Mujer.

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Sylvie y yo estábamos en el umbral de la chimenea, la calidez nos invadía y el silencio de la noche nos hacía sentirnos los únicos en este mundo, ambos nos habíamos tranquilizado al saber que ninguno de los dos dejaría a el otro, me levanté para traer la botella de vino y regrese a mi lugar, Sylvie nuevamente se sentó en mi regazo; serví una copa de vino y lo tragué, ella me miro con curiosidad.

Doctor: Mmmmm -la observé- ¿Quieres probar?.-le pregunté.

Sylvie: ¿Puedo?.-respondió feliz.

Tome otra copa y le serví un poco, no se si está bien darle alcohol a una chica tan joven como Sylvie.

(estoy seguro que un poco no le hará ningún daño.)

Sylvie miro la copa curiosa, la olfatio y después probó sólo un pequeñito trago, su semblante cambió de repente.

Sylvie: Es dulce amo.-su cara se iluminó. 

Ella tomó su copa con entusiasmo, antes de darme cuenta ya la había terminado. 

(supongo que no pasará nada malo si le doy otra ¿Verdad?)

La noche siguió transcurriendo, Sylvie tenía la cara colorada y reía con fervor.

(Creo que la deje beber demasiado)

Intente detenerla pero la veía tan feliz que al final me fue imposible.

Sylvie: Tome amo, esta es para usted.-extendió una copa.

La chica tomo su copa de un solo trago y dio un suspiro de satisfacción.

Sylvie: ahhh...fuuu...¡Qué rico!.-estaba muy contenta.

Doctor: Lo está.-dije tomando un sorbo de mi propia copa.

Sylvie se quedó callada unos segundos, apretó su copa y hablo.

Sylvie: Amo....tu no piensas en otras mujeres ¿verdad?.-dijo de repente.

Doctor: Por supuesto que no Sylvie pero ¿por que piensas eso?.-estaba confuso.

Sylvie: Es sólo que....no tengo grandes pechos como la srita. Aurelia ni soy tan bonita como la srita. Nephy......-su voz comenzaba a sonar melancolíca.

Doctor: Me encantas Sylvie, me gusta todo de ti después de todo yo te amo muchísimo.- sonreí al hablar.

Sylvie:......-sonrió- el vino está delicioso, es muy dulce.-su voz volvió a sonar animada.

Doctor: Es muy dulce pero tanto como tú.-puse mi mano en su mejilla.

Ella me miro con ternura, su calor corporal se extendió por la palma de mi mano.

Sylvie: Amo, ¿Quiere un poco más de vino?.-cogió la botella.

Doctor: Claro.-dije emocionado.

Para mí sorpresa Sylvie tomo un gran trago directo de la botella y me beso profundamente, pude sentir sus pequeños y suaves labios impactarse contra los míos, su lengua se movía a través de mi boca y el vino se vertió directo en mi garganta, siguió así por unos segundos más hasta que poco a poco me liberó.

Sylvie: ¿Qué le pareció amo? Rico ¿Verdad?.-su respiración estaba agitada.

El profundo beso de Sylvie en verdad me puso de humor, mi miembro estaba duro como una roca.

Doctor: Creo que está es mi nueva forma favorita de tomar vino.-le dije antes de volver a besarla.

La bese muy profundo, nuestras lenguas se encontraron la una con la otra y comencé a desvestirla, Sylvie no opuso resistencia, ya completamente desnuda le di la vuelta y la volví a sentar sobre mi regazo pero esta vez mi miembro se conectó con su parte especial, ella lo tomó sin ninguna restricción; estaba húmeda. Sylvie se quedó pasmada unos segundos y yo sentí como su interior me apretaba entonces acaricie sus pequeños pechos desde sus pezones hasta toda su extensión, Sylvie lanzó un chillido de placer; moví mis caderas más rápido y una de mis manos llegó hasta su parte más baja presionando su pequeño botón, ella se retorcio entre mis brazos pero no me detuve, pude ver que Sylvie arqueo se espalda pero antes de eso me detuve.

Enseñame ha amarte [Teaching feeling].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora