mesa para siete.

c u a r t o.

🌙.

- bueno, aquí es, muchas gracias otra vez señor Kim. -HoSeok sonríe.

- no hay de qué, Jung.

TaeHyung tiene esa expresión de "¿puedo pasar?" pero al parecer HoSeok simplemente la está ignorando.

- eh, bien, yo entraré ahora, sip. tenga buenas noches. -HoSeok hace una reverencia breve y saca las llaves de su bolsillo para abrir la puerta.

TaeHyung está decepcionado, pero espera que para la próxima si resulte. si es que hay una próxima.

hace una leve mueca de disconformidad y asiente.- claro, hasta mañ-

la puerta se abre abruptamente dejando ver a una chica rubia y a un niño de ojos grandes y pelinegro colgando de su pierna. aquella chica luce desconcertada, y el pequeño se ve confundido y feliz.

- ¡mami!

¿mami?
TaeHyung no entiende nada de esta situación.

al ver a HoSeok respondiendo a su saludo y llenando de besos y abrazos al pequeño sus dudas son aclaradas.

wowowowow, JooHeon no me dijo algo acerca de esto.

- Jung, ¿t-tu hijo-

- ¿quién es el señor, mami?

TaeHyung no pasa por alto la mirada filosa que le da el pequeño, ni mucho menos la pícara que mantiene la chica rubia.

- sí Hobi, ¿quién es el señor?

aquella muchacha lo está escudriñando totalmente y no sabe cómo sentirse ante eso.

- yo-

- señor Kim, ella es Ahn MinSuk, una amiga que cuida de los niños. MinSuk, él es mi jefe, el señor Kim.

¿escucharon eso? es el corazón de TaeHyung cayendo desde un sexto piso.
osea, sí, es sólo su jefe y sólo tienen una relación de trabajo, pero duele escucharlo en la boca de esa persona.

¿qué tan mal te tiene este hombre en menos de un mes, Kim TaeHyung?

- un gusto señor Kim. -la chica hace una reverencia.

el rubio mayor imita su acción.- el gusto es mío, señorita.

ella sonríe y luego mira a HoSeok con una expresión más seria.- tú, Jung HoSeok, ¿piensas acaso dejar afuera a tu jefe?

TaeHyung está comenzando a odiar la palabra «jefe».

- MinSuk, los niños-

- los niños deben aprender a comportarse, -el niño le da una mala mirada a MinSuk y se baja de los brazos de HoSeok para entrar corriendo al departamento.- ¿no quiere pasar, señor? estamos por cenar.

a Kim le brillaron los ojos. después de procesarlo por un par de minutos, decide que poco le importa la reciente noticia de que Jung en realidad tenga cinco hijos (y no hermanos, como él había creído). nunca había conocido a alguien tan radiante y único como él y si este brillante sol viene con la responsabilidad de otros cinco solecitos más pues él está más que dispuesto a hacerse responsable. entonces no pierde la oportunidad y sonríe amplio.- con gusto, gracias por la invitación.