verde hazel. De mi padre en cambio tenemos los genes que nos han dado un ondulado pelo castaño. Mi hermano y yo somos tan parecidos que en las fotos que tenemos de bebés es casi imposible saber quién es quién, claro que esto con la edad ha cambiado.
Foto de cómo se supone que es Sophie arriba
Ya sonó la campana que llamaba a los alumnos a entrar a el instituto asi que pasamos.
El lugar era enorme y las instalaciones no tenían mala pinta, ya a mitad de camino mi hermano y yo nos separamos, yo iba dirección a la clase de 9º grado.
Al entrar, casi toda la clase se quedó mirándome, es lo que tiene ser la nueva.
Al ver a Luke, sentí una calma enorme al pensar que al menos conocía a una persona allí.
No sabía donde sentarme, era o atrás del todo sola o en el medio con una chica algo misteriosa con una boina morada y unas gafas de pasta a juego con la boina.
-¿Puedo sentarme aquí? - pregunté amablemente.
-Mmm... Si. - me respondió mientras me miraba de arriba a abajo
-Bueno clase, hoy vienen dos nuevas alumnas, Katherine, que viene de Melbourne y Sophie, que viene de Madrid.
Toda la clase se nos miró a unísono, no sabía que la chica con la que me había sentado era también nueva, así al menos tendremos algo en común.
-Katherine Jensen, pero me puedes llamar Kate. - se presentó.
-Sophie Torres, pero me puedes llamar ehmmm... ¿Soph, Phie? La verdad nunca he sabido el diminutivo de Sophie, mis amigos siempre me han llamado Sophie.
-No pasa nada, quizás en este año en el que nos sentemos juntas ya se nos ocurrirá un nombre. - me dije con una sonrisa que brillaba debido a los bracket que llevaba.
Me reí y al darme la vuelta vi como Luke me miraba, se puso rojo, sonrió tímidamente y miró a la mesa.
Cuando el recreo llegó, lo pasé entero con Kate, su vida era impresionante, resulta que sus padres tienen una enorme granja y que nunca a tes había estado en un instituto real, daba clases a distancia. El año pasado sus padres decidieron que se mudaria a Sydney, a vivir con su hermana Chloe de 24 años que es veterinaria aquí.
En el recreo también me fije en el campo de fútbol y vi un chico cuya forma de jugar resaltaba sobre el resto, la verdad es que era muy bueno. Así que me armé de valor y fui a hablar con él.
-Hola, soy Sophie, te he visto jugando al fútbol y WOW, eres muy bueno. - le dije.
-Gracias, yo soy Calum, Hood. ¿Tu eres de Madrid no? La verdad el equipo más famoso de ahí, el Real Madrid es un equipo en el que siempre me hubiese gustado jugar. Ah, y también en el Barcelona, que también es español ¿no? - me dijo muy felizmente.
-Si, pero... Pasa de el Barcelona, el mejor es el Real Madrid. - le dije mientras reía.
-Bueno, me espera mi amigo, ¿luego hablamos más?
-Vale, si quieres te doy mi número de teléfono. - solté.
-Genial, adiós. - se despidió a la vez que se iba con su amigo, un chico muy blanco y con el pelo muy estilo emo y rubio.
Las clases terminaron a las 13:30 y durante las horas después del recreo, hablé con unas cuantas personas más e intercambié el número de teléfono varias veces.
Al salir vi como Luke y Jack se iban juntos en el coche de Liz a su casa y mi hermano y yo nos pasamos a saludar.
-¿Qué hay chicos? ¿Queréis que os lleve? - pregunto Liz.
-Solo pasábamos a saludar, iremos andando ya que no está muy lejos. - respondió muy hermano.
-Venga, no pasa nada, es mejor que veáis el recorrido en coche con gente que conoce la zona así no os perdéi ni nada. - dijo Jack.
Oh dios mio, Jack nos ha propuesto subirnos a un coche con él, me va a dar algo.
-Está bien, subiremos, muchas gracias. - respondió mi hermano.
-Bueno, atrás hay sitio libre junto a Luke. Vamos hijo, ponte en el asiento del medio. - ordenó Liz.
Nos subimos atrás junto a Luke, yo estaba en shock y no hablé durante todo el viaje, solo respondí con un "bien" a la pregunta "¿qué tal ha ido el día?" que me hizo Liz. En cambio mi hermano no paró de hablar ocn Liz y con Jack durante todo el viaje. Ojalá tuviera la misma facilidad a la hora de expresarme y de hacer amigos como mi hermano. Él siempre ha sido el extrovertido de la familia mientras que yo he sido más vergonzosa.
Al llegar nos despedimos y les dimos las gracias por traernos para así después entrar en casa a comer.
Nuestros padres estaban muy ocupados con todo el papeleo del trabajo así que comimos solos.
-Le gustas. - soltó de repente mi hermano.
-¿Qué? - pregunté extrañada.
-Que le gustas a Luke, Luke Hemmings.
-¿Y eso cómo lo sabes tú?
-Vamos Sophie, creía que eras lista. Te miraba como le mira un arqueólogo a un fósil en perfecto estado que acaba de descubrir, y no sólo eso, ¿te has fijado en como se pone rojo y aparta corriendo la mirada cuando tú le miras a él?
-Daniel, no es momento de hablar de eso, ¿no hay otro tema mejor del que hablar? Además en todo caso él no me gusta.
-¿Y cómo sabes que él verdaderamente no te gusta?
-Porque si, porque lo sé y ya está.
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Luke, el chico de la casa de al lado
FanfictionCiudad nueva, vida nueva. No creo que sea para tanto... ¿O quizás si? +En esta historia he intentado que todo conecte con la realidad, es decir que todo en la historia coincida con fechas y datos reales sobre la banda, de manera que por decirlo de u...