La Estaba Mirando.

En contra.

Los exámenes ya habían pasado. Habían pasado la academia siendo novios.

No hablaban, no sonreían, tampoco estaban todo el tiempo juntos más que en la academia. Ni siquiera había cariño de por medio que los uniría, por lo menos era lo que pensaba Hinata.

Sasuke estaba obsesionado con ella. Eso los unía, el. El era quien los unía, a la fuerza pero el lo hacia.

Pensaba Hinata que después de la academia Sasuke no perdería su tiempo en buscarla. Siendo francos no veía el caso a ser pareja si ni siquiera conversaban entre ellos o se conocían si quiera. Tampoco intentaban hacerlo.

Aunque en poco tiempo Hinata descubrió cosas de el. Podría calcular exactamente que llevaban por lo menos dos meses siendo pareja. Hinata aprendió cuándo el Uchiha estaba irritado, sin si quiera decirlo, cuando estaba molesto, aburrido, tranquilo incluso cuando no lograba entender algo. Logro descubrir que le gustaba, entre ellas su comida favorita, sus gustos y naturalmente lo que hacia todos los días. Más o menos su estilo de pelea.

Hinata y el no platicaban, pero tampoco se molestaban con su compañía. No era totalmente desagradable.

Para la suerte de la Ojiperla termino en otro equipo, el equipo ocho, conformado por Kiba Inuzuka y Shino Aburame. Sasuke quedo en el equipo siete, con Sakura Haruno y Naruto Uzumaki, si Hinata tenia suerte las cosas tomarían su rumbo normal y quizás Sakura lograra ganarse el corazón de Sasuke.

Pero las cosas no fueron así. Justo el primer día, antes de que Hinata y su equipo se fueran con su Sensei Sasuke quien igualmente se sentaba a su lado la tomo fuertemente del brazo. Disimuladamente evitando que ambos idiotas a su lado se dieran cuenta pues estos se encontraban discutiendo.

-Nos veremos en las noches, en el campo de entrenamiento, más entrado en los arboles junto al río. No llegues tarde.- sin más la soltó y volvió a su pose inicial. Desinteresado.

Hinata estaba nerviosa. No estaba realmente segura de poder salir de noche pero suponía que era lo que tenia que hacer. ¿Era correcto verse con Sasuke tan tarde?. No, por supuesto que no, y menos para una chica como ella quien pertenecía a la rama principal del clan Hyuga.

Sasuke se rehusaba a dejar de verla.

Antes de salir de casa esa noche Neji la encontró, por supuesto no eran sus asuntos y supuso que su primo no diría nada al respecto, solo le importaba hacerla sufrir. Solo eso.

Intento seguir, esta vez sin dirigirle la palabra. Pero fue inevitable que su primo la tomara de su chaqueta y la estrellara nuevamente contra la pared .

-¿a donde se dirige a estas horas Hinata-sama?.- pregunto, colocando su mano vendada sobre el frágil y delgado cuello de su prima. Sin fuerza, pues no parecía querer llegar a tal grado de ahorcarla.

- I-ire a E-e-entrenar...Necesito E-estamina.- susurro bajo, muy bajo. Esto pareció molestarlo. Hinata no lo estaba mirando como el deseaba. Con miedo, con terror. En vez de eso parecía aceptarlo.

Quizás tendría que ir subiendo un poco de nivel.

Su mano fue bajando lentamente, recorriendo su cuello provocando leves escalofríos en Hinata. Se detuvo justo en su clavícula. Tocando con su dedo índice. Lo cual perturbo a Hinata más de lo normal, asustada, sabia porque se dirigía a esa zona. Lo sabia y estaba asustada.

Un punto de chakra estaba ahí, justo ahí. Y el estaba peligrosamente cerca de el. ¿Neji seria tan capaz? ¿Lo seria?.

Claro que lo seria. De un hábil movimiento. De valentía que no sabía que tenia aparto su mano. Golpeándolo fuertemente fuera de su punto de chakra. Estaba más que asustada y Neji sorprendido de que ella hiciera algo al respecto cuando el la intimidaba. Esto lo enfureció.