Prem y Wad: Segundas Oportunidades

Capítulo 15: Una Súplica Para Ser Perdonado

Historia de: @Kramdrof

Traducido por: JCM

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Dos de los botones llevaban su equipaje. Uno cargaba con su traje y una bolsa de zapatos, y el otro su maleta. Prem entró en una de las suites del Hotel Siam, Bangkok.

Prem pasó junto a un jardín y una fuente antes de girar por un pasillo corto. Uno de los botones abrió las grandes puertas dobles de la habitación dejando la maleta adentro. El otro dejó su bolsa de traje y zapatos al otro lado de la cama. Al abrir la puerta del baño le informó a Prem de las instalaciones. También señaló la terraza cubierta en el lado opuesto de la habitación. El otro joven estaba ocupado abriendo las puertas francesas con paneles de vidrio.

Prem recibió la llave de la habitación y fue bienvenido a Bangkok. Le aseguraron que sería muy bien atendido en la Suite de Luna de Miel del Bangkok Siam. Prem les pidió que esperaran, el volvió a la parte central de la suite y tomó su billetera. Su generosa propina le gano dos grandes sonrisas y múltiples wai.

Prem se paró en el centro de la enorme habitación, tratando de recuperar el aliento. Su corazón latía con fuerza en su pecho, y se sentía tembloroso.

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Para sorpresa de Cali, una buena historia de amor BL es un producto candente en Tailandia, y el libro ya estaba en orden de impresión. Desde esa noche en Seattle, Calíope había estado trabajando con una editorial tailandesa para impulsar la novela en Tailandia. Comunicados de prensa y comentarios fueron llevados a tiendas y libreros. Las editoriales tailandesas ya habían lanzado la primera impresión y trabajo promocional en su propio idioma.

Lo primero era hacer que el autor firmara en una librería conocida y popular, La Dasa Book Café. Se consideraba un lugar íntimo con historia de enormes ventas y un excelente lugar para firmar. Calíope podría haber reservado fácilmente varios más, pero todos estaban muy cerca del uno al otro, así que decidió esperar el resultado del primer evento.

Ella le dijo que descansara y se relajara, la firma seria por la tarde. Dependiendo del éxito y la cantidad de personas que asistieran, podría extenderse hasta la noche. La Dasa sirve café y bebidas e incluso bocadillos para este tipo de ocasiones. Prem tenía el resto del día y una buena parte del siguiente antes de que tuviera que comenzar.

"Te dejaré solo por ahora, llama a mi habitación si necesitas algo. Si quieres, podemos almorzar mañana antes de irnos." Ella le devolvió el saludo cuando su cabeza se inclinó hacia ella. Cuando vio su intento por su costumbre, se divirtió, había una pizca de una sonrisa forzada torpe.

Prem se veía pálido, y sus nervios se mostraban en sus ojos. Dejándolo en el lobby, ella fue con sus asistentes a la habitación que habían reservado para ellos. Prem decidió usar este hotel, y ella sabía por qué. El insistió en pagar su propia habitación, y cuando Calíope vio que había reservado la Suite de Luna de Miel, como la del libro, se alegró. Curtis Brown nunca cubriría un gasto tan extravagante.

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