Experimento Beta#1402-73

[07]

— ¡Estuvieron como locos!— exclamó Clyde que hacía gesticulaciones a gusto del resto un tanto exageradas —Yo estaba con Bebe, así feliz de la vida y ustedes como locos comenzaron a pelear, cuando tiraron las puertas se pelearon cual animales, Kenny lastimó a Leo y se rindió a la verga y tú te cogiste a Tweek— relataba Clyde, sin tacto alguno de por medio ante los acontecimientos.

Kenny miró la superficie grisácea de la mesa, apenado por lo que hizo a pesar de no poder recordarlo. No había visto a su compañero durante aquellos días tampoco, y según lo que escuchó su ojo estaba herido y querían salvarle la vista. 

Aquello fue suficiente como para creer y estar convencido de que era la peor mierda de este miserable mundo, la cosa es que tampoco estaba dispuesto a pensar lo contrario. 

A sus propias palabras, merecía cualquier desprecio por parte de aquel chicuelo que hacía su pecho retumbar cual tambor, pero, también le dolía el sólo imaginar que el escenario del pequeño Leo odiándolo se hiciese realidad.

Por su parte, A9 se encontraba mirando su comida sin gracia alguna, moviendo la misma con el tenedor de manera repetida. Sin llegar a ingerir tan sólo un poco. 

—¿Vas a comerte eso?— preguntó Erick a su lado, a lo cual con un gruñido y un rostro fastidiado hizo su charola a un lado, dándole pase libre al gordo capitalista ese.

Se encontraba algo decaído, pero no encontraba la razón de su sentir. No tenía lógica alguna. No se sentía del todo culpable pues no recordaba nada de lo que decían sus camaradas, siendo sinceros, sin pelos en la lengua, poco le importaba ese jaguar.

Pero de igual manera, se sentía bastante confundido, pues de sólo imaginar la escena de él atacando cual salvaje, como una bestia sin pizca de razón. Le daba nauseas, asco de sí mismo.

Sus ojos comenzaron a picar sin razón aparente, como el resto de cosas. Cosa que no le hizo percatarse de lo que estaba sucediendo, hasta que la algo anonada pero preocupada voz de A11 llamó su atención.

—Craig, ¿Por qué lloras?

Esa simple pregunta logró hacer que cayese en la realidad, los que se encontraban en la mesa le miraban extrañados, no los culpaba. Él tampoco sabía el porqué de su actuar tan fuera de lo monótono.

—No lo sé— contestó seco, con su voz un tanto más rasposa de lo normal. A una velocidad moderada, comenzó a ponerse de pie al momento en que pasaba su mano derecha por su rostro.

Borrando cualquier indicio de humedad, de debilidad. Con una rudeza que le hizo arder la piel, que molesta enrojeció con rencor. 

—*—*—*—*—*—*

En otra escena, un lugar apartado a aquella narrativa anterior se estaba llevando a cabo una pequeña discusión, para revelar lo aprendido de los individuos sometidos.

—Seré concreto, los Alfas tienden a perder su control cuando un Omega esta en celo, y como es de esperarse esto también afecta al omega en un nivel preocupante por ambas partes, pues parece la pérdida de razón es tal que la memoria pierde los datos. Como si no hubiese sucedido— compartió Jimbo Kern, con esa educación que debía llevar por mera etiqueta.

—Estoy en concordancia,  con eso puedo deducir que las peleas son el modo en que ellos se dan el honor de tener al Omega. Además, cuando los ritmos cardíacos del omega aumentaron de manera drástica fue cuando A9 uso esa peculiar forma de comportamiento tan dominante y agresivo, obligan al Omega a tener la necesidad de hacer lo requerido para regular su ritmo cardiaco, ya que este se acelera y por ende genera esa necesidad.