manada

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- el papel tapiz, Josh .- hablaba su madre.- estabas arrancando el papel tapiz de la pared de la señora Joseph, ¿en qué estabas pensando, Joshua? .- parecía molesta.

- en nada.

- exacto, en nada. Ni se te ocurra hacer eso de nuevo .- le advirtió.

- Sí, sí .- terminó de lavar el plato y cubiertos que usó anteriormente para la cena y los dejó escurriendo.- lo tendré en cuenta .- dijo antes de pasar a su lado, no sin darle un beso en la frente antes e ir hacia las escaleras para subir a su habitación.- ¡buenas noches, mamá! .- exclamó mientras subía los escalones.

"Buenas noches, hijo", fue lo que recibió de vuelta.

Entró a su cuarto y se quedó parado un buen rato junto a la puerta, observándolo. Con un suspiro cerró la puerta y se dirigió a su cama, en donde se sentó.

Después de lo que había pasado, aunque realmente no había sido mucho y no habían pasado demasiados días, se sentía demasiado abrumado y tenso, aún sin poder descifrar bien el por qué.
Durante ese tiempo tuvo en cuenta algo: está bien, cada persona pertenece a una manada en un principio, esa manada es tu familia de sangre.
Desde la más pequeña hasta la más grande, él pertenecía a la manada Dun, y sus amigos tenían la propia, pero aún así empiezas a formar las tuyas a inicios de secundaria, teniendo necesidad de una, todo siempre depende de las personas, porque a veces, cuando crecen y hacen la propia con una pareja se olvidan de los que alguna vez fueron manadas. Él tenía una pequeña manada aparte junto a sus amigos y eran muy estrechos, su relación amistosa era envidiable.

Y él estuvo consciente todo el tiempo que, si pertenecia al grupo, todo ese tiempo y el que viene, seguirán buscando a quien falta en su manada, a la parte faltante de ella.
Así que, no era cualquier persona, era su manada.

Aunque empieza a dudar el haber tenido una relación como la tiene con Brendon, Jenna o Halsey, con esa persona. Algo le dice que hubo más ahí.






















Tyler había encontrado un cuarto pequeño lleno de cables y cosas para comunicación, de computadoras antiguas, cintas y un pequeño panel de control junto a un micrófono.
Con alivio empezó a presionar los botones y girarlos, intentando llegar a una frecuencia donde pudiera conunicarse con alguien y avisar que está ahí, enfocándose en un radio que compartía con Josh, a veces cuando iban de pijamada juntos jugaban a ser una especie de soldados o policías con ellos, fueron buenos tiempos.

- ¿qué intentas hacer? .- el Alfa se acercó a él.

- comunicarme .- respondió simple y el otro frunció su ceño.

























Josh arrugó su entrecejo al escuchar estática proveniendo de algún lugar, así que prendió la luz y comenzó a buscar con desesperación en cada rincón de su habitación.

Hasta que finalmente encontró un viejo radio negro que no recordaba que tenía. Era de donde provenía el sonido y le dió la vuelta completa revisandolo, no sabía que sucedía.

De repente una voz se escuchó, una muy parecida a la que oía en sus sueños no tan sueños.

- ¿Josh? .- se escuchaba que preguntaba.- ¿Josh?, ¿estás ahí?, soy Tyler.

Con confusión y una pizca de miedo miró detenidamente el radio antes de presionar el botón y hablar.

- ¿y-yo? .- cuestionó algo temblante.

Del otro lado Tyler sintió alivio y casi sentía a su Omega aullar de felicidad.

- sí, tú Josh .- fue la respuesta.

Un tono dulce, así se le antojó a Josh quien no pudo evitar sonreír.

- ¿eres Joseph? .-le preguntó ahora.

Hubo unos segundos de silencio.

- es mi apellido.















- hay que irnos .- le dijo el Alfa que le acompañaba con desesperación, oyendo a los caballos llegar y a los jinetes caminar.- hay que irnos de aquí.

Tyler tomó aire.

- Josh .- llamó.- Josh, tienes que ir con Samantha .- pidió con desesperación.- ve con Samantha Josh, busca respuestas.

No pudo hablar más, ni siquiera despedirse cuando el Alfa de rulos le jaló fuera con prisa.

Se escondieron detrás de un pilar de ladrillos mientras aquellos jinetes sin rostro revisaban el lugar. Esto estuvo cerca.





















Josh vió con decepción el aparato entre sus manos cuando ya nadie le respondió y lo dejó de lado con un suspiro.

Su manada.

Infame cacería { Joshler }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora