''Capítulo 3: Viejos tiempos 1/2''.

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Me dirigí hasta Archie, el cual se encontraba con un vaso de bebida (seguramente cerveza), sin camiseta y riendo con los Bulldogs.

-¡Kaylee!, te estaba buscando- gritó Archie, a lo que me acerqué un poco apenada.

-¿Kaylee Andrews?- cuestionó Reggie, a lo que dije.

-Aquí mismo, Mantle- me miró con una sonrisa, yo se la devolví.

-No lo puedo creer- hizo una pausa mirándome de arriba a abajo- cuando te fuiste no estabas así.-

-Sí, muchos me dicen eso- estaba apenada por alguna extraña razón, creo que era por la mirada de Reggie, la cual no la había quitado- ¿Qué necesitas, Archie?- me dirigí al mencionado.

-Es para que me ayudes a organizar un juego- habló emocionado- tendremos que llenar varios vasos de cerveza, despejar una mesa, para que ahí coloquemos los vasos- mencionó comenzando a quitar los objetos que se encontraban sobre la mesa que señaló.

-¿Cuántos vasos necesitas?- pregunté, tomando unos cuantos de estos.

-14- respondió.

-Te ayudo, Kaylee- esa voz conocida...

-¿Jughead?- dije, y no pude contener una sonrisa.

-Culpable- comento, lo que hizo que sacara una leve carcajada- déjame ayudarte- se acercó a mi, tomo los vasos desechables y comenzó a llenarlos con el líquido que estaban en los barriles.

-Creí que no llegarías- hablé tras unos momentos.

-¿Y perderme una fiesta de verano?- soltó- dónde tienen mesas de comida, me ofendes Kaylee- dijo.

No podía parar de sonreír como una idiota, no tenía la menor idea del porque, pero la simple presencia del chico, escuchar su voz y oler su esencia, me hacía sentir cómoda.

-Estaba pensando, Jughead...- hice una pausa, a lo que el azabache cuestionó.

-¿Qué locura es la que esta pasando por la mente de Kaylee Andrews?- Jughead me miró con una hermosa sonrisa, que se quedó congelada en mi mente.

-¿Los tres mosqueteros?- me limité a decir, lo cual fue suficiente para que Jughead me mirara extrañado, y para que me preguntara:

-¿Hablas de que Archie tu y yo nos juntemos en mi casa?- su pregunta había interpretado las palabras que quería decir, sólo que en una cantidad menor y con una pregunta que fue al punto central.

-Sí- fue lo único que pudo salir de mi parte.

-¿Cuándo sería eso?- preguntó, tal vez se iba a negar después de que le dijera.

-¿Ésta noche?- solté insegura. Casi estaba preparando una excusa para que no se negara, pero mi mente paró en seco cuando escuché su respuesta.

-Esta bien, Kaylee. Sólo por ti- volteé a verlo extrañada por su comentario, pues no lo esperaba- Y también por Archie.-

Cuando terminamos de llenar los vasos con la cerveza, la mesa ya estaba detrás de nosotros, así que no se nos complicó demasiado la tarea de colocar los vasos sobre la mesa.

-Reggie, por favor- lo miré, refiriéndome a que pararan unos momentos la música para llamar la atención de los chicos.

-¡Dilton!- el mencionado se retiró los audífonos y miró a Reggie, el cual sólo hizo una seña para que el chico pausara la musica en seco, y así lo hizo.

-¡Atención!-gritó Archie, haciendo que los presentes voltearan en dirección al pelirrojo- ¡necesitamos a 12 peronas que estén dispuestas a jugar algo legendario en las fiestas!- mencionó por lo que en cuestión de minutos varios chicos estaban frente a nosotros, dispuestos a escuchar la idea del juego.

Si me dices que noDonde viven las historias. Descúbrelo ahora