Todo inicia cuando nade se espera, cuando la historia y el lápiz se encuentran por miera vez, cuando la mitad y el resto forman uno mismo, cuando se entiende que amor no es un signo de dependencia, amor se resume en el simple hecho de dos moléculas que se juntan para ser estable, amor es tan fuerte que escurre tus lagrimas sin lastimarte, te acompaña porque te ama y no porque lo necesite, te regala el mundo porque lo mereces y no porque debe, amor te convence que la soledad no es quien puede acompañarte bajo las noches oscuras, sino la necesidad de tomar a alguien de las manos y empezar a construir alguna aventura, camina con y sin delicadeza conforme la historia se vaya a contar, llega como el atardecer a, dejando paz y tranquilidad, susurra sus historias y en ese momento entra la seguridad de que nadie las narraría igual, amor te convence de quien eres y quien quieres ser, mientras llevas de tu mano a tu bello confidente, siendo el acompañante de un nuevo ser, una nueva vida, una nueva pagina, sin candados, sin pretextos, sin mentiras, sin excusas. Amor entra y forma la paz, paz que suena como una canción que jamas queremos dejar de escuchar.