Orgullo

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¿Qué viene a tu mente cuando lees orgullo?,  es importante el concepto que tengas sobre esta palabra, ¿es para ti algo positivo o negativo?. Déjate llevar simplemente por lo que te viene a la mente como primera impresión, porque es importante,lo que opines  sobre esto.

El Orgullo considero que es uno de esos términos apasionantes que existen, porque en su significado, al tener varias acepciones lo engloba todo, lo positivo y lo negativo. No me voy a poner técnico  colocando lo que dice  la real academia de la lengua sobre esto, creo que con que te haga un esbozo fundamental del concepto, es más que suficiente, para que te pueda transmitir las ideas que quiero que interiorices. 

Por un lado tenemos la acepción más negativa, al valorarnos tanto, que desprendemos arrogancia, y vanidad, desencadenando aveces un sentimiento de superioridad sobre los demás.

Por el otro, encontramos un sentimiento de satisfacción por los logros personales, o aquellos con los que nos sentimos involucrados.

Seguramente te vino a la mente la acepción negativa, quizás pensando que alguien cercano ya sea la que fue tu pareja, familiares, amigos,... Actúan o lo hicieron con orgullo, y por ello te has sentido o sientes infravalorado. Por desgracia cuando estamos mal, todo lo tendemos a tomar por su lado mas oscuro,... Aunque cuando estamos "bien", quizás también tenemos la misma percepción sobre el orgullo, porque nos educan para que seamos humildes desde niños, no fomentando adecuadamente el ser "realista". Si se te da bien hacer algo, o tienes alguna característica que no todo el mundo posee, la debería dar a conocer, y fomentarla por ti mismo, nunca esperar a que los demás te "alaben",... El orgullo te da esa satisfacción que se siente por el "trabajo" bien hecho, el cofre que se abre dentro de nosotros del tesoro de la plenitud.

 En el capítulo anterior te hablé de los objetivos, y te llenarán al cumplirlos si fomentas el orgullo sano por tus logros, no sólo ante eso, si no ante los demás aspectos de tu vida. Pero quizás puedes llegar a decirme que no te sientes orgulloso/a de ti, porque no pudiste salvar tu relación, por mucho que lo intentaste. No deberías nunca pensar eso, ya que, si lo analizas bien, una relación es de dos personas normalmente, donde deben escalar ambos por montañas de dificultades, sujetos por la cuerda del compromiso, comprensión, amor,... Esa cuerda puede desgastarse por una de las partes o por las dos, y terminar rompiéndose,...  Cuidar esa cuerda de unión, es responsabilidad de las dos partes, y una de ellas no puede, ni debe obligar a la otra parte a que la mantenga en buenas condiciones,... Aveces creemos que podemos con el peso "muerto" de una persona que nos tiene algo de cariño, pero no amor, y tiramos y tiramos de esa persona con todas nuestras fuerzas, hasta que no podemos más,... Porque no es algo justo, y ante esa situación,  el desgaste a medida que pasa el tiempo es mayor,... A lo mejor te ha ocurrido que quien has tenido que dejar a la persona que amas has sido tu, y no estás bien, porque separarte de alguien que quieres duele mucho. Entiendo como te sientes, yo también tuve que tomar esa decisión en algún momento, porque no sirve de nada intentar arreglarlo si la otra parte no quiere, al limitarse a seguirte  la corriente verbalmente, pero no hace ni demuestra nada,... Así puedo contaros, que tuve un noviazgo con una mujer de un pueblo de Córdoba que conocí por un chat, fuimos amigos un tiempo, hasta que surgió el amor. Yo había aprendido mucho de otra relación que tuve(aunque no lo suficiente), de poner desde el principio en la mesa lo que cada uno necesita, y como siente y ve las relaciones. Yo  expuse que necesito 3 cosas para ser feliz con una pareja:

- Que me respete y me sea fiel, tanto como yo a ella.

- Que nos viéramos lo más frecuentemente posible, si no podíamos por condiciones económicas, o laborales, al menos deberíamos vernos una vez cada 3 meses.

- Y que si alguna vez me dejaba de querer, que me lo dijera claramente.

No se si la primera la cumplió(yo estoy tranquilo de que sí), la segunda al principio en los primeros meses si fue realizada, pero duró poco, y eso fue uno de los problemas graves para mi. y la tercera si la cumplió cuando nos dimos una oportunidad tras la primera ruptura, apunto de volvernos a ver, me hizo añicos el corazón a un grado desgarrador al confesármelo.

Mi mayor error fue de todos los que pude cometer, el tener poco orgullo, y ser demasiado comprensivo, tragué demasiado con lo que veía incumplido por parte de ella, siendo tan "tonto" que se lo justificaba,... Sin embargo yo cumplía siempre con lo que me demandaba ella, el estar en todo momento cuando me necesitaba, el apoyarla, consolarla, y no ser empalagoso, porque no era nada romántica, no quería ni que celebráramos aniversarios, ni el día que nos conocimos, ni cosas de ese estilo.

Yo quería tenerla cerca, desde los primeros meses ya la decía que quería estar con ella siempre, que buscaría trabajo donde ella vivía, y rechazó esa idea, no me quería a su lado físico, a pesar que cuando estuvimos juntos en persona parecía muy feliz, pero tampoco me veía mucho, y ese fue un tema de discusión.Recorrer un montón de kilómetros para estar juntos, y sólo verla un par de horas al día, teniendo que pasar el resto en la soledad de la habitación de un hostal es surrealista. Eso entristece mucho, por ello veía muy importante el irme a vivir allí o al menos cerca, porque pensaba que nos podríamos ver más y de forma más natural. Pero no quiso, me dijo que no me lo tomara a mal, pero que se sentiría fatal si lo abandonaba todo por estar cerca de ella, y lo quise comprender, ¿orgullo donde estabas?, esta claro que conmigo no,... 

La mujer tenía muchos problemas de autoestima, pensamientos muy negativos, entre otras cosas, y creí que mi inteligencia emocional, y mi amor,  podrían solucionar todo lo que la ocurría, pudiendo así ser realmente  feliz, ese desgraciadamente fue otro grave error,... Ella decía que quería curarse de sus problemas psicológicos, pero no hacía nada por mejorar, la ofrecí a pagarla un psicólogo, pero se negó,... Quise salvar esa relación por todos los medios, y lo intenté,... Aunque cuando lo superé, me di cuenta que no tenía ninguna solución, ni la podría tener nunca.

Fue la mujer que peor me dejó, pero de la que más aprendí, porque el orgullo tomó una importancia más crucial, al verlo necesario, siempre en la acepción positiva. Debes sentirte orgulloso de tener palabra, y cumplir lo que dices, o prometes. Debes estar orgulloso de la persona con la que estés sentimentalmente, y no lo podrás estar nunca si ella no cumple su palabra, ni da un valor al compromiso similar al tuyo. Duele mucho despedirse de alguien a quien amas, pero más te dolerá si te caen las ruinas del desamor encima, y el desgaste termina hasta con el cariño, demostrándote sin tapujos que no te quieren, para después terminar confirmando con palabras. Tantos errores, energía, tiempo perdido, amargura,... Se podían haber evitado sacando a nuestro amigo el orgullo, ¿lo tienes cerca o tendrás que encontrarlo?.


Reconstruye tu corazón (Completo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora