one-shot》5

1.4K 74 0
                                    

-An unexpected kiss.

Cada año, los estudiantes del Liberty High y los estudiantes del Monroe celebran su eterna enemistad mediante una fiesta

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cada año, los estudiantes del Liberty High y los estudiantes del Monroe celebran su eterna enemistad mediante una fiesta. Fiesta caracterizada por borrachos que acaban pegándose entre ellos.

El Monroe siempre le había tenido rencor al Liberty. De las cinco finales de baseball que libraron contra ellos, el Liberty les ganó en todas. La fiesta era siempre la excusa perfecta para buscar una venganza. Robarle la novia a uno del Liberty, quitarles dinero de la cartera, tirar sus bolsos a la piscina. La fiesta se convertía siempre en la más famosa pero también en la más odiada. Odiada desde luego por los vecinos. Los estudiantes disfrutaban de esta violencia con el contrario.

Así que, como todos los años, los del Liberty organizaron la fiesta en la casa más conocida; la de los Walker. Su anfitrión, el legendario capitán de Baseball del equipo, siempre mandaba a varios del Monroe al hospital.

Este año había algo nuevo; la fiesta sería una fiesta de disfraces. Según los del Liberty, así encontrar a tu enemigo sería más interesante. Pues todos tenían claro que esa noche, la sangre mancharía más de dos narices.

Las estudiantes del Monroe nunca faltaban a la fiesta. Siempre cabía la oportunidad de enrollarte con alguno del Liberty. Era irónico; mientras unos se peleaban en el jardín, otros se montaban entre ellos en las habitaciones.

Claro que había gente como Kat que nunca iba a la fiesta. Era la única de su grupo de amigas que no iba. Pero este año iba a ser diferente. El haberse hecho novia de un jugador del equipo de Baseball del Monroe casi la obligaba a ir. "Debes ayudar a tu hombre si este cae en la batalla", le decían los amigos de Cris, su novio.

Así que con su móvil cargado al 100% y enfundada en un disfraz de animadora, Kat cruzó corriendo el jardín de su casa.

Una vez se sentó de copiloto en el coche de Cris, este estampó sus labios contra los de ella. Después, arrancó y salió pitando del barrio de Kat lo más rápido que pudo.

**Kat's pov**

-Siento la tardanza -me lamenté, ajustando mi coleta.
-La fiesta empezó hace media hora -me dijo Cris-. Pero no hay problema. Es mejor llegar cuando los del Liberty estén borrachos -hizo una pausa-. Vas muy sexy.
-Huh, gracias. Tú disfraz de ninja también es muy sexy.

Su disfraz constaba de una especie de túnica negra sin mangas, que mostraba sus redondos hombros, y una cinta del pelo negra. No pude evitar pensar en lo rematadamente sexy que esa cinta le quedaba.

Tras pasar diez minutos charlando sobre los jugadores de Baseball de Liberty -Kat, no olvides que el peor de todos es Walker-, llegamos a la casa del capitán.

No hace falta decir lo grande que la casa de Walker era, pues dinero en esa familia no faltaba.

Agarrados por el brazo, Cris y yo atravesamos la casa y llegamos al jardín.

-¡Cris Hunts ha llegado, amigos! -exclamó Joe-. Wow, Kat. Estás espectacular -me dijo tras saludar a Cris con un buen apretón de manos.
-Igualmente -no saludamos con dos besos-. ¿Has visto a Jenny?
-Esta al lado de la piscina.

Me despedí con un gracias y me fui a avisar a Cris de que buscaría a mi amiga. Él me dijo que iría a saludar al famoso Bryce Walker.

-¡Nena!

Abracé a mi amiga y nos sentamos en unas tumbonas.

-Amiga, esta fiesta esta llena de tíos buenos -casi gritó, tendiéndome un baso de cerveza-. Ese de allí no ha parado de tirarme fichas durante toda la noche. ¡Y míralo! -suspiró mirando a un chico del Liberty cuyos rasgos asiáticos resaltaban.
-No está nada mal.

El chico posó su mirada sobre nosotras, y nos sonríe. Al instante, llega un grupo de chicos y lo rodea.

Tras un rato de cháchara con Jenny, me decido en reencontrarme con Cris.
Lo encuentro en la cocina, de espaldas a mí, abriendo una cerveza.

Rodeo su torso, apreciando sus músculos que parecen haber aumentado, y en lo que él se gira a mirarme, poso mis labios sobre los suyos. Introduzco mi lengua en su boca y al instante noto que algo raro está pasando. Cris no es el mejor dando besos con lengua, pero en este momento es increíblemente bueno.

-Menuda lengua.

Espera. Esa no es su voz. Abro fuertemente los ojos, encontrándome con un chico al que jamás había visto en mi vida.

-¡¿Quién eres?!
-El tío al que acabas de besar apasionadamente.
-Lo siento mucho -mi mente colapsa-. Te he confundido con mi novio porque ambos lleváis el mismo disfraz.

Bajo su cinta de pelo, aprecio un pelo bastante más claro que el de mi novio.

Yo me moría de la vergüenza. Posé mi mano en una de mis mejillas, notando lo ruborizada que estaba, y salí a paso rápido de la cocina. Sentí los pasos del chico detrás de mí.

-Oye, no te lamentes. Ha sido uno de los mejores besos que he tenido en mi vida. Supongo que eres del Monroe. Yo soy Montgomery, jugador de Baseball del Lib...
-Me alegro de que te haya gustado, Montgomery. Pero ahora debería ir a buscar a mi novio.

Ambos nos paramos en seco. Le miro. A pesar de haber sido cortante con él, mantiene una sonrisa orgullosa, y bonita.

-Te aconsejo que te diviertas un poco. No todos los días me fijo tanto en una chica.

Wow. Así que así es cómo ligan los del Liberty.

-Okey. Iré a ver a mi novio un momento. En un rato nos vemos.

Realmente no sé ni por qué acepté a volver a verle, simplemente pensé que quizás me vendría bien conocer a nuevas personas.

Me tomé otra cerveza y fui en busca de Jenny. El sitio dónde antes nos habíamos sentado estaba ahora vacía. Había varias personas en la piscina, pero no reconocí entre ellas a Jenny.

Cuando noté unos fuertes brazos elevarme por las rodillas y de repente mis pies ya no tocaban el suelo. Apenas me dio tiempo para ver de quien se trataba. Para ver quien me estaba cargando como un saco de patatas. Cuando de repente noté mi cuerpo impactando con el agua fría de la piscina. Me hundí momentaneamente, y cuando volví a la superficie, traté de ver a aquella persona que me había tirado con ella a la piscina.

-Hola otra vez -y lo vi. Con la misma sonrisa de antes.

Montgomery de la Cruz  [o.s.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora