Joseph

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Josh se sentía extraño, debía admitirlo.

Desde que piso la casa de los Joseph algo en él se removió y la inquietud comenzó a apoderarse de sus sentidos, se distraía cada 5 segundos en sus pensamientos, en otras cosas, como el estar inconscientemente buscando un aroma, un aroma en aquella casa.

Apenas llevaban la mitad del trabajo y él no dejaba de frotar su cara con sus manos y Maddison le preguntaba cada rato si se encontraba bien, incluso la señora Joseph le llevó una pastilla para el dolor de cabeza y un vaso de agua, justo después de que preguntara si estaba bien y él le respondiera que solo tenía un dolor de cabeza y que no era nada.

Josh tomó aire.

- Josh .- llamó Maddy.- ¿en verdad estas bien?, ¿estás seguro? .- le preguntó por décima vez en el día.

- sí.. sí, sí, estoy bien .- respondió Josh casi balbuceando.- es que he estado algo abrumado últimamente, lo siento.

- descuida.

- ¿puedo usar el baño?.

- Sí, claro .- ella le sonrió.- está...

- casi a mitad del pasillo, la puerta junto a la mesa que tiene el jarrón de cerámica y las flores blancas .- completó Josh sin darse cuenta y la Omega le vió con sorpresa.

- ¿has estado aquí antes? .- le preguntó detenidamente y con confusión.

- no...- murmuró.- no que yo recuerde .- sonaba igual de desconcertado y abrumado que la chica a su lado.- ya vuelvo .- avisó saliendo de la habitación con rapidez.

Una vez afuera Josh soltó todo el aire que no sabía que estaba reteniendo, viendo por ambos lados del pasillo. Todo le parecía tan familiar, tan aterradoramente familiar. Nunca había estado en esa casa, o al menos no lo recordaba, pero parecía conocer cada rincón de esta.

Como el pequeño cuarto secreto del sótano justo detrás del gran armario marrón y sin uso, resguardado por una puerta de metal oxidada.

Oh... Mierda.

El Alfa empezaba a sentirse hiperventilar en cualquier momento, yendo a pasos apurados al baño donde cerró la puerta y se mojó varias veces el rostro. Levantó su cara y se vió en el espejo, totalmente empapado. Incluso el baño se le hacía tan familiar. Tragó saliva con nerviosismo.

Casi un minuto después salió del baño, viendo con detenimiento el pasillo. Luego dirigió su vista justo en frente y caminó hacia esa pared cubierta de papel tapiz azul, caminando unos pasos hacia la izquierda y deteniéndose delante. Frente a frente, o más bien, frente a pared, porque era lo que era.

Su lobo se movió violentamente y su instinto le pedía arrancar todo el tapiz del lugar, pero sabía que no sería correcto, ¿por qué tendría que hacerlo?.
Se quedó preguntándose eso unos minutos, ¿por qué tendría que hacerlo?.

Por tu Omega.

Fue un pensamiento susurrante lejano y tan fugaz que no sabe si fue real. Lo cierto es que si se veía tentado a quitar el papel tapiz del lugar, todo si era necesario. Algo le decía que algo se escondía detrás, que encontraría algo, una respuesta.

Con lentitud levantó su mano y la acercó al tapiz, tomándolo y rasgandolo apenas. Fue un pequeño trozo el que se despegó de la pared y fue lo único que pudo hacer cuando la madre de Maddy lo sorprendió, gritándole qué carajos estaba haciendo.

- ¿qué haces rompiendo el tapiz de mi pared? .-lo enfrentó con molestia, tomando con fuerza su mano y alejandola de la pared.

- yo... - Josh parpadeó, parecía que apenas se daba cuenta de lo que hacía.- lo siento, yo no... - la vió y de fondo pudo ver a Maddy salir curiosa de la habitación.- lo siento. Tengo que irme .- empezó a caminar deprisa.- luego terminamos el trabajo, Maddy .- le dijo al pasar a su lado y después salir apresurado de la casa.

Se detuvo en la acera delante de la casa, con su respiración agitada. Realmente sentía que tenía algo.

Comenzó a caminar mientras sacaba su celular con apresuro, tanto que casi se le cae, y con inquietud llamó a Brendon, colocando el teléfono en su oreja.

- Hey, amigo .- saludó Brendon del otro lado de la línea.

El teñido tragó algo de saliva, agitando sus azules cabellos.

- Bren .- respondió.- tenía razón.

- ¿es ahí?.

- es... o era, su familia. Desde que entré me sentía extraño y el ambiente era tan... Dios, todo me era tan familiar, tan malditamente familiar y entre más lo pensaba más me daba cuenta de lo que conozco de esa casa .- tomó aire para continuar.- de repente me encontraba pensando en una puerta oxidada y secreta en el sótano detrás de un armario marrón y olvidado.

- wow .- contestó Brendon y guardó silencio unos segundos.- que sepas eso es algo escalofriante y alentador a la vez.

- mi lobo trataba de decirme algo pero no sé, de repente me encontraba delante del papel tapiz de la pared y algo de mí me dijo que debería arrancarlo .- hizo una pequeña pausa.- y eso estaba haciendo.

- Dios, ¿y encontraste algo al menos?.

- no, apenas lo estaba haciendo cuando la señora Joseph me descubrió y me regaño .- soltó una leve risa que era de todo menos una.- pero sé que hay algo ahí, detrás de ese papel tapiz.

- entonces hay que tenerlo en cuenta, ya tenemos avances al menos.

- su apellido es Joseph.






















Tyler se movía de un lado a otro, como un león enjaulado y desesperado.

- algo, debe haber algo .- murmuraba mientras caminaba en círculos, tratando de pensar en algo que podría funcionar para salir de ahí.

- deja de caminar tanto, lindo, me mareas .- replicó el mismo Alfa de antes.

- cállate .- le gruñó un poco y entonces la estática comenzó a oírse por toda la estación.

- los siguientes trenes han sido cancelados .- habló la misma voz siniestra y sin vida de antes.- North Bass Island...- comenzó.

Tyler frunció su ceño, ignorando el hecho de que en tren no se podía llegar a una isla y comenzó a buscar el parlante. Cuando lo encontró sonrió ya que tenía una idea en mente, comenzó a seguir todos lo cables que estaban conectados a ella, ignorando todo lo que decía. Si descubría de donde venía el sonido podría tener una mínima oportunidad o pista.

De repente el Alfa le seguía, curioso por lo qué hacía.

- ¿qué haces? .- le preguntó confundido.

- sigo los cables para que me lleven al lugar de origen del sonido, tal vez haya algo para comunicarnos .- respondió concentrado en lo que hacía.- ¿lo has hecho?.

- no.. .- murmuró el Alfa y después frunció su ceño.- ¿qué te hace creer que dejaron algo aquí para comunicarnos con el mundo?, nos tienen atrapados aquí, lo menos que quieren es que salgamos. Quizá es otra trampa para los desafortunados que quieren salir.

- cállate y deja de ser tan pesimista.

Infame cacería { Joshler }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora