Recuerdo bastante sino que mucho sobre ti y eso duele. Porque el recuerdo de que dolías es pesado y daña abrutamente la felicidad de mis días, pensando lo duro que es morir y aun así seguir acá, de pie—lejos o afuera.
Y bien supieras que tu mirada era glaciar que al derretirme era amor. Con el frío del verano, con el calor del invierno... eras una serie de contradicciones que decían "Para ti" seguido de "primero mí". Y entonces lo siento, nunca quise sino ser importante, para ti—por mí.
Por lo poco o mucho que hayas subsistido entre mis pensares, sigues siendo un deseo que encuentro más bien como de ensueño. Lograr que me quisieras fue un milagro después de todo... ¿cómo iba a esperar que te quedaras? Quizá si también te hubiera entregado mi alma, hubieras pensado no irte por... un par de años (?) Pero no valía la pena, moriría sin mis órganos vitales; pero antes hubiera aceptado arrancarme la vista y sus lagrimales para evitar llorarte, mirarte.
YOU ARE READING
La carta
PoetryEra un escrito que volvía a un hombre alguien mortal. En sus ratos libres pensaba sobre cómo morir, sobre cómo dejar los recuerdos fluir a un pasado tan ajeno como lo eran sus amistades más viejas. Deseaba un mundo a lo utopía donde vivir no fuera t...