Yo vivo.... en una casa pequeña, tengo una hermana mayor y.... mis dos padres estan juntos (a duras penas), tengo un cachorrito y un cotorro (que estuvo a punto de arrancarme la mano al menos 5 veces) .
Soy joven aun y mi vida sin importancia alguna para cualquier persona era bastante aburrida incluso para mi lo era a veces.
No vengo del planeta Kripton, no fui mordida por una araña radioactiva, no tengo una inteligencia privilegiada, no soy una princesa y no me comporto como tal, no tengo una historia de amor que deseara recordar y soy tan bipolar como el planeta tierra.
Tomen el riesgo de leer esta historia, tal vez les guste, tal vez no... y si desean hacerlo... adelante con el primer capitulo.
XXXX
Caminaba bastante nerviosa atravez del gran y antiguo complejo, guardaba dentro de si toda la historia de mi estado y eso me llenaba de orgullo y a la vez de miedo.
Entrar en esta escuela costaba venderle tu alma al diablo... afortunadamente yo pase el examen de ingreso. Orgullosamente ocupe el lugar 134 de los 400 disponibles... la unica de mi escuela que logro entrar y espero poder salir. La mitad de los chicos de mi ciudad y varios de otros estados hicieron la prueba y desgraciadamente fallaron.
No me sentia especial por esto, siento que simplemente adivine la mayoria de las respuestas y mas las pocas que sabia logre pasar.
Mis maestros me habian preparado durante las ultimas semanas de secundaria para poder pasar e ingresar y no pensaba desepcionarlos una vez adentro.
La verdad habia pensado dejar todo atras varias veces... pero tenia algo que hacer y personas que encontrar, debia intentarlo, tenia que tan siquiera darle un vistazo a como era por dentro, si alguien tan siquiera se parecia, me conformaba con que tuvieran la misma actitud que en mis pensamientos yo deseaba, no, yo dependia de que existieran era lo unico que me mantenia con vida... que impedia que cerrara los ojos una noche deseando que mi vida se fuera como un suspiro, que evitaba que mis lagrimas salieran a flote cada vez que los pensaba en ellos, que gritara, que mi otra yo...saliera y lograra su propósito de destruir todo con el unica arma que no sabia utilizar, las palabras, por que las palabras eran un arma bastante peligrosa y las que ella guardaba para absolutamente todos los que me rodeaban no eran exactamente lo que llamamos agradables....
-Estas aqui para estudiar no para hacer amigos, concentarte y tal vez acabemos el semestre- me murmure en voz baja mientras subia encorbada por las escaleras.
Mi uniforme estaba impecable bien puesto, mis zapatos nuevos lastimaban mis tendones aun cuando estuviesen cubiertos por unas calcetas blancas que llegaban a las rodillas. Llevaba conmigo el regalo de cumpleaños mas lindo que me dieron por mis XV años; una "mochila" de hora de aventura con Finn, Jake, arcoiris y la dulce princesa.
Acomode mis lentes por enesima vez aun bastante nerviosa y despues recorde.
**¿Donde carajos esta el F?** mi hermana se divertia contandome cuan malas personas podian llegar a ser los chicos de ahi y lo feo que le contestaban cuando recien entro buscando su salon.
Una chica de cabello lacio interrumpio mis pensamientos tocandome el hombro, era delgada y un poco mas pequeña que yo, llevaba consigo una libreta y un pin blanco en su sweter azul.
-Hola!- me saludo dulcemente con una sonrisa
-Hola- la salude de regreso, ¿ que digo ahora?
-¿Eres de nuevo ingreso verdad?- me pregunto, su voz se escuchava nerviosa, por alguna razon creo que me creyo ofendida y la verdad era que no, si no mas bien todo lo contrario
-Si...Yo..- ella volvio a interrumpirme soltando un gran suspiro
-Uff! Ok... am.. sabes cual es tu salon?- me pregunto, hasta entonces me di cuenta que del otro lado de las escaleras habia otra chica igual de sonriente. Al parecer estaban ayudando a los nuevos a encontrarse.
-Amm... no, soy... soy del F- se me estaba olvidando mi propio grupo
-Del F! Ohh yo tambien fui ahi! Vas en la isla, mira- camino unos pasos hacia su lado izquierdo y nos encontramos con un pasillo que daba a los demas salones
-Tu salon es ese de alla!- me dijo señalando con el dedo el salon donde habia hecho el examen de ingreso (si lo se, que gran coincidencia)
-Oh esta bien gracias!-le dije sonriendo me despedi y volvi a mis malditos pensamientos amargados y nerviosos.
**¿sera tan malo como me conto mi hermana? Digo... me dieron la bienvenida bien y todo pero, ¿mis compañeros seran tan malos?** #no vienes a hacer amigos!! Recuerdas?# me dijo mi voz interior. Aunque yo sabia que era una perra (por que si lo era! Mi coinciencia tomaba peores decisiones que yo) me tranquilice un poco.
Entre al salon, era aun mas pequeño de lo que lo recordaba y me sente dos bancas mas adelante que en la que me sente aquella vez, habian otros 4 o 5 chicos ahi bastante serios sentados en sus bancas sin moverse.
-Buenos dias...- murmure intentando ser amistosa cuando entre por la gran puerta, todos me voltearon a ver un instante
-Buenos dias..- murmuraron dos niñas que se habian sentado hasta enfrente y eso fue todo.
Un chico moreno y algo bajo llego unos minutos despues y se sento al lado mio, me hice la que no lo noto y me puse a dibujar por que dios! Si podia hacer algo para relajarme era dibujar aun que aveces tuviera un efecto contrario, pasaron otros cuantos minutos y otra chica entro al salon, paso a mi lado sin verme... se me hizo bastante familiar cuando vi su rostro de reojo.
Era algo grande, su cabello largo y lacio, sus ojos se veian cansados, no debio de haber dormido anoche por los nervios. Quito un termo que se encontraba en la banca de enfrente y lo corrio una banca mas adelante, se sento y se recosto en la paleta de la banca.
No queria molestarla, pero enserio se me hacia familiar. Cambie la hoja de mi libreta a otra en blanco y la toque con mi pluma de forma timida, ella volteo a verme confundida, crei que me golpearia la cara enserio. Dibuje rapidamente un gato en la libreta y se lo acerque ofreciendole la pluma.
Ella me vio y despues a la libreta arqueando la ceja #ja! No son ni las 7:02 y ya la cagaste!# se rio mi coinciensia. Ella se encogio de hombros y tomo la pluma con una pequeña sonrisa. Juagmos en silencio un buen rato hasta que ella se atrevio a hablar.
-¿Como te llamas?- me pregunto mientras marcaba una "0" en uno de las "casillas"-me llamo Sara- le conteste
-Como te llamas tu?- pregunte
-Mi nombre es Diana- me contesto de forma sencilla. DIANA!? mi corazon comenzo a palpitar desesperadamente y a todo ritmo
-Di, di-ana?- por pura suerte logre no sonar nerviosa
-Si- me contesto
-Bonito nombre...- entonces gane el juego
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Algo realista
Novela JuvenilNo mas dramas, no mas cliche, no mas felices por siempre hagamos algo real, creible y alucinante. Hagamos una historia contada por una persona sin nada que decir y mucho que contar Contemos una historia jamas contada.