Max Nattapol, un hombre que sale a los bares de noche para encontrar un nuevo romance.
En una de esas noches conoce a una mujer y se sintió atraído por ella pero, ella no sintió lo mismo y le da un número equivocado.
Tul Pakorn empleado de un bar c...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El tiempo en el trabajo fue más largo de lo que pensé al parecer cuando alguien espera algo tan ansiosamente el tiempo se vuelve largo.
¿De qué quiere hablar conmigo? Ni siquiera se como mirarlo a la cara sin tener vergüenza.
Agarré mi teléfono y mire la dirección que el me había mandado y tome un taxi lo antes posible. En el camino no podía evitar mirar su foto de LINE tan sólo mirar su sonrisa me daba algo de calma y tratar de olvidar su forma arrogante de ser.
Baje del taxi y había una casa no tan grande pero era lo suficientemente grande para una persona ¿o tal vez dos?. Me acerqué a tocar el timbre pero antes de hacerlo el me abrió la puerta con una pequeña risa sarcástica.
"No tienes que tocar te vi llegar"
"¿Ahora me espías?" Respondí.
"No, te vi por mi ventana de casualidad"
"¿Estas esperando mi llegada?"
"Dije por casualidad ¿no entendiste?"
Tan solo su forma de hablar y esa "sonrisa sarcástica" me molesta.
Entramos a su casa y yo me senté en el mueble pero el empezó a mirarme con curiosidad.
"Hey mejor sientate en la alfombra acabo de limpiar los muebles y lo estas arruinando" Dijo.
"¿Por qué debería? Respondí.
"Sólo hazlo así podremos hablar más cerca, el mueble nos distancia."
Sin decir más me senté en la alfombra y el igual pero acercándose un poco a mi, estábamos frente a frente.
"Debo disculparme primero ¿verdad?" Dijo mirándome a los ojos.
"Deberías te hubiera golpeado ¡como te atreviste a drogarme!" No pude evitar mis reproches apenas cuando pude responderle.
"Hey calmate"
"¡enserio tenía ganas de golpearte!"
"¿Y por qué no hiciste?"
Un silencio incómodo nos rodeo a los dos, los siguientes segundos solo fue miradas. Intentaba no mirarlo a los ojos mirando cualquier cosa pero el me miraba con tranquilidad.
"No lo sé tal vez la droga me afecto".
"Estabas algo sobrio, no te di tanto"
"¡Entonces no lo sé!"
"¿Fue por el beso que te di?"
Tragué saliva al escucharlo, el decía la verdad.
Hecho una carcajada y respondió nuevamente.
"Yo había bebido de más por eso lo hice"
"¿Estabas borracho?" Pregunté.
"Un poco, por eso me disculpo"
"¿Eso es todo?"
"No" Dijo acercándose a mi rostro.
"¿Entonces?"
Iba a decir algo más pero el comenzó a mirar mis ojos y mis labios. Se acercó a mi oído.
"¿Puedes quedarte?" Dijo susurrando a mi oído.
"¿Por qué?"
"Sólo quédate"
Se alejo de mi y me hizo un gesto de amabilidad con un guiño.
"Ire a bañarme tu solo espérame aquí"
"Esta bien.."
Se levanto y se fue a su habitación cogiendo una toalla que estaba en su mueble.
No pude evitar quedarme quieto así que me levante. Tenía ganas de ir al baño así que comencé a buscarlo, habían harías habitaciones. Supongo que una de ellas debe ser el baño.
Abrí la puerta y lo primero que vi fue a ese sujeto en boxers frente al espejo.
"¿Te quedarás parado allí?"
Había quedo inmóvil, mi corazón empezó a acelerarse contra mi caja torácica fuertemente y emociones extrañas comenzaron a recorrer mi cuerpo.
"No" Respondí firmemente y caminé hacía el rápidamente.
Lo voltee hacía mi y sin pensarlo cubrí mis labios contra los suyos, me volví inquieto al esperar que me corresponda de la misma manera pero el no era tímido y no perdía el tiempo.
profundicé el beso, Tul gimió contra mi boca, me había correspondido. Entré en su boca lentamente, juntado su labio inferior en los míos y lo mordí suavemente. Sus labios se habían hinchado y entré con mi lengua, entrelazándome con la suya.
"Ah ..."
Se excitó rápidamente, me aferre a su cuello con fuerza. Me estaba devolviendo el beso. Comenzó a tocar mi pecho con la yema de sus dedos pero yo tomé de sus brazos y los coloqué por arriba de su cabeza apoyandolo contra la pared. El beso se volvía más y más profundo. Quería recorrer todo de el.
Un pensamiento consciente había recobrado en mí así que me aleje de el.
Al alejarme de el su respiración se había vuelto pesada y el solo me miraba limpiandose los labios con su mano.
"¿Querías que hiciera esto?" Pregunté.
"No claro que no."
"Lo siento fue culpa mía no sabía donde quedaba el baño así que me confundí.".
"¿Por qué me besaste?"
"No lo sé fue un impulso"
"¿Y porque te no seguiste?"
"¿Qué?"
"Deberías irte" Dijo tomando su toalla y abriendo la puerta.
Es como si hubiera cambiado de humor como si nada ¿el quería que llegará más lejos?
"Quizá otro día hablemos"
"¿Dije algo malo?"
"Vete."
Sin decir más abrí la puerta sin voltear a mirarlo y salí de su casa.
Tome un taxi y fui a mi habitación me tire a la cama y mire al techo por un largo rato.
