"En ese mismo bosque de nieve,es donde se ocultan las criaturas voladoras,se dice que venían de muy lejos,huyendo de la mano del hombre,emigraron a ese bosque azul,siendo su morada ya desde hace mucho tiempo.... El contacto con ellas es muy sutil,sólo algunos niños han podido hablar con ellas... Aunque cuentan que hubo un día,que un noble muchacho estableció un reino gracias a que contaba con su ayuda,tanto que ellas mismas lo coronaron Rey en aquella lejana tierra.... Son aquellas,las dueñas de la luz y de las artes,que hacen reir al viento al agitar sus alas. ¡Son las hadas,oh hijo,ellas son las hadas.... En algún momento de tu niñez,escuchaste hablar sobre estas doncellas mágicas!".
Comprendiendo cada vez más todos los misterios de este magnífico reino,no cansándome de seguir dejando huellas en las densas nieves de sus tierras congeladas,no sólo llegando a conocer seres fabulosos de otras civilizaciones,sino también llegándome a conocer completamente a mi mismo,alcanzando lo más profundo de este reino,y lo más profundo de mi ser. Si queremos llegar a ser grandes descubridores,tenemos primero que descubrirnos a nosotros mismos; siendo así grandes,logrando algo grande.
Con mis pies enterrados bajo nieve,y dibujándose copos de nieve en mi ropa,llegamos a un bosque congelado que,adornado con cristales de hielo,me llenó de admiración, podían reflejarse matices de colores,y sus ramajes de cristal al ser mecidos por el aire polar musitaban un delicado y gélido sonido que llenaba de satisfecha tranquilidad.
-"¡Que hermoso se ve todo!" exclamé.
En mis manos caían los bellos copos de nieve que llovían en el aire,también irradiaban colores, un pintoresco y frío paisaje.
Cuando en un segundo ví,una luz resplandecer cual estrella,pero no era un cristal de nieve,y cuando quise tocarlo con uno de mis dedos,retrocedió.
Lo observé,y ví que tenía alas,y se alejaba...... Pero yo,emocionado como cuando un niño ve una mariposa por primera vez,y desea hacerla cautiva en sus tiernas manos,empecé a perseguir a esa cautivante luz blanca,candenciosa y sumamente resplandeciente.
Mientras Jáhn desde uno de los árboles cubiertos de hielo,me gritaba:
"¡Corre tras ella Jimmy,no dejes que se te escape!"
Yo hasta saltaba por querer atraparla,pero esa luz tan brillante,cual estrella con alas,estornudó, y al estornudar dejó verse,¡Era una dulce niña,con un vestido esplendente y puramente blanco,sin calzado,y con una corona de flores en su cabecita,y no cesaba de mover sus alas!
Yo quedé paralizado y sin palabras,y la chiquilla me sonrió y seguía esquivándome,en ese instante,increíblemente grité:
"¡Es un hada....!"
Y corrí de la misma manera que lo hacía cuando era niño.
Me adentré más y más en el misterioso y gélido bosque,hasta que llegué a una colonia empírea que colgaba,en las ramas de los árboles de grande altura.
Cientos de faroles florescentes colgaban en sus ramas,y en todo mi alrededor,se paseaban en el aire cientos de criaturas aladas que brillaban igualmente que la primera que yo perseguía,y sólo tenía,una respuesta en mi corazón:
-"Hadas....¡Son hadas...Hadas,no puede ser....Jáhn,son hadas!".
Mi gran ilusión de niño,era ver un hada,atraparla,o que ella me atrapara a mí,para convertirme en su esposo. Corría entre los árboles de inmensas montañas,esperando ver, a una de esas bellas jóvenes que alegraban la imaginación de todo aquel que creía en los libros poéticos y antiguos. Y después de tantos años,veía manifestarse a muchas de ellas ,cual anhelaba antes mi corazón guardando su expresión triunfante hasta el día que visité este bosque. Nunca es tarde para cumplir un sueño.
Había encontrado su luz,su esencia,su poder,su arte,su verdad,y todos sus colores. Yo le diría a Jhon Matthews que aún ignora lo que es estar en el verdadero país de las hadas. Ellas han estado presentes en todas las épocas de la humanidad,y ahora yo,Jimmy Hunter,con mis ojos y con mis manos comprobaba lo que la ciencia moderna nunca fue capaz de comprobar, su innegable existencia....
Todas al verme me observaron con impresión,pues nadie como yo había puesto un pie en su bosque,giraron alrededor mío,tan bellas brillando en sus colores cual si fueran un arco iris que va bailando en el salón del universo. Y yo no dejaba de disfrutar su compañía,haciéndome cosquillas con sus alas y haciendo brillar mi rostro con su polvo aúreo y muy refinado.
¡Hasta que poco a poco me elevaron al cielo...se imaginan el grito eufórico que salió de mi boca... mientras las hadas me llevaban en el viento...! ¡Mientras Jáhn también formaba parte del júbilo,desapareciendo y volviendo a aparecer en el aire...Que regocijo tan grande! Es cuando confundes,si estás viviendo la vida o un sueño....
Cuando aterrizamos,aún las niñas mágicas con esos ojos tornasoles,sonreían tan felizmente cual si ya me conocieran,era algo que no podía explicar pero me llenaba de gozo.
-"Esto es,maraviloso". Añadí queriendo expresar mi dicha con sublimes palabras que no encontré en mi idioma ni en el idioma grielándes.
-"No hace falta que expreses con palabras lo que sientes,ya que ellas interpretan cada uno de tus sentimientos-reveló Jáhn-cuando tu sientes,ellas lo oyen".
Sucedió que una de ellas se acercó más para contemplar mi rostro,y juro,fue conmovedor, resplandeciendo en una luz naranja,se dirigió a mí,diciéndome así:"Jimmy...¡Es imposible! ¿Como has venido aquí? ¿Como puede ser? ¡Has venido aquí!"
Mi corazón se congeló,¿Como es que un hada me conocía? ¡Hablándome en mi propia lengua!
-"Tú....Tú....¿Como es que sabes de mí?"
-"Yo soy Ayla,el hada que cuidaba tus sueños,tus aspiraciones y tus juegos,cuando eras niño".
-"¿Que? ¿Como es esto posible?"
¡El hada que siempre anhelé ver y conocer la estaban viendo al fin mis ojos!
-"¿Quieres decir,que tú me conociste y estuviste conmigo,cuando era pequeño?"
-"¿Como es que lo dudas?"
Y empezó a transmitir en mi mente de forma telepática,recuerdos de mi infancia que ella también poseía.
¡Cuanta delicia! ¡Cuantas bellísimas memorias! ¡Cuanto oro invaluable! ¡Cuantos hermosos recuerdos que viví con tanta ilusión,en cada día!
Volví a ver aquel telescopio que me obsequió mi padre,el cual me hacía ver y aprender. Volví a verme a mí mismo buscando tesoros con la lupa que siempre llevaba en los bolsillos. Pude verme de nuevo en aquella gran biblioteca llena de maravillosos libros de extraordinarios escritores,como Jules Verne,quién siempre fue mi autor favorito,quién con sus fabulosos personajes de gran coraje y corazón en sus aventuras,me inspiraron en mis sueños viajeros.... Ví de vuelta a mi madre, que siempre preparaba sandwiches para mí y para mi mejor amigo Victor,mientras jugábamos a que eramos descubridores de tesoros y continentes.
Todo volvía a mí,cual éxtasis. No pude evitar que las lágrimas brotaran de mis ojos, convirtiéndose en cristales de nieve en el aire.
Y todos aquellos momentos,Ayla,el hada que velaba mi niñez,los guardaba con mucho cariño.
Un reencuentro de un compañerismo que fue invisible ante mis ojos algún tiempo, pero siempre estuvo allí....
-"Así es Jimmy-añadió-todos aquellos que han sido personas de gran prodigio,han tenido un hada en su niñez,que los vió crecer,y hacerse grandes".
¡Así pude conocer también,el hada de cada uno de mis héroes de la infancia....Ahí conocí, el hada de Marco Polo...la de Roald Amundsen.....la de John Hanning Speke....Y pude mirar,la niñez de cada uno de ellos... Que enorme privilegio...!
Así,en el frío bosque de las hadas,descubrí que mi lugar,es el mismo de aquellos extraordinarios y grandes exploradores,y yo,Jimmy Hunter,siendo uno de ellos....!Que enorme honor.... Que enorme orgullo!
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El Reino del Polo Sur
PertualanganEl intrépido y valiente aventurero Jimmy Hunter, descubre un gélido y bellísimo reino en las tierras incógnitas del polo sur. Conociendo a todas las criaturas que habitan en él, junto a su guía y mejor amiga Jáhn,vivirá cosas inolvidables ... -Esta...