My Boyfri[end] - Yumark

一

—En la teoría de las ideas y alegoría de la caverna de Platón, nos explica que la única forma de acceder a la realidad y a la verdad es a través de la razón...

Viernes. Última hora del día. La clase más aburrida y pesada con el profesor más tedioso de toda la preparatoria.

Dos semanas habían pasado desde que había comenzado el semestre y Mark ya estaba cansado de las clases de filosofía.

La cabeza le dolía y estar sentado hasta atrás del aula no le favorecía mucho ya que no alcanzaba a ver bien el pizarrón, pero su amigo Yukhei insistió en sentarse allá ya que según él era más fácil copiar en temporada de exámenes.

No era muy fan de sentarse en la parte de atrás del salón, pero no iba a negarlo. Mark era de esos estudiantes rebeldes —de una manera sana—, que le gustaba divertirse, que salía de fiestas, pero nunca dejaba sus estudios de lado.

El segundero de su reloj que tenía posado en su muñeca izquierda parecía avanzar más lento. Alcanzaba a escuchar el leve "tic tac" de una manera más relentizada que solo hacía desesperarlo más. Nunca antes había querido que una clase terminara ya.

Volteó a ver a su amigo a su izquierda y este también lo vio. Mark rodó sus ojos cansado de escuchar la insoportable voz de su profesor y Yukhei solo rio también burlándose.

—Ya estoy harto de este señor —moduló Mark con su boca.

Yukhei empezó a reír teniendo cuidado de que el profesor no los escuchara.

—Yo también

—¿Qué plan para hoy?

Yukhei dio un vistazo rápido a su celular. Sonrió de una manera pícara.

—Te explico después. Primero necesito reunirme con Jungwoo.

—Besatelo ya —murmuró burlándose de su amigo.

—¿Quién dijo que no lo he hecho? —susurró sacando la lengua divertido.

—¡¿Qué?! —expresó.

—¡Joven Mark Lee! —regañó su profesor.

El timbre hizo de las suyas salvando a Mark de una probable detención por quinta vez en la semana.

—¿Nos vemos dónde siempre? —preguntó Mark guardando sus cosas con velocidad antes de que su profesor llegara a su asiento.

Yukhei asintió sonriente mientras guardaba sus cosas con calma. A él no le tocaría castigo hoy.

—Hora de correr.

Después de escuchar las palabras de su amigo, Mark colgó su mochila con rapidez y comenzó a correr con deprisa saliendo del salón de clases ignorando los gritos de su profesor llamándolo.

Ya lo castigaran después...

~・・・~

Yuta estaba sentado a fuera del edificio de la facultad de contaduría esperando a que cierta chica saliera de ella. Cuando por fin apareció, se colocó de pie y caminó de prisa con una gran sonrisa hasta ella.

—Hola preciosa... —saludó a su novia robándole un cálido beso consiguiendo ponerla colorada.

—Y-yuta... —mencionó su novia algo cohibida.

—Te extrañé...

—Yo igual. El nuevo semestre de la carrera me está matando. Que alegría que ya sea el último y finalmente me graduaré.