『 Same Love 』 Freddoy #FNAFHSDisabled

『 Capítulo 5』

— ¿Encontraste algo más?

— No, es lo único que estaba.

La adulta soltó un pesado suspiro, dejándose caer sobre una silla del comedor, atando su cabello en un moño bajo.

— ¿Cuando crees que podamos irnos de aquí?— Susurró Fred, tallando su brazo izquierdo.

Negó con la cabeza.— No sé... No sé si la mudanza pueda llevarse todo hoy, o tengan que venir mañana de nuevo...— Volvió a tomar en sus manos aquella carta que minuto antes había traído el castaño oscuro desde el buzón.

"Si piensan que esto a terminado, están muy equivocados.

Regresaré por ustedes."

El chico se abrazó a sí mismo, volteando a la sala, observando a su hermano hacer su tarea sobre el sillón, absorto de la conversación que su hermano y madre tenían.

— No hay que comentarle nada a Freddy.

Fred regresó su vista a con su madre, quien apretaba la carta con fuerza contra sus manos.— No me gusta ocultarle cosas.

— Ni a mi; pero es por su propio bien. Hoy lo noté menos decaído que los últimos dos días.

— Mamá...

— Encontraremos una solución, ¿si?— Se puso de pie y tiró la carta al bote de basura.— Iré con los de la mudanza. Dijeron que se llevarían la sala, cocina y ático el día de hoy; veré si se puede acelerar el paso.— Y salió de la cocina. Se acercó al castaño claro que, al momento de observar que alguien se acercaba, alzó la vista, sonriéndole a su madre después de que esta dejara un beso sobre su frente antes de salir de la casa, acercándose a los señores que se encontraban sacando las cosas de su casa para llevarlas a la nueva.

Sí, la noche anterior cuando el ojigris regresó de su "salida" con cierta chica rubia, Freddy le había comentado que ya tenían una nueva casa. Un familiar la tenía a la venta, así que no era muy necesario tener ya el dinero en mano para pagarla.

Fred se acercó de igual cuenta a su hermano, sentándose a su lado y recargando su cabeza sobre el hombro de este.

«¿Todo bien? Los noto algo raros»

«Nah, todo bien.» Suspiró. «Ya me aceptaron en un empleo.»

«¿Tan rápido? Los acabas de mandar hace unas horas.»

Rió. «Sí. Es en un pequeño bar a unos 10 minutos de aquí. Ocupaban a un músico de 8 a 11, así que quieren que vaya hoy; y si les gusta, me contratarán oficialmente.»

Sonrió. «Son muy buenas noticias. Yo iba a hablar con el director de la escuela, ya que vi que buscaban personal para el curso de lenguaje de señas; sólo que... pues no fuimos hoy tampoco a clases.» Rió.

«Y quien sabe si vayamos a ir mañana, es Viernes y la mudanza dice que no terminará hoy, a demás que tenemos que acomodar todo en la nueva casa.»

Se encogió de hombros. «Yo por mientras iré adelantando las tareas y trabajos.» Y regresó su vista a su cuaderno.

Fred volvió a suspirar y cerró los ojos.