💞Prólogo.

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Eran cerca de las nueve de la mañana cuando una particular melodía invadió la habitación de Jimin.

Removiéndose repetidas veces bajo las sábanas en un vano intento de volver a dormirse, Jimin soltó un profundo suspiro a modo de derrota, para luego alzar con notable pereza una de sus manos y comenzar a tantear los alrededores de su cama en busca de su teléfono.

Abriendo parsimoniosamente sus ojos al notar el fracaso de su búsqueda, Jimin volteó a ver ambos costados de la cama, agrandando sus ojos al percatarse de que su teléfono estaba a punto de caerse de esta última, situación que logró hacerlo espabilar en un instante debido a su presuroso actuar.

—¿Qué hace Tae llamándome a esta hora de la mañana? —cuestionó Jimin, frunciendo el ceño al ver el nombre de su mejor amigo en la pantalla, pronunciando aún más este al entrar en cuenta sobre la melodía procedente de su teléfono—. ¿Y por qué tengo a Justin Bieber de tono de llamada?

Acudiendo a responder la llamada telefónica completamente confundido, no pasó nada de tiempo antes de que su amigo le contestara.

Hasta que al fin te dignas a contestar, Kookie lover —dijo Tae desde la otra línea, ocasionando que Jimin rodara los ojos.

—¿Puedo saber qué haces llamándome a esta hora un día domingo? —preguntó Jimin, mientras dejaba escapar un extenso bostezo.

Síp, sucede que ya no lo soporto más.

—¿No soportas más qué, Tae? —cuestionó con desgana Jimin, llevándose su mano libre al cabello.

Ver a mi hermano saliendo con el amor de mi vida.

—Ajá.

Se suponía debías responderme con un "somos dos" —reclamó a través del teléfono Taehyung, ocasionando que Jimin adormilado sonriera.

—Como digas, futuro cuñadito —dijo Jimin, con la única intensión de fastidiar a su mejor amigo.

Gracias —contestó en un singular tono Taehyung, haciendo reír a Park—. Bueno, volviendo al tema, mi punto es que debemos hacer algo al respecto. Quiero decir, necesito hagamos algo al respecto, y ahora ya.

—¿Y qué vendría siendo ese algo que deberíamos hacer según tú? —cuestionó en un murmullo Jimin, cubriéndose los ojos con el dorso de su mano libre en tanto mantenía estos cerrados.

Una buena pregunta para la cuál no tengo respuesta ahora mismo —indicó avergonzado Taehyung, ganándose un bufido por parte de Jimin—. ¿Te parece si voy a tu casa y mejor lo hablamos en persona?

—Sabes lo importante que son mis horas de sueño para mí, Tae...

Lástima, porque ya estoy afuera de tu casa, ansiado cuñadito, así que nos vemos en breve. Adiós —se despidió con burla Taehyung antes de colgar sin siquiera esperar una respuesta de parte de Jimin.

—Yo solo quería dormir un poco más de tiempo... —susurró con pesar Jimin, soltando variados quejidos en tanto se cubría totalmente con las sábanas de su cama.

—... Claro, señora Park, enseguida lo levanto para que venga a desayunar. —Escuchando como la puerta de su habitación era golpeada tres veces, Jimin volvió a soltar un quejido mientras apresaba con mayor fuerza las mantas de su cama, intentando encogerse todavía más bajo estas—. ¡Jimin, si no me abres ahora mismo la puerta, te juro que...!

—¡Está abierta, bobo!

—Ya ni amenazar tranquilo dejas, aguafiestas. —Entrando tranquilamente en el cuarto de Jimin, Taehyung se paró frente a la cama de su amigo y con los brazos cruzados se quedó mirando el bulto que formaba este—. Vamos, ya levántate, que los amores de nuestras vidas no se conquistan solos.

—No quiero...

—Qué desperdicio el no poder disfrutar cada mañana la sedosidad y calma contenida en la voz adormilada de mi hermano, ¿no lo crees?

—Ahora mismo me levanto, ¿feliz? —Mirando con diversión la cara de complacencia de su amigo en tanto este asentía, Jimin se sentó en su cama y miró con una ceja alzada a Taehyung al recordar cierta cosa—. ¿Qué hace Bieber siendo mi tono de llamada?

—Pregúntaselo a mi lindo hermanito, mejor conocido como tu futuro novio y esposo.

—Tae...

—Tú solo déjalo así, y ahora por favor levántate, que tu amigo aquí se muere de hambre.

Vistiéndose lentamente, Jimin se preguntó qué había hecho para merecer tal tortura que representaba levantarse temprano un día domingo.

—Ahora que lo pienso, no sabes cuánto anticipo en un futuro verlos y escucharlos a ambos cantando y bailando sus canciones, se verán tan tiernos...

Soltando un leve suspiro, Jimin miró con una genuina sonrisa divertida a Taehyung.

Era todo un caso su mejor amigo.

Solo esperaba que esta aventura acabara bien, con sus caras llenas de risa y sus corazones latiendo entusiastas, y no con sus ojos inundados en tristeza y sus corazones partidos.

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Your Brother For Mine 🌟 KookMinMini-FicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora