El Bailarín Que Cautivo Mi Corazón

EXTRA 6

La llegada de Carlitos

Saory 

Después de tanto tiempo por fin llegó el día en que mi segundo hijo iba a nacer, otra vez sentía esas odiosas contracciones que van a terminar por matarme, Cameron estaba vuelto loco corriendo de un lado para el otro, Samara corría por toda la casa mientras mis hermanos la perseguían y yo estoy al borde de un COLAPSO. 

— ¡CUANDO NOS VAMOS! — Gemía del dolor — Me ayudaron a subirme al auto. 

Estaba desesperada... Lo que quiero es salir de esto ¡YA! porque de verdad que no aguanto, y sí, lo sé soy muy "SUTIL" pero si estuvieran en esta situación ENTENDERÍAN lo que estoy soportando ahora, nos fuimos rápidamente hacia el hospita.l

— Pero... ¿Qué tenemos aquí? — Dijo una enfermera sonriente — Es la señora Saory. Dicho esto, obviamente me atendieron de inmediato, esta vez Pecas si entrará conmigo, eso me tranquiliza un poco, pero a la vez no... ¡LA VERDAD NO SÉ!

Una vez adentro... Empezó mi tortura de algunos minutos, esos minutos que para mí serán ETERNOS, traer al mundo a Carlitos va a ser un trabajo complicado pero lo valdrá. Tomé a mi amado esposo de la mano para sentirme segura, él depositó en ella un tierno beso mientras me decía que no me preocupara y que si iba a lograrlo. 

— No sé si pueda hacer esto — Gemí — Apreté fuerte su mano y él besa mi frente la cual estaba algo sudada por el esfuerzo. 

— Todo estará bien Latina — Decía para darme ánimos — Estás haciendo un buen trabajo. 

Jadeé seguido de un gemido. No puedo soportar esto ni un minuto más... Pero bueno, todo sea por tener a mi pequeño hijo conmigo, cada minuto que pasaba lo sentía como una eternidad, he perdido la noción del tiempo, no sé si ha pasado solo un segundo o si han pasado ya varias horas, no lo sé, de lo que estoy segura es que el dolor no me deja pensar en NADA, solo en mi hijo que está naciendo ahora mismo. 

— ¡YA NO AGUANTO MÁS! — Decía muerta del dolor.

— ¡Sigue así Saory, ya esta saliendo la cabeza! — Decía el doctor para darme ánimos.

— ¡QUE ESPERANZA! — Dije en mi mente — YA QUIERO QUE SALGA COMPLETO.

Debí escoger el parto por cesárea pero ¡NO! Yo de loca quise dar a luz nuevamente, Pecas estaba hecho un manojo de nervios, me atrevo a asegurarlo, él estaba más nervioso que yo porque veía como estaba a punto de caer desmayada en la camilla, lo miré y le dije para fastidiarlo un poco. 

— Creo... Que vas a usar condón la próxima vez — Él se sonroja mientras veía como seguía gimiendo del dolor. 

Solo me siguió la corriente, no sé cuanto tiempo ha pasado exactamente de estar en esa zozobra... Pero de repente, escuchamos un pequeño llanto en la sala, por fin pude liberarme de tanta angustia que tenía ¡POR FIN HABÍA NACIDO NUESTRO SEGUNDO HIJO! Traer al mundo a un bebé no es nada fácil y la gente se lo toma como un juego, lo cual es un pensamiento bastante errado. Deberían darnos un premio por eso. 

— Es demasiado hermoso nuestro hijo — Dijo Cam mientras lloraba un poco.   

— Claro, salió idéntico a su padre — Le dije muy feliz.

— Gracias a Dios es un bebé bien sano y fuerte — Dijo el médico.

Una de las enfermeras se lo llevó para bañarlo y acomodarlo mientras yo me encontraba descansando después de aquello, no voy a poder moverme bien por las siguientes horas, mi amado esposo no se despegó de mí en ningún momento, ni siquiera cuando me trasladaron a una de las habitaciones del hospital y eso lo agradezco inmensamente.