Capítulo 19

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Íbamos aun en el auto, Cameron sonreía como un niñito cuando le dan lo que había estado pidiendo durante meses, la verdad es que me mataba la curiosidad por saber que es lo que esta tramando ahora, y me dio por preguntarle a ver si por fin me quiere decir algo al respecto — Oye Pecas ¡YA! En serio ¿Por qué tanto misterio? ¿Qué tanto estás tramando? — Él se detuvo en un semáforo y dijo en una tónica emocionada y nerviosa a la vez: — Ya pronto sabrás de qué trata todo el asunto Latina — Intenta no reírse — Solo sé que te va a encantar mucho, ya verás. Asentí y él siguió manejando. Sé perfectamente que está luchando por sobre todas las cosas para no decirme absolutamente nada, Cameron es alguien que cuando se le mete algo en la cabeza nadie lo saca de ahí y cuando se propone a no hacer algo... NO LO HACE.

Llegamos a la mansión, todo estaba en silencio total y me parece muy extraño ya que ni siquiera vi a Mario y Alejandro en la entrada, siempre están allí cuidando la entrada, me alarme un poco porque eso es muy poco usual en la mansión. Cameron se bajó del auto y me pidió que lo esperara allí un momento, entró a la mansión mientras yo veía que Mario y Alejandro salían a acompañarme, yo creo que ellos tampoco sabían nada de lo que pasaba allí dentro, me lo decían sus rostros. 

Unos minutos más tarde, por fin vimos que salió de la mansión, pero con un pañuelo en las manos, abrió la puerta del auto y me cubrió los ojos con el pañuelo — No te asustes, solo déjate guiar Saory — Dijo Pecas tomándome de las manos. 

— Okey, está bien — Contesté.

Va a darme un infarto debido a tanto misterio que hay, parecía un ambiente fúnebre, tanto como aquella vez que Cameron fue a casa de Dove para la sorpresa que íbamos a darle. Si estoy bien ubicada, creo que ya vamos llegando a la sala, ya que entramos por el área de servicio, escuché por un momento la voz de Maya pero la mandaron a callar de inmediato, luego de un instante Cameron dice: — Voy a quitarte la venda a la de tres. 

— ¡Si va! — Contesté toda emocionada.

— 1... 2... ¡3! — Me quitan el pañuelo y todos gritan: ¡SORPRESA! 

— ¡O POR DIOS! ¡NO PUEDE SER! — Exclamé al ver a mis hermanos y a Sherlyn en la mansión. No me contuve más y corrí inmediatamente a abrazarlos, las lágrimas corrían por mi rostro casi por voluntad propia, no podía creer que después de casi un año de estar separados por fin podríamos estar juntos. Pensé que esto era una mala jugada de mi cerebro puesto que mi deseo era volverlos a ver y que estuvieran conmigo aunque sea por unos días.



Cameron

Estoy muy feliz por Saory, ver esto me llena de emoción, por fin mi amada está con su familia después de tanto tiempo. Mi padre me abrazó mientras veíamos aquella hermosa escena, también me felicitó por la buena acción que hice y yo le conteste muy emocionado por todo eso — Esto no lo hice yo solo papá — Recorro con la mirada toda la sala antes de continuar con lo que decía — Mi madre, Maya y Kelly me ayudaron mucho para que esto se cumpliera y en tan corto tiempo — Mi padre me ve a los ojos y me dice: — Estoy muy orgulloso de ti hijo. 

En eso Eduardo el hermano mayor de Saory la abraza fuertemente y le dice — Ya estoy aquí para ti después de tanto tiempo enana — Ella lo mira a los ojos por un momento y luego mirándolos a todos ellos les dijo: 

— Lo que importa ahora es que estamos todos juntos ¡Y juntos nos vamos a quedar! Por cierto — ¿ENANA? ¡QUE VA! Mira que soy unos centímetros más alta que mi Jefe.

— Qué es lo que Cameron ¿Todo bien? — Dijo Eduardo supongo que para entrar en confianza — No te había dado las gracias por habernos traído a ver a Saory.

El Bailarín Que Cautivo Mi CorazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora