Cinco minutos, cinco minutos, en cinco minutos el reloj marcará las 2:00 am y todo acabara. Solo tengo que resistir cinco minutos mas.
No debí mudarme a esta casa, no debí alejarme de mi familia, no debí abrir la maldita puerta plateada, pero lo hice, y ahora no puedo hacer nada.
Un estruendo suena en el sontado, el galopeo de un caballo, ¡demonios!, ¡mierda! Debo dejar de decir esa palabra o haré que me encuentren.
La chica de cabello violeta me lo advirtió, "Cosas oscuras suceden en esa casa al anochecer", ah, pero yo tenía que probarle al mundo que puedo enfrentarme a él.
Aunque cómo iba a saber que cada noche, después de cerrar las puertas, cuando el reloj marca las 12:01 de la madrugada, un puñado de muertos se levantan de dónde diablos sean que tienen sus tumbas e intentan escapar para asesinar en masa durante sus unicas dos horas de libertad. ¿Cómo en el cielo iba a saber eso? La vendedora ni siquiera nos dijo que en esta casa habían muerto seis personas, mucho menos que el lugar estaba maldito.
Estupida Hally y su hambre por vender, por su culpa el hachero mató a Lala, mi mejor amiga, la unica razón por la que no me he ido del infierno que esta casa. Aunque Lala si que se las cobró cuando le mochó la cabeza de un solo movimiento a la semana siguiente.
Necesito encontrar la manera de desencadenarla de este lugar, de parar todo esto. Tiene que haber una jodida forma, de la misma manera en la que funciona que al morir en la casa, el alma se encadene y asesine en masa, debe exister el modo de liberarlos a todos. Solo debo hallarlas.
Si pudiera saber como, lleve tres meses aqui, dos sin Lala y no he podido encontrar ni siquiera una tumba. Al menos la madre esta de mi lado, y me ayuda a evitar morir cada noche.
−Dos minutos, bella niña.
Dice desde la cocina. Antes de que Lala pase a su lado.Lala se toma todo esto como un juego, no acepta que este muerta, aunque lo sabe. Me culpa por ello, pues yo la traje aquí. Por ello cada noche encierra a los demas en el sotano y me busca por su cuenta en silencio, me da la ventaja de esconderme, y lo hago, pero siempre me encuenta, es muy buena en ello.
− Puedo sentir tu aroma, Kayla. Aun no aprendes a esconderte.
Un minuto. Ella me encontró, siempre lo hace, aunque la madre me ayude, su mano entra por la rendija en la pared y me jala de la pierna, el cuchillo en su mano.
− Lala por favor, te lo ruego. Intento salvarte.
Cuarenta segundos.
− Yo no tengo salvacion, solo tenias que dejarme aqui, ahora tengo que matarte.
Su voz resuena en las paredes de la casa mientras me arrastra hasta la sala donde ella fue asesinada.
Cuento los segundos. Veintiocho, veintisiete, veintiséis...
− No quiero dejarte, eres mi mejor amiga. No quiero abandonarte, eres lo único que me queda.
− ¡Callate! ¿No lo ves? Ya me perdiste, estoy muerta... yo, no puedo estar contigo...
Su mano izquierda va a mi cuello, apretando con fuerza mientras me levanta del suelo y me estampa contra la pared. Su otra mano aferrando el hacha.− Lala, lo siento mucho.
Lagrimas corren por mis mejillas, mi oecho arde.Ocho, siete, seis...
− ¡Ahora vas a morir tu tambien!
Su mano baja con fuerza hacia mi cara, uso mis manos para agarrar el mango de madera y evitar que el hacha me corte el cuello.Cuatro, tres...
− Te voy a salvar Lala, te lo prometo.
Glom Glom Glom
El reloj antiguo clavado en la pared marca las 2:00 am. Lala se desaparece, la madre y el ruido en el sotano también.
Me dejo caer en el piso y lloro. He sobrevivido otra noche, pero aún no logro salvarla.
− Te voy a salvar Lala, no importa lo que me cueste, o los años que me tome.
La palabra clave era #Reloj.
Espero les guste. Si es así, voten y comenten.
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Escritos Solitarios
Historia CortaEsta es mi compilación de relatos, microrrelatos y micro historias, la mayoría de ellos no exceden las 500 palabras. Esta en proceso pues iré escribiendo uno semanal, pero he decidido hacer un libro con todos y compartirlos. Portada hecha por mi ta...