Déjame ser el padre.

No quiero que te vayas

   Desde pequeñas Rainbow siempre busco cuidarme, no importaba cual era la situación, desde chicos que me molestaban hasta cuando mis padres me dejaban sola porque Zephyr tenía alguna cosa extraña y me ofrecía quedarme en su casa para que no estuviera sola, pero ahora a eso se lo llevamos a un nuevo nivel, teniendo en cuenta que quiere cuidar también de la persona que está dentro de mí. Leí alguna vez en uno de esos libros que me regalo Rainbow, "El amor verdadero tiene sus sacrificios, tienes que dar la mitad de tu piezas y a cambio esa persona también dará la mitad de las suyas, porque el amor se trata de dar y recibir, aun si pierdes todo tienes a esa persona pero debes de saber que esa persona también estará dispuesta a dar la mitad de sus piezas por ti..." Se sin lugar a dudas que mi peli arcoíris es capaz de dar hasta la últimas de sus piezas por mi, me lo ha demostrado un millón de veces pero a pesar de que yo también soy capaz nunca se lo he podido demostrar, así que no creo que me volvería digna de ella, digo, ella sabe que soy vegetariana y a veces trata de comer carne frente de mi, eso es algo de apreciar pero conociendo que ella ama la carne, se podría decir que la obligo a comerla frente de mi, no quiero que deje de comer algo que le gusta por mi.

   Otro ejemplo sería los libros que me regala, se que Rainbow odia... ¡Odia! Las historias de amor "Son demasiado clichés y cuando no son clichés es demasiado empalagosa... Si consigues algo que no sea así lo leeré" Pero aun así me los compra porque sabe que yo los amo, nunca llegue a entender porque ella hacia esas cosas, como por ejemplo cuando rechazaba esas declaraciones que le hacía, los dejaba de lado como si fueran solo cosas de ayer... Sin importar si fueran chicos o chicas, por otra parte yo solo hacia pequeñas cosas como ver esas películas violentas que le encantan, ir a los eventos de Halloween, despertar temprano para acompañarle a comprar la Sidra de temporada, sigo viendo que no he hecho nada por ella. No importa si son cosas pequeñas o sin valor alguno, ese brillo en sus ojos magentas estaría presente sin tener ninguna intensión de querer desaparecer, me encanta verlos porque me hacen sentir como si mis problemas se esfumaran como si ya no fuera esa chica asmática con timidez, incapaz de defenderse y completamente vulnerable, me gustaba cuando compartíamos cama porque me dejaba dormir en su pecho y me arrullaba con su respiración.

    La verdad es algo que a este punto sería difícil de ocultar, desde hace muchos años... No sabría decir cuántos en realidad, pero se que son varios, estuve enamorada de Raiinbow Dash, solo que como es mi mejor amiga me decidí por desistir, no es que me importara que ella sea una chica, ese no es el problema, el verdadero problema es que soy un cero a la izquierda en comparación con ella, no soy buena en deportes, soy timida, apenas y notan mi presencia en el salón, no me considero atractiva, no me considero que sería uno de los prospectos ideales para ella, por eso cuando conocí a Discord decidí salir con él, un hombre mayor, estudiante, elegante y... "bien portado" me había notado finalmente, no me molesto comenzar a salir con ese chico... Al principio todo bien, justo como lo planeaba, viéndolo bien no consideraba que era un enamoramiento, solo un capricho, un capricho para poder olvidar a quien en verdad amaba.

    No digo que lo que hice estuvo bien, elegí la salida del cobarde para no tener que enfrentar mis problemas de frente y como dice... "El flojo trabaja el doble" pues en este caso sería, "el que huye de sus problemas solo consigue mas" y nuevamente fue Rainbow la que acudió a mi auxilio... Sonreí en lo que colocaba la mano sobre mi vientre, ahora es como si hubiera solo un pequeño bulto allí, todavía iba por el 2 mes así que no sería tan notorio hasta ahora- Claro, puedes preguntar lo que sea- Dijo Rainbow con su vista al frente para asegurarse de no tener ningún accidente en el camino.

-¿Porque tiraste esa carta sin ni siquiera leerla?...- Le pregunte sin rodeo alguno, en verdad me daba pena por la chica de la carta, tan solo imaginarme que sería esa chica, ya me daba ansiedad.

-No tenía interés en su contenido...- Se encogió de hombros sin siquiera desviar la mirada del camino- No necesitaba leerlo-

-Pero... Era una carta de amor ¿No te interesaba ni un poco saber quien era la persona?-