Capítulo 44

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(El Nacimiento de Mercy Samara)



4 meses después... 


Pues aquí me ven con mi barriguita, ya a punto de estallar, el médico me dijo que en dos semanas ya tengo a mi pequeña Samara entre mis brazos ¡ESTOY TAN EMOCIONADA! no sé como reaccionar a eso, obvio que feliz pero... Ay estoy muy nerviosa y feliz a la vez, Cameron está muy emocionado, corriendo de un lado para el otro, ya teníamos todo listo para la llegada de Samara. 

— Pecas mi amor ¿Puedes decirle a Lyla que me traiga unas cosas? — Decía — Él volteó y me dijo algo atolondrado y azorado por todo el asunto — Está bien, ya la llamo. Lyla es la nueva mucama, no sé si recordarán a una de mis compañeras de trabajo en el restaurante, bien pues CLAUSURARON el local y se quedó sin trabajo, como la conozco al pie de la letra la recomendé y mis suegros la aceptaron, ya lleva semanas trabajando para nosotros y la verdad es muy buena en lo que hace, limpia mejor que yo, aunque Cameron diga que no es así, pero para mí sí lo es — Saory de verdad ¡QUE EMOCIÓN! ¡ERES UNA SUERTUDA! — Decía Lyla muy emocionada — Si no tuviera a mi James, diría que te envidio de verdad — Nos reímos ambas.

— No pensé nunca que fueras a ser mi mucama Lyla — Le decía — Chama, pero para que veas como soy yo de buena gente, si yo fuera sifrina ni te ayudara, ya que las sifrinas solo piensan en ellas y lo sabes mejor que nadie.

— Tranquilízate chama — Imitaba ella mi acento — Tú eres un amor y por eso Cameron se enamoró de ti, porque eres bella por dentro y por fuera Saory.

— Chama de pana que me vas a hacer llorar con esas palabras — Le decía algo sentimental — Oye luego hablamos, no vaya a ser que mi suegra te esté necesitando y yo por aquí te ando distrayendo de tus labores.

— Bueno, cualquier cosa me llamas inmediatamente — Dijo y se marchó a su trabajo de nuevo.

Yo solo me quedé allí acostada por un momento sintiendo como Samara se movía muy dentro de mí, cada vez que yo sentía una patadita de ella, para mí era una gran emoción y más sabiendo que pronto vería sus ojitos, sus manitos, toda, TODA ELLA, mi primogénita Samara Boyce Marcano ¿Se imaginan ustedes cuando la tenga entre mis brazos? Esa va a ser una emoción tan grande para PECAS y PARA MÍ también, voy a estar es monísima con mi hija, dos semanas... DOS SEMANAS para ver a mi hija hermosa.



Cameron 

Ando corriendo de acá para allá, es que quiero que todo, absolutamente todo esté preparado para la llegada de mi princesa hermosa, a tan solo dos semanas... DOS SEMANAS NADA MÁS y seré padre oficialmente, Samara... El segundo amor de mi vida. 

— Karan ¡APRESÚRATE CON ESAS COSAS! — Gritaba mientras subía unas cosas que compré al carro. Mi bro es otro más que anda en un "corri, corri" porque ya a él le queda poco también, Dove y Chyna se encontraban conmigo, estaban vueltas locas comprándoles unas cosas a Samara, dicen que van a ser las tías consentidoras y vaya que están sabiendo serlo. 

— Esta ropita me parece PERFECTA para ella  Cameron — Dijo muerta de ternura y cariño — ¿No lo crees Chyna? — Yo solo asentía a todo lo que ella me decía ya que Dove tiene un buen gusto para esas cosas. 

— Pues me parece muy hermosa Dove, pero mira esta que encontré... Es una ternurita — Sonreían — Esas dos son un huracán completo, si por ellas fueran, se llevaran toda la tienda, sin exagerar, mínimo se llevaron 3 docenas cada una y les parecía poco. 

El Bailarín Que Cautivo Mi CorazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora