Eynor (Historia De Un Mundo Lejano I)

Capitulo 1 (1\2)

Un nuevo curso empieza para los estudiantes de Eynor tanto para los que ese es su primer año como para los que ya llevan más tiempo y saben cómo es el funcionamiento del centro. Primero tienen que llegar y pedir las llaves de sus respectivos cuartos, después ya hay libertad durante el resto del día empezando las clases al día siguiente.

Luke mira su equipaje por tercera vez para que para asegurarse de no olvidarse de nada, siendo de las cosas más importantes sus cartas mágicas, es humano pero, Eynor también tiene espacio para la magia.

Después de eso, ya que se acaba de levantar coge la ropa que se va a poner para ir al baño y darse una ducha rápida. Se mira en el espejo en el espejo comprobando que no tenga muchas ojeras, ya que anoche tardo más en dormirse de lo que le gustaría.

Luke tiene el pelo negro con las puntas violetas, sin embargo, la parte que más llama la atención son su ojos, el derecho presenta un color rojizo y el izquierdo uno más bien azulado. Sin embargo, sin mencionar eso último se ve a sí mismo como un chico del montón con una complexión estándar y su estatura no es muy diferente a la de los chicos de su edad.

Se mete en la ducha, momento en el que se permite perderse en sus pensamientos sobre Eynor y las cosas que le esperan ese nuevo año, por suerte, no estará solo, tiene a sus amigos para acompañarlo. Los cuatro se conocen desde que eran pequeños, conectaron rápidamente y desde entonces no se han separado por muchos altibajos que haya habido a lo largo de ese tiempo, aunque, no loa admite, Luke no sabría qué haría sin ellos.

Sale de la ducha se seca con la toalla y después de vestirse saca el secador, dejando que el pelo se seque solo tardaría demasiado y si hay algo que no le gusta eso es llegar tarde a cualquier sitio siendo así que incluso llega demasiado pronto en algunas ocasiones.

Una vez que ya se ha secado el pelo y ha guardado el secador al siguiente sitio al que va es la cocina, sus padres Tammy y Adam también se encentran allí hablando de algo de manera animada, mientras que, se encuentran en medio de su respectivo desayuno.

-Buenos días-dice Luke abriendo la nevera para servirse un vaso de leche que calienta un poco en el microondas.

-Buenos días cariño, ¿Cómo estás?-pregunta su madre.

-Bien-.

-Eso es bueno, ¿estás listo para el instituto?-interviene esta vez su padre.

-Si estoy listo-se sienta en la mesa y alcanza los cereales.

-No tienes que ocultar tus nervios frente a nosotros-.

Como de costumbre, Tammy es alguien observadora y no le hace falta mucho para saber cómo se siente su hijo, por muy grande que sea esa coraza a su alrededor, como una defensa para impedir que le hagan daño.

-Bueno, puede que un poco nervioso sí que este-.

-Siendo el primer día de un nuevo curso es algo normal, lo sé por experiencia-dice Adam.

-¿Tú te has llegado a poner nervioso por eso?-pregunta Luke con curiosidad, siempre le ha visto como alguien en calma, por muy grave que sea la situación.

-Ya apenas soy nervioso pero, a tu edad cualquier pequeñez me ponía de los nervios-.

-Recuerdo el día en el que te me declaraste, te temblaba la voz-dice su madre evocando recuerdos de su adolescencia.

-Pero funciono-.

-Claro que funciono-.

Un amor que surge en el instituto y todavía dura para Luke es algo que le parece tan irreal, propio de una película románica, sin embargo, delante de él está la prueba de que puede ser algo cercano a la realidad.