Mientras se dirigían a la casa:
-Pero no sabemos dónde está. Quiero decir, sabemos que está en México. Pero en qué parte? Por dónde empezamos?-preguntó Ñoño.
A la mañana siguiente:
Todos estaban vistiéndose y preparándose para la fiesta, y Ollie salió de su cuarto, ya que quería bajar las escaleras. Pero, al pasar por la puerta de la habitación de la Chilindrina...
-Chavo. Subeme la cremallera-
Ollie se acercó a ella y mientras le subía la cremallera, tuvieron una pequeña conversación.
-Una fiesta, en estos momentos. Con todo lo que está pasando-dijo ella.
-Mas razón para celebrarla, con todo lo que está pasando-siguió él.
Entonces, ella se dio la vuelta, se miraron a los ojos, y se abrazaron. Al cabo de unos segundos, entró don Ramón que llevaba una taza de café en la mano. Mientras tanto, Ollie y la Chilindrina seguían abrazados.
-Buenas...-dijo don Ramón mientras los miraba.
Ambos se percataron y sin decir nada, la Chilindrina se fue bajando las escaleras a toda velocidad.
Ollie y don Ramón se miraron fijamente.
-Conque abrazando a mi hija, eh?-siguió Ramón.
Ollie salió corriendo y don Ramón siguió bebiendo café.
Al anochecer:
Ramón, Édgar y Rubén lograron montar una carpa, y allí todos empezaron a comer y bailar. Ollie estaba en la habitación leyendo un libro, pero de pronto, Quico entró en la habitación.
-Vamos, Chavo-
-A dónde?-
-Pues a la fiesta-
-Vale...-
Bajaron a la carpa, y se encontraron a la Chilindrina.
-Hola-dijo ella.
-Hola, Chilindrina-respondió Quico.
-Qué te pasa, Chavito?-preguntó la Chilindrina.
Ollie no contestaba, estaba completamente empanado.
-Chavo, te estamos hablando-dijo Quico mientras le empujaba.
-Ah, sí. Que decíais?-dijo él.
-Nada-contestó la Chilindrina mientras se reía.
Al cabo de una hora:
La Chilindrina estaba en el sofá del salón, hablando con Quico, y en la cocina, estaban la Popis y Paty.
-Todos deben de estar pasándolo bien-dijo Paty.
-Sobre todo el Chavo y la Chilindrina-añadió la Popis.
-Por qué lo dices?-
-No te enteraste?-
-De qué?-
-Pues que Ñoño dice que la Chilindrina y el Chavo están saliendo-
Paty quedó sorprendida, no sabía qué decir.
-Espera, voy a hablar con ella-siguió la Popis.
-No, no. Ya voy yo-dijo mientras tiraba del brazo de la Popis.
Paty se acercó a la Chilindrina y Quico. Estos dos últimos estaban contándose chistes, y no podían parar de reír.
-Chilindrina-dijo Paty.
-Hola, Paty. Dime, qué necesitas?-
-Hay algo entre tú y el Chavo?-
-Qué quieres decir?-
-Quiero saber si sois...-
-Ah, sí. Pero eso desde hace mucho-
Paty se puso un poco triste, pero trató de seguir hablando.
-Y por qué motivo?-preguntó Paty.
-Amistad-contestó la Chilindrina.
-Quieres decir que no estás enamorada de él?-
-Claro que no. Yo no saldría con él ni aunque me dieran un millón de pesos-
-Qué bueno, Chilindrina-dijo Paty y echó a correr a la habitación del Chavo.
-Y a esta qué le pasa?-preguntó Quico.
-No lo sé-contestó la Chilindrina.
-Chilindrina-dijo doña Clotilde.
-Voy a ver qué quiere-dijo la Chilindrina mientras se levantaba del sofá.
-Te acuerdas cuando me llamabas bruja?-preguntó Clotilde.
-Lo siento, doña Clotilde. Me arrepiento mucho-contestó la Chilindrina.
-Tranquila. Pues resulta que tú tenías razón, yo soy bruja-
La Chilindrina quedó sorprendida.
-Y por eso quiero que tengas esto-siguió mientras le daba un amuleto-Mientras tengas este amuleto, podrás teletransportarte al lugar que tú quieras-
-De verdad?-
-Sí-
La Chilindrina se quedó mirando el amuleto por unos segundos.
Mientras tanto, en la habitación de Ollie...
Paty entró sin avisar, y vio a Ollie leyendo un libro.
-Chavo-dijo ella.
Ollie se asustó tanto, que cerró el libro con mucha fuerza.
-Ah, eres tú-dijo él, aliviado-Cómo has abierto la puerta?-
-No te acuerdas de que sé inglés?-
-Y?-
-Pues que el inglés te abre muchas puertas-
Ollie no pudo evitar sacar una sonrisa.
Mientras tanto, afuera de la casa...
Estaban las hermanas de doña Florinda, junto con esta última, Édgar y Rubén.
-Seguro que no os quedáis?-preguntó Florinda.
-No, Flor, no-contestó la hermana mayor.
-Estaba todo riquísimo-añadió la menor.
En ese preciso instante, Rubén vio algo moverse por los maizes.
-Rubén, qué ocurre?-preguntó Édgar.
-Profesor?-añadió Florinda.
Mientras tanto, Ollie y Paty...
-Se ha ido Ñoño a la cama?-preguntó ella.
-No. Tiene pinta de estar en su habitación, probablemente dibujando-explicó él.
Ella miró la pierna derecha de Ollie, y vio un pequeño corte.
-Cómo te has hecho eso?-preguntó ella.
-Jugando fútbol-contestó él.
Ambos se miraron a los ojos.
-Feliz Navidad, Chavo-
-Feliz navidad-
Y justo cuando iban a besarse, dispararon a la ventana. Por suerte, ambos la pudieron esquivar.
Los 2 se asomaron por la ventana, y vieron como la casa era rodeada por fuego.
Abajo, Florinda, Rubén y Édgar vieron a Alberto.
-Ja!-dijo Alberto, y echó a correr hacia el campo de maíz.
Ollie lo vio, y salió corriendo por la puerta, seguido por Paty.
ESTÁS LEYENDO
(Primera saga, cuarto libro) El Chavo del 8 y la guerra mexicana pt.1
Short StoryLa batalla entre México y Estados Unidos finalmente llegó. Hay muertos por toda la calle, las apuestas nunca han estado tan altas y no hay nadie que esté a salvo. Pero es nuestro Chavo el que debe hacer su último sacrificio para verse las caras con...
