Capítulo V

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-Jajajaja, qué estúpida eres
-¡Ash! No entiendo porque te cuento si sólo me insultas
-¡Oh! ¿Te deprimiste?
-...
-¡No llores!- la abraza y la acerca a su pecho- No era mi intención hacerte sentir mal, perdona, sabes que te quiero muchísimo, pero creo que deberías ir más despacio, ¿No lo crees?
-¡Más despacio! ¡¿Cuánto más tengo que esperar?! No es la primera vez que tenemos un acercamiento como ese, pero parece que el universo está en contra mía y lo arruina
-¿Ella no te ha dicho nada?
-...No- volvió a ponerse triste.
-Dime algo, ¿Tú crees que ella sea...?
-No lo sé, aghh, es difícil, en ocasiones creo qué hay algo, no me lo dice pero lo siento...¿Tú me entiendes, no?
-Lo entiendo, pero sabes que no puedes suponer las cosas o es que acaso quieres que te recuerde mi antigua decepción amorosa, las cosas no terminaron bien y tú lo sabes
-Ya lo sé, pero, ¿Que puedo hacer?. No dejo de pensar en ella, la quiero y ese sentimiento crece cada día más, no dejo de verla en clase y me encanta ver su sonrisa, su cabello, su esbelta figura, su inteligencia, su elegancia, su...
-Bien, bien, ya entendí, pero sin babear
-Jajajaja, eres un tonto- lo golpeo en el hombro.
-Lo sé, soy igual que tú
-¿Qué debo hacer?
Los dos se quedaron viendo al horizonte
-¡Ya sé!
-¿Eh?
-Déjamelo todo a mi- la tomó del hombro- no te preocupes, yo te ayudaré y tú ocúpate de estudiar
-¿Qué harás?
-Confía en mi
-La última vez que confíe en ti, terminé con un chichón en la cabeza
-Bueno, no es que la ocupes mucho
-Eres un...-comenzó a golpearlo.
-Jajajaja- la abrazó y le dio un beso en la cabeza.
-Gracias
-Bueno, me voy- se paró de la banca.
-Regresa con cuidado- él se estaba yendo cuando ella le tomó la mano- oye, una duda
-Dime
-¿Cómo entras?
-Por la puerta, duh
-!No me refiero a eso!- infló sus cachetes- me refiero a que cómo le haces para no ser descubierto, los hombres no pueden entrar aquí.
-Ahh, ¿Eso? Pfff- se estiró y la volteó a ver- yo tengo una promesa que cumplir.
Aprecio una nube blanca y Akko vio correr a un felino negro.
-Suspiró- Espero que no sea nada malo, Jiro

En el comedor

-¡Akko! ¡Akko!- gritó Lotte.
-¡Ya voy!- corrió al comedor y se paró enfrente de Lotte.
-Cuántas veces te he dicho que no debes correr por los pasillos- le dio un pequeño golpe en la cabeza con su libro.
-¡Auch! Eso dolió, Diana- se quejó Akko y sonrió.
-Nunca cambias- le sonrió - ¿En dónde estabas?
-Estaba con la profesora Ursula- tomaron asiento las dos.
-Vaya que la profesora te ha mantenido ocupada últimamente- comentó Lotte.
-Algosh- respondió la castaña, pasó el bocado de comida- pero pronto acabará
-Hola chicas
-Hola, Hannah
Las chicas comenzaron a hablar muy amenamente, Akko vio a Amanda y le gritó para que viniera a comer pero ella sólo miró de reojo y se fue.
-¡¿Qué le pasa?! Me ignoró- se quejó la castaña.
-Tal vez está cansada- contestó la de anteojos.
-La entiendo, tratar con Akko todo el día agota a cualquiera- repuso Sucy.
-¡Hey! Eso no es cierto- hizo un puchero- desde hace días se comporta muy rara, ¿Constanze, sabes lo que le pasa?
-No lo sé Akko, últimamente llega tarde- respondió su stanbot.
Hannah miró el reloj y se levantó de repente.
-Me tengo que ir
-Vaya que eres impaciente- comentó Bárbara.
-¡No...no es por eso!- contestó Hannah sonrojada.
-Estás toda roja- se burló la pelinegra.
-Es verdad- repuso Diana.
-Cla...claro que no, mejor me voy, las veré después- se alejó del comedor.

🍂🍂🍂
-¿Así que soy rara?- recodaba aquel momento, mientras estaba recostada en su cama.

Flashback
-Jajajajaja, buena broma- comentó Hannah con una gran carcajada- además a Akko le gusta Andrew, ellas no tienen gustos así
-¿Así?
-Umm, ya sabes, raros
Las facciones de Amanda empezaban a tornarse serias
-Qui...quiero decir...diferentes- contestó con nerviosismo Hannah.
-Supongo que tienes razón, ¡Aghh, qué pereza me da al hacer esto! Me voy.
-¡Espera! Me tienes que ayudar- corrió a la puerta de la biblioteca- ¡Amanda!- gritó- ahh, ¿Qué le sucede?
Fin del flashback

-...Estúpida
Amanda estaba triste, no quería aceptar que recibió un golpe muy duro de una persona estúpida, de las que ella odia porque juzgan a los demás sin conocerles...pero le dolía más el hecho de saber que no podía odiar aquello que anhelaba desde hace tiempo.

                                 ⛩🎠🌗

Minutos después, el reloj sonó en señal de que la hora de comer había terminado, todas se levantaron para ir a sus respectivos lugares. Sucy se dirigió al laboratorio de la profesora Lukić, Constanze se fue a su laboratorio, Lotte fue a su habitación acompañada de Bárbara para hacer su tarea y otra vez volvían a quedar solas Diana y Akko. Caminaban por el ala sur de la academia.
-¿Hoy te toca guardia?
-No
-Oh, ya veo. ¿Entonces estás libre?
-No
-Mmm
El semblante de Diana estaba serio, Akko se sentía incómoda, sabía que algo pasaba, por un momento pensó que Diana estaba molesta con ella; por aquella ocasión en que se quedaron estudiando hasta tarde en biblioteca, y Diana fue a buscar un libro, el cual fue encontrado por Akko primero y al ver a Diana concentrada en buscar el libro, la sorprendió por detrás, al tomarla de la cintura y susurrándole al oído que el libro estaba en su manos.
-En realidad- sacó a la castaña de sus pensamientos- tengo que ir a la oficina de la directora. Mañana vendrán algunos representantes del consejo de magia
-¿El consejo?
-Sí, al parecer, el Torneo Lunar tendrá más peso este año, vendrán más escuelas, con rivales más difíciles y ahora que saben que el sello del Gran Triskellion fue roto, buscarán derrotar a Luna Nova por la fortaleza que representa
-Ya veo- Akko se detuvo de repente y recordó la advertencia que le dijo Jiro en la mañana, (ten mucho cuidado con los que consideras tus amigos, también con tus compañeros y maestros).
-¿Akko?
-Lo mejor será que te dejé hacer tus cosas, no quisiera molestarte, jajaja, además parece que tienes muchos pendi...-pero Akko no pudo terminar de hablar.
-Todo saldrá bien- Diana la atrajo hacia su cuerpo y la abrazó- estamos contigo, yo, yo...estoy contigo, confía en mi, te ayudaré así como tú lo hiciste conmigo
-Di...Diana? (¡Me está abrazando! Ella comenzó el abrazo, no quiero arruinar el momento pero...)
-Mmm.
Diana pegó su frente en el hombro de la castaña, no lo soportaba más, el deseo de querer tenerla cerca crecía más y más, la apretó más a su cuerpo
-(¿Qué me pasa? No lo entiendo, jamás me he sentido así, hay algo que quiero, pero...¿Qué es?)
Lentamente sus manos empezaron a descender hasta llegar a la cadera de la castaña.
Akko no lo soportaba, quería salir con Diana a la puerta más cercana y pasar con ella la noche entera, no quería interrupciones, no quería a nadie más, sólo la quería a ella.
-Diana...
Akko respiró cerca de su cuello y le dio una pequeña pero rápida caricia con sus labios, con la intención de incitar a la rubia, lo cual no se hizo esperar. La rubia sintió erizar su piel y un ligero cosquilleo en todo su cuerpo, provocando que sus manos rodearan el cuerpo de la castaña, sentía el calor subiéndole, el aroma de su perfume, su cuerpo y...

-¡Miss Cavendish! ¡Miss Cavendish!

Líneas del tiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora