Parte - 20

2.5K 193 58
                                    

Sigue Narrando Tn.

Estaba preparando mis cosas para ya irme de este depresivo cuarto de hospital y llegar a mi casa sola como siempre.

De un lado no me sentía tan mal ya que Janet y Paul pasarían lo que queda de la tarde conmigo viendo películas y ensayando la canción que audicionare para la clase de musica, también invite a Emili pero dijo que esta en el parqué de diversiones con Jhon, estaba feliz por ella, feliz por que ese que Jhon la protegerá y querrá mucho y si hablamos de mi....no podemos decir lo mismo.

Me estaba colocando mi suéter morado que llevaba desde un principio antes de ponerme la bata de hospital que no venia ningún caso hacerlo pero ellos me obligaron; ya estando lista y abrigada, tomé la guitarra que Paul dejo en la camilla y mochila que contenía los cuadernos que mis dos amigos me obsequiaron.

Tal vez piensen que deje la tarea y los deberes escolares asta el ultimo pero nobles así, hice todo lo que tenia que hacer esos cuadernos mientras no estaba en análisis o en mi hora de comer, fue una buena ventaja ya que me distraía bastante haciendo ecuaciones infinitas y paráfrasis de las demás materias, ¡asi es! Como toda nerd soy responsable de cualquier forma, así que tengo el domingo libre.

Ya estando completamente lista, salí de ese Crato de hospital y fui a darle las gracias al doctor y enfermeras por "ayudarme", le pregunte a la recepcionista si mi madre pago la cantidad de los días que estuve aquí y dijo que si, salí de ese hospital y para estúpida mala suerte estaba lloviendo brutalmente.

Odio que llueva, me asustan los truenos y de seguro Pescare otro resfriado que por cierto el que tengo aun no termina.

Salí resignada a mojarme y camine a paso veloz a la estación de autobuses que por cierto estaba un poco lejos, el clima empezó a empeorar ya que estaba haciéndose mas airoso y la costas comenzaban a dolerme, esta vez ya estaba corriendo asta que por fin llegue a la estación de autobuses cuándo subí a el que me llevaba a mi casa competente empapada, la gente me miro como un bicho raro, algunos asco, otro sin parpadear y algunos con sonrisas burlonas; no me sorprendían sus estúpidos comportamientos retrógradas ya que estoy más que acostumbrada a algo como esto.

Me senté en un lugar de el frente y recargue mi cabeza en la ventanilla para después cerrar mis ojos y sentir que mi alma descanse de todos lo que paso en este extraño día.

Pasaron unas cuantas horas de trayecto, asta mi casa y cuando llegue un anciana toco mi hombro y yo desperté de inmediato, le di las gracias y salí rápidamente tomando mi mochila y gran estuche para salir por la puerta automática de el gran automóvil.

Estaba muriendo de frío y me sentía totalmente deprimida tanto que asta salieron lágrimas de mis ojos y mis ganas de destrozarme a llorar aparecieron, no se que me pasaba pero todos los maltratos y descuidos que e recibido han sido tan rápidos que asta presiento que vendrán más, no encontraba una salida y al parecer no la habrá para mi.

Entre a mi casa y cuando recién cerré la puerta mis piernas no aguantaron más y caí al piso para llorar como una idiota, tenia tantas ganas de gritar con toda mis fuerzas asta que lo hice, gritaba y gritaba con tanto dolor que asta empezaba a quedarme afónica.

El teléfono de la casa empezó a hacer su típico ruido tímbrico y yo simplemente lo quise ignorar y seguir Muriéndome en mis lágrimas pero este no dejaba de hacer su molesto sonido estúpido; me levante de mala gana toda empapada y mis ojos cristalizados, descolgué el teléfono y escuche su voz, su voz....

– Hola?...Olivia? – dijo el con su voz ronca.

–....Pa....pi? – dije con dificultad ya que mi voz estaba entrecortada.

Casados a la fuerza ( Michael Jackson y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora