.Zeru.

9

Estaba helado y silencioso, el claro pasillo estaba solo si acaso pasaba una que otra enfermera por alli, solo habia un joven de doce años sentado y jugando con sus manos para "matar" la ansiedad, de vez en cuando cantaba algunas canciones algo... digamos especiales, haciendo que quien lo escuchara se incomodara, deprimiera o asustara, hablaba solo, se reia de vez en cuando sin razon aparente y observaba el techo imaginando escenas divertidas para él.

Cualquiera diria que si estas en el hospital por un pariente estarias asustado o preocupado pero él no, estaba tranquilo.

Que su papá estuviera hospitalizado era una ventaja para el menor, lo malo era que quien lo solia visitar y atender era su padre Perú. Cuando lo visitaba lo alimentaba con un misero pan y un vaso con agua fria, claro que se las arreglaba solito. Lo solia insultar y muchas veces le quizo golpear, pero no era nada comparado con la locura de su ahora hospitalizado padre.

Al estar solo podia irse a los callejones a divertirse y esta vez tenia planeado algo grande.

-joven... Zeru?

Hablo un hombre alto llamando al menor, este ni se inmuta.

-joven? Estas bien?...

Se acercó y le tocó el hombro.

-joven, puedes entrar a ver a tu padre.

El niño reaccionó y asintió, se levanto para tomar marcha a la sala seguido del doctor aunque paro en seco.

-quiero verlo a solas.

El doctor se asusto levemente por la accion del chico asi que se quedo alli, el menor continuo a entrar a la habitación, observo a su padre con un montón de cables y vendas, tenia muchas grietas y moretones, incluso tenia un aparato para respirar moderadamente, si, estaba en los huesos.

El adulto apenas y podia entreabrir los ojos.

-hola papi.

-hi...jo...

-no te esfuerces, debes mejorarte, yo estare bien solito no te preocupes. Cuando vuelvas a casa te voy a atender como hacias conmigo! Te atendere bien ya veras! Y se que mejorarás lo suficiente como para que me vuelvas a cuidar pues sé que es lo que quieres.

El hospitalizado empieza a llorar.

-qu...e hi...ce p...ara... me.. recer... te...

-ya papá, debes dormir.

El menor lo abraza y sale del lugar despues de despedirse, el doctor lo observo.

-no se porque me advirtieron de ti, eres un buen chico.

El menor ignoro al doctor y continuó caminando. Pasó por varias salas hasta llegar a una en donde habia un joven de veinte años en coma. El menor sonrió y entró.

Se acerco al chico y hablo.

- me oyes?

No hubo respuesta.

-creo que deberias dormir, pero todo este cableo no te ayudará a descansar bien

Se acercó a unos cables que supuso tendrian que ver con su vida y los desconecto.

-buenas noches!

En la sala se escucho un beep muy largo, el chico salio de allí, varias enfermeras corrieron a la sala anterior con una mujer algo mayor, a los minutos se escucho un grito desgarrador seguido de unos sollozos. continuo con su paseo hasta parar a la sala en donde estaba un niño de unos ocho años y entro.

-hola.

-hola, quien eres? No te conozco.

-me llamo Zeru. Y tu?

-Gabriel.

-quieres jugar?

-si!

-bien!

El mayor de entre ellos tomo varias geringas y se acercó.

-jugaremos al doctor!

El menor se asustó.

-yo seré el doctor...

Clavo una en cada ojo y luego una directamente en el corazón.

-y tu mi paciente.

El niño empezo a gritar y llorar, a los minutos no hizo ruido alguno y se escucho el beep largo.

-ouh, mi paciente murió por sobredosis...

Sonrió y salió de allí, continuo su caminata y terminó a parar a la sala de bebés, entro a esta, vio a muchos niños y niñas, se acerco a uno específico y lo tomo.

-eres una linda niña...

Se acerco y beso su mejilla.

-voy a llevarte conmigo!

Salio del lugar con niña en brazos. al llegar a su casa acostó a la niña en su cama y fue a la cocina a hacer leche.

-si mal no recuerdo, papá esconde la leche al final de la gaveta.

En efecto, busco alli y la encontró.

-no se para que la esconde si igual me la comeré a escondidas, bueno, ahora es para la niña.

Con una cuchara, abrió el envase y tomo un poco de leche en polvo y se la llevo a la boca, luego tomo otra cucharada para hecharla en un envase de cuando era bebé.

-pense que esta cosa seria inutil...

Hecho agua y lo mezclo con el resultado de que el envase ya tenia leche dentro, subio a su habitacion y se la dio a la niña.

-bebelo completo.

Aunque la niña no entendiera efectivamente hizo eso. Termino por dormirse y el mayor tambien.

A la noche siguiente el joven dejó a la niña otra vez en el hospital en donde la encontró.

-prometo volvernos a ver.

Quiera o no, se encariño con la niña como su hermana. Pero no podia cuidar a una bebé asi como así. Era psicopata, no aweboniado.

De allí fue a los "territorios prohibidos". Esos lugares que anteriormente pertenecía a una potencia que ocasionó la tercera guerra mundial, irónicamente, quien él admiraba.

Fue hasta un hogar abandonado que a cualquiera espantaria, pero él en realidad le gustaba. Entro a ese lugar, el suelo rechinaba por cada paso dado pero no era de importancia, fue hasta el sotano y alli pudo observar muchos cadáveres, armas y sangre putrefacta, el olor era asqueroso e intolerable, pero a el chico no le importó, empezó a revisar cada arma alli hasta que vio unos cuchillos y varias hachas.

habia un lugar especifico en donde deberia haber un hacha principal pero yacía vacío. Supuso que alguien la habria robado o algo por el estilo.

"Ese de allí zeru"

Se acerco a una hacha nueva, no tenia uso y tenia bastante filo, seguido tomo todos los cuchillos y con uno escribió su nombre en el hacha.

-apuesto a que cierto niño de franjas verdes y rojas tambien tendrá un hacha de parte de su papi Canadá.

Guardo todas las armas en un bolso tricolor que traía consigo.

-hasta el fantasma de Canadá hizo mejor papel siendo papá mio que mi padre Perú.

Termino por salir de el lugar y en la puerta dejo unos dulces que decían "para: Canadá".

Se fue de los territorios y volvió a su hogar.