Metro 4

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Dedicado a: amanda_kurocat

—nadie nos ve, no seas tonta putita, desnúdate.

Le hice caso y comencé a deshacerme de los botones de la camisa.

—eres muy lenta putita—se arrodillo en el suelo en frente mí y me quitó la camisa rápidamente, pero con cuidado de no romperla.

Luego prácticamente me arrancó el sujetador rompiendo uno de los tirantes.

Se inclinó sobre mí y me hizo acostarme en el suelo. Comenzó a masajear mis pechos y luego a chuparme los pezones. Nunca me lo habían hecho antes, nunca nadie les había dado tanta importancia a mis pechos, y el hecho de que me chupará los pezones de esa forma, prácticamente comiéndome las tetas y arañándome un poquito con los dientes me hacia querer explotar.

—todavía no te corras putitas, todavía no.

Sus manos descendieron hasta mis bragas, las aparto a un lado e introdujo dos dedos en mi sin cuidado alguno. Gemí

—¿te gusta cierto?

Asentí y comenzó a meter y sacar los dedos con fuerza

—¿le gusta a mi putita?

No podía decir nada porque metió un tercer dedo dentro de mí y mi espalda comenzó a arquearse. Estaba demasiado caliente y solo podía gemir.

Ese hombre ni siquiera se había quitado las gafas ni el gorro, me había manoseado y puesto muy caliente y ahora estaba metiéndome y sacándome los dedos en el suelo de la estación de metro.

—abre un poco más las piernas— le hice caso y cerré los ojos. Se sentía tan bien la sensación que podía hacer cualquier cosa que el deseara.

Pude darme cuenta de que se estaba acomodando, pero desde luego no estaba preparada para que me penetrara. Chillé, pero luego me acostumbre.

Me estaba follando con todas sus fuerzas mientras me llamaba putita y me apretaba las mejillas hasta dejármelas rojas. Metía y sacaba y mis piernas se abrían para que pudiera entrar mejor y sentirlo bien profundo. El solo me preguntaba entre gritos si eso era lo quería, porque era una niñita muy putita y yo le respondía que si, que siguiera, también entre gritos.

Llego en un momento en el que nos movíamos muy rápido, ambos enloquecidos y yo encantada por la sensación de su miembro en mi interior, sentí todo mi cuerpo estremecerse y temblar, sentí como tenía un orgasmo mientras él se movía con tanto frenesí que sus gafas cayeron al suelo. Acto seguido también tuvo su orgasmo y sentí como vertía su semen dentro de mí.

Tenia los ojos en blanco, y su cuerpo estaba sobre el mío, el vestido con el pantalón suelto y yo desnuda de cintura para arriba y con las piernas bien abiertas. Cuando pude volver a recuperar completamente el conocimiento vi las gafas a un lado. Le miré el rostro y no me lo pude creer. Pestañee mas de veinte veces en un segundo pensando que me había equivocado, pero no.

—t-t-t-t-t...—no podía siquiera hablar

Sonrió, con esa sonrisa bonita que hasta ahora solo había visto a través de la pantalla del móvil. Se apartó y cuando sacó su miembro de mi interior pude sentir el semen resbalándome por los muslos.

—imagino que te gustó putita—volvió a sonreír

—t-t-tú...

Saco un pañuelo del bolsillo trasero de su pantalón, se limpió lo que quedaba de semen en su miembro y luego me lo tendió para que limpiara mis muslos. Lo hice, me puse de pie como pude y comencé a vestirme.

El ya estaba listo, se acercó y me beso. Fue un beso muy apasionado en el que aprovecho para agarrarme el culo con ambas manos, me metió la lengua hasta el fondo e incluso me mordisqueo el labio todo lo que quiso.

—Chri... Christopher Vélez

—en carne y hueso.—sonrió una vez más— Adiós putita.

Yo aún me estaba vistiendo, y no lo detuve, a no ser que se viera a un espejo no se iba a percatar de que tenia toda la boca manchada del rojo intenso de mis labios.

Terminé de vestirme y pensé un poco en mi situación:

No sabía en que estación del metro estaba ni como salir de allí. Solo que un desconocido comenzó a tocarme en el metro y resultó ser Christopher Vélez de CNCO

Cuando se lo cuente a mis amigas. ¿Me creerán? Espera, ¿Se los contaré?

No tengo idea, es todo muy loco 

FIN

Imaginator HOT, CNCODonde viven las historias. Descúbrelo ahora