t e r c e r o.

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🌙.

TaeHyung presiente que hoy será un buen día.

se levantó muy temprano sin planearlo y disfrutó de un baño y un desayuno espléndido antes de venir en su Jeep (que había estado en el mecánico hasta ayer) al trabajo. un gran comienzo que espera que por nada del mundo se vea estropeado más tarde.

con su cabeza flotando entre las nubes, saluda a la recepcionista y sube a su oficina a dejar su portafolio.

baja de nuevo y "sin querer" pasa por el cuarto del conserje que está ligeramente abierto y le echa un vistazo. no encuentra a HoSeok ahí, pero obviamente ese no era su objetivo en primer lugar.


resoplando, sigue caminando por los alrededores de la empresa, saludando a los trabajadores y "sin querer queriendo" pregunta por HoSeok. nadie lo ha visto aún, supone que está en el baño o algo así ya que la puerta estaba abierta cuando pasó y la única copia de la llave la tiene Jung.
suspira una sonrisa cuando verifica la hora y nota que nadie ha llegado tarde,
excepto su hermano.
bueno, él es el dueño y llega cuando quiere, a veces y ni viene a la empresa así que un regaño no está de más en estas ocasiones.

- buen día, Jo. -choca puños con su hermano mayor.

- buenos días, Tae, ¿cómo va la mañana?

- bien, todo está en orden y nadie llegó tarde, el único eres t-

- oki, le dices a JungMi que me mande el café con mi secretaria, adiosito. -hace un gesto de despedida con su mano y se adentra al ascensor lo más rápido.

pues si hay algo que JooHeon odia son los sermones mañaneros de TaeHyung, el hermanito "ejemplar y responsable".

el Kim rubio rueda los ojos y va en dirección a la cafetería.

☀️


- pajaritos a volar, cuando acaban de nacer, el mayor se moverá, chu chu chu chu~

HoSeok está hasta bailando como la canción dicta, así que cree que lo mejor sería dejar de ver esos videos infantiles tantas veces con Ggukie.

rodeando la taza de café caliente con las manos, trata de alejar el frío de su cuerpo, y mientras sale de la cafetería bebe pequeños sorbos disfrutando de cada uno en el acto.
llega a la mitad del pasillo y la mirada que se clava directo en su nuca hace que su burbuja de tranquilidad estalle de repente, voltea y, ah sí, el señor Kim.

hay dos cosas para decir aquí: HoSeok no es ciego y tampoco es idiota así que claramente notó las miradas del gerente desde la primera semana que empezó este trabajo, y no es como que le moleste, sólo lo deja pasar y se dice a sí mismo que mientras ponga límites todo estará bien. aunque, para ser sinceros, a HoSeok le encanta demasiado la idea de que un hombre tan apuesto haya puesto sus ojos en él, sólo que no lo admite.

gira todo su cuerpo a su dirección y le regala una sonrisa amable. - buen día señor Kim.

TaeHyung parece salir de un bloqueo mental, al reaccionar pone una de sus mejores sonrisas radiantes y responde de igual manera: - buen día Jung, ¿c-cómo va la mañana?

trata de actuar normal, cruza los brazos para intentar lucir casual pero todo se queda en un "tratar" ya que parece maniquí mal acomodado. Seok disfraza la risita burlona que iba a soltar por una más amigable.

- todo bien, y espero lo mismo por usted. si me disculpa, tengo que ir ahora a empezar mi trabajo, con permiso, que tenga un buen día. -hace una breve reverencia y se retira.

mesa para siete.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora