11.

23 7 5
                                    

Decidí llamar por teléfono a Rosa para contarle el día en el centro comercial, se va mudar a un departamento con su novio, Leigh, así que últimamente no nos hemos visto porque anda ocupada con eso preparativos.

- Y sigues insistiendo en que no sientes algo por Armin -  decía con algo de burla en la voz, le conté sobre lo increíble que se veía cuando nos probamos ropa -  casi puedo ver la cara de cachorrito hambriento con que lo mirabas

- Yo no pongo ninguna cara de cachorrito - respondí cubriendo mi rostro con una almohada, sabía que ya me había sonrojado - y si ya es inevitable, Armin me encanta - ahora me dispuse a abrazar la almohada mientras suspiraba.

De nuevo suspirando - podía imaginar su sonrisa al otro lado del teléfono

- ¿ Qué tal va la mudanza? - aunque quería cambiar de tema también me interesa saber que tal le va a ella

Va super bien - se le escucha muy emocionada - encontramos un departamento cerca del trabajo de Leigh y ya comenzamos a llevar algunas cosas, es probable que para el fin de semana que sigue terminemos, - en la escuela no compartimos clases este año, está semana en cuanto terminaba su clase se iba con Leigh -  pero me estás cambiando el tema jovencita

- Sonaste a mi madre con eso último - digo riendo un poco

- Ya quisieras que lo fuera - respondió -  pero volviendo al tema ...

- Bueno si insistes debo contarte algo - guardó silencio unos segundos para hacer suspenso - creo que Alexy ya se dio cuenta.

Tras una exclamación de asombro por parte de Rosalya comienzo a relatar le lo que sucedió cuando fuimos por la pizza

- Perfecto, ahí tienes tú oportunidad - dice con voz triunfante - Alexy era tu pretexto para no decir nada, pero él ya lo sabe y estoy segura que va a apoyarte

- Alexy está suponiendo cosas - digo algo defensiva - no sabemos si también está hablando de Armin o se confunde.

- Si ya te dijo que no se trata del militar - a Rosa le gusta decirle así desde que le conté que cada que lo encuentro trae pantalones militares - obviamente habla de su hermano. Y solo estarás segura de su apoyo si le dices directamente quien te gusta.

- No lo sé... - contestó con duda y hundiéndome más en la cama y las almohadas

Alexy nos adora, sé que te apoyará si es lo que de verdad quieres, pero a ti te gusta hacer drama por todo.

- De acuerdo, - respondo con resignación - eso haré en cuanto pueda, no quiero hablarlo por teléfono con él y arriesgarme a que Armin esté en la misma habitación y pueda escuchar algo.

- Esa es mi chica

- También necesitaré tu ayuda después - comento acordandome del obsequio de Kentin - necesito elegir un obsequio para chico

- Vaya, te doy un poco de valor y ya estás pensando en que puedes comprar a tu futuro novio

- ¡Rosa! - digo en voz algo más alta otra vez con el sonrojo hasta las orejas - no es para él

Jaja, está bien ¿De qué se trata?

Le platico entonces del obsequio de Kentin, que me parece excesivo y quiero devolverle algo en equivalencia

- Claro que te ayudo - escucho algo de duda en su voz - pero tal vez podría interpretarlo diferente, presiento que su obsequio no fue simple agradecimiento.

- ¿Por qué no habría de serlo?

- Yo he hecho favores así antes y a lo mucho me invitan la comida o un helado. Quizá sí es su manera de decirte gracias pero puede ser que haya algo más ahí

- ¿Has estado viendo la Bella y la Bestia de nuevo?

- Amo esa película, no te burles

Después de eso la plática continuo sobre canciones de Disney hasta que escuche a Leigh susurrar en el oído de Rosa, así que me apresure a colgar el teléfono antes de escucharlos más melosos.

Apague la luz de la habitación y me puse a idear mentalmente que podría decirle a Alex y en algún momento mi mente se puso a divagar sobre una posible confesión a Armin, hasta que en algún punto de la noche me quedé dormida.

Si Me Amarás También...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora