Ella Es Especial

Belleza exotica 15

"Nuestros pasos y el camino forma nuestro pasado, pero nuestro futuro lo hacemos nosotros"

Hiro, era alguien que escondía secretos, después de todo eran ninjas y la información era un precio a pagar, el reconoció a Ibiki por eso y le quiso, pero el secreto que mas escondida y muy pocos sabían era su pasado, sus antepasados y la sangre que corría por las venas, porque si se supiera, sabia que los ancianos de su antiguo clan lo usaría para que el poder creciera.

Pero sin importar que, creció formándose para ser un Shinobi de primera, ser el mejor. Lo hizo, porque en cada pelea el ganó, porque su nombre fue escuchado por todas la naciones y el miedo que solo provocaba al mencionar su nombre hizo que su ego creciera, pero muy en el fondo eso no le cantaba el corazón, ya no le daba felicidad.

Y empeoro todo, cuando los ancianos del clan, presionaron con una boda, con herederos, con que era hora que se quedara en el compuesto e hiciera sus deberes, la presión que era valioso para que muriera sin dejar legado, así que cuando a su hermano menor se le dio la orden de matarlo para obtener el Mangekyo Eterno, así que con eso se fue, dejó su nombre atrás y su clan.

Pero Hiro jamás pensó que en una misión su vida cambiaría, porque cuando paso por un pueblo entre las olas, vio a la cumbre de Geishas que desfilaban y hacían su travesía para llegar a un templo, ver los kimonos elegantes y de colores, ver las sonrisas exactas y las mujeres que se veían como diosas caminar entre los vivos, hizo que su corazón latiera y que el dejara ahora todo, para ser una, no. solo una simple Geisha el quería tener el más alto titulo.

Entreno para ser una, y poder enseñar, poco después puso su academia que con el paso del tiempo ganó fama y las hijas de los señores feudales iban para que el ahora conocido como Hiro, les enseñara, Pero aun así sintió su vida vacía y aquel sentimiento que le hacía falta algo, y empeoro cuando a lo lejos vio a su hermano tener hijos, verlo en rara ocasión con ojos orgullosos y llenos de amor cuando los veía o cuando el compartía un pequeño y disimulado detalle con su esposa.

Pero en sus días grises, llegó una niña con cara regordeta de cabello rosa como los cerezos y ojos verde hada, que ahora sus días era de colores, con cada aventura que vivía y la entusiasta pequeña Sakura-chan hacía que hiciera, como aquella vez que entraron a un tienda y se probaron todo tipo de ropa y reírse por las locas combinaciones, y que al salir no hayan comprado nada o cuando insistió tanto en elaborar una tarta a Anko-sama llena de Danjo para que la cocina terminará un caos y la tarta la comiera ella. y con ella su vida no se sentía vacía, por eso juro que la protegería y que entrenaría para no morir.

Sonrío grande y si se mirara en un espejo el mismo, Hiro estaba seguro que tenia los mismo ojos de su hermano cuando veía a sus hijos, orgulloso y con tanto amor que temiera que se desbordara, pero con ello la preocupación, el miedo de perderlos solo al parpadear. Mas cuando Sakura, caminaba detrás de los dos ruidosos de sus compañeros y de vez en cuando volteaba a verla para pedir su opinión y la forma en la que ella levantaba la mirada de su libro para responder.

"Oh, mira Sakura-chan, es la mujer bonita con la que a veces estas" Naruto gritó haciendo que los demás lo vieran.

"Dobe, el es un hombre, porque no puedes dejar de ser tan dobe" Sasuke resopló ante las acusaciones del mencionado.

Hiro solo asintió a una Sakura sonriente, porque cuando saliera de la aldea, el pasaría a ser el superior de todos.

"Bueno espero que Itachi-san, Obito-san y Shisui-san, hayan leído los detalles de la misión y el porque ellos son tan indispensables" Hiro habló con su más fuerte que de costumbre y espero uno afirmación de su parte.