Touch | Yutae

Complementos

Yuta se siente incompleto, se siente como un rompecabezas sin terminar.

Él necesita de Taeyong para estar tranquilo.

Taeyong lo complementa.

Esas caricias suaves y tiernas que propicia el mayor a Yuta le generan sentimientos que nunca antes había sentido.

Y cada caricia genera un sentimiento nuevo del cual aferrarse.

Sus manos se le habían grabado en la suave piel.

Pero el tiempo no favorecía a ninguno de los dos. Yuta tenía que ir al colegio y Taeyong a trabajar.

Tenían el tiempo limitado.

Cada minuto en el que estaban juntos era como bajar en un tobogán de arcoíris.

"Quédate, oh
Tú y yo, así mismo
Bebé, tócame, para poder sentirte
En este momento
Siento que crece por dentro
Este sentimiento, bebé, oh."

Cada vez que se veían, Yuta recitaba esas palabras. Y Taeyong se embriagaba con su voz.

-Señor Nakamoto, le acabo de hacer una pregunta. —La señora Min Yong hablaba con tono de voz elevado.

Yuta estaba desconcentrado, hoy a la noche se iba a encontrar con Taeyong y era lo único en lo que pensaba.

-Lo siento profesora Min, no le estaba prestando atención.

-No le está prestando atención a mi clase ¿Le parece aburrida? —Yuta asintió tímidamente.— Bueno, se puede ir yendo ahora mismo a dirección para que se lo cuente al director, y después vamos a hablar de los comportamientos que estuviste teniendo últimamente.

La profesora se acercó a la puerta y la abrió, invitando a Yuta a salir de la clase.

-Pero profe... —insistía.

-Pero nada, salga de mi clase.

-Vieja de... —Yuk-hei le golpeó el hombro, tratando de que su amigo no insulte a la profe, arriesgándose a que le amonestaran.

Después de clases.

-¿Cómo es eso de que estuviste en dirección? Bebé, ya varias veces te dije que evites conflictos con los profes que te caen mal. —Taeyong acariciaba la cabeza del menor.

-Odio a esa profesora de mierda. —Yuta se escondía en el torso de Taeyong.

-Hey, las malas palabras. —se miraron por unos segundos.— Escucha, lo más importante para ti ahora es el colegio, no quiero que termines como yo, bebé.

-Te amo, Taeyong Hyung.

-Yo más, Yuta-ssi. —Taeyong se acercó a la cara de Yuta, estando a milímetros de juntar sus labios. Pero se quedaron así, admirándose por un pequeño rato. Hasta que Yuta corta esa distancia, con un tierno beso.

Capítulos cortos.

-Mrcheann-